Eras tú, No me dejes... (TERMINADA)

Capítulo 21

Desaparecida...

Todo listo señor, ya está en nuestras manos, la luna es nuestra, habló con voz de satisfacción aquel oscuro hechicero mientras observaba con desdén a su jefe.
--Dónde está? custionó mirando fijamente al hechicero, -- completamente dormida en la habitación que usted dispuso señor, respondio serio.
Perfecto, tienes lista la pócima de la memoría? porque lo haremos a media noche y mañana empieza el show, río con sarna, aspirando aire, como si realmente dependiera de este para vivir, -- si señor, lo dijo haciendo una pequeña reverencia mientras salía de la oficina rumbo al sótano donde tenía su laboratorio de pociones y libros de magia negra.
 
 

(...)

Tres horas antes del secuestro...
 
La pareja tomó una rutina cómoda para el hermano de Enzo junto con su compañera para poder hacerse cargo de la manada en forma de turnos de fines de semanas alternos, y funcionaba muy bien, así las dos parejas de alphas y lunas podían compartir y descansar más tranquilamente.
La relación de los hermanos Russo siempre ha sido la mejor, aprendieron a respetarse en opiniones e ideas y así lograr tener el manejo de la manada de la mejor manera, y a su vez Antonella y la esposa de su cuñado se volvieron buenas amigas, de hecho la joven era un poco mayor que antonella pero muy carismatica y sencilla, ellas congeniaron muy bien y compartir el trabajo de lunas en la manada era lo más divertido y sencillo para las dos, son una manada afortunada de tener dos alphas y dos lunas tan unidos y compenetrados con el desarrollo y protección de su pueblo y sus costumbres.
Enzo y Antonella se disponian a salir al recorrido en la manada como lo venian haciendo desde que tomaron el puesto de alpha y luna, revisando el control de las fronteras para evitar posibles ataques, ése día visitaron a los lobos más jovenes que se encontraban en entranamientos de todo tipo, ya no sólo se preocupaban por saber atacar en forma lobuna, lo hacian como humanos, y en entrenamientos de todo tipo de armas.
Cuando llegaron donde estaban los lobos muy sudorosos y sin camisas, llenos de musculos y muchos con unos hermosos tatuajes, que Antonella detalló muy concentrada, mirando todos los movimientos tan rápidos y certeros, ella se emocionó de ver lo ágiles de los lobos en los entrenamientos y el manejo tan puntual de las armas, eran un espectáculo que ella estaba deleitandose pero no de manera lujuriosa o sexual, era más de admiración y asombro, pero el alpha si persibío que todos dejaron de hacer los entrenamientos en cuanto vieron a antonella, muchos les destellaban los ojos al ver la luna de la manada, definitivamente ella era el espectáculo visual más candente que ellos han podido ver, y Enzo sintío el picoso de exitación de los lobos en cuanto vieron a la hermosa mujer de ojos color únicos.
-- MÍA!!! rugio tan fuerte el alpha que todos agacharon la cabeza en señal de respeto, que mierdas le miran a mí mujer, mí esposa, MÍA!!! les hablaba tan fuerte llevado por el sentimiento de posesión con su luna, el alpha se transformo en un enorme lobo negro, magestuoso e imponente, ningún otro lobo tiene el tamaño del alpha, así que todos temen por su vida ya que el no es responsable de sus acciones si siente que le quieren quitar a su luna, su instinto es protegerla y atacar si lo requiere.
Antonella reacciona rápidamente y lo abraza, logrando calmar a su bestia celosa, acariciando su lomo, llevandolo lejos de los jóvenes lobos para que se transforme en humano nuevamente.
-- Calma lobito celoso, le habla antonella mientras le da tiernos besos en el ocico al alpha, este le ronronea más tranquilo por la cercanía de su mujer y vuelve a forma humana, en completo desnudo, atrapando a antonella contra un árbol, oliendo su delicioso aroma de flor de mimosa que lo vuelve loco, proclamándola como suya, clavando los colmillos en el cuello de antonella, lamiendola y besandola frenéticamente mientras le baja el cierre del pantalon para meter la mano y dar toques en el centro de la vagina produciendole el más delicioso orgasmo, y sin más preámbulos en ése momento el alpha baja el pantalon de antonella y entra en ella de una sola estocada a un ritmo acelerado haciendo que los dos llegan al cúspide del placer, mezclando sus esencias para marcar territorio y todos huelan la esencia del alpha en su luna.
-- lobito eres tan celoso como delicioso, le dice antonella al alpha quien está igual de agitado y sudoroso que ella, -- vamos gatita traeme un pantalon cerca de los arbustos, le dice Enzo señalandole dónde dejan ropa por varios lados para emergencias de cualquier índole.
Ella le entrega el pantalon y deciden irse para la mansión, ya en la habitación se dan un refrescante baño, mientras es la hora de la cena ya casi al anochecer, Enzo se va al despacho con su hermano a hablar temas de la manada, Antonella con un poco de calor decide salir a tomar aire cerca del lago en la parte trasera de la mansión, sin sospechar que la estarían esperando para su secuestro, salio con calma, mientras aspiraba fuertemente el aire puro del bosque, pero su instinto de bruja, detecto intrusos, rápidamente frota su pulsera para calmarse, ya lo hacia como un relajante sin saber que éso hacía que su poder de hechicera incrementara, se concentro y vío a lo lejos un grupo de vampiros y un hechicero con un aura tan malévola y oscura que le dío un poco de miedo, ella se encontraba lejos de la mansión para salir corriendo y no quería que ocurriera lo mismo de hace 15 años, así que se imagina que esos son los que la buscan para la completar algún ritual acerca de la profesia ya que en menos de dos semanas era el eclipse de luna, así que ella por fin concoceria su verdadero potencial, y podría acabar con los asesinos de sus padres, y los de todos en la manada que perecieron ése horrible día.
Se calmó y espero tranquilamente que los susodichos hicieran su jugada, -- pero si creen que soy la lobita debil de la manada y que no daré lucha, moriran en el intento, penso para sí.
Ella se encontraba sentada en la orilla del rio cuando un vampiro muy veloz le tapó la boca con un paño que contenía un fuerte somnífero que la durmío en un segundo sin darle tiempo de reaccionar, al menos éso creían los vampiros que la secuestraron, cayó en un profundo sueño y se la llavaron gracias a un hechizo que conjuró el oscuro hechicero, apareciendola en la habitación de aquella mansión lújubre y escondida en las remotas tierras de los desterrados, dónde ningún ser se atreve a entrar porque saben que de ahí no han salida.
 
Enzo estaba con su hermano hablando cuando se disponian a ir al comedor para cenar, y miró por todos lados que su luna no estaba ahí, se dirigio a la esposa de su hermano pregúntandole por antonella a la que ella dijo que le parecio ver que salió al patio trasero cerca del lago, lo dijo recordando que ella se encontraba al teléfono mientras hablaba con su madre y por eso no salio con ella para acompañarla.
Enzo presiente que algo le pasó a su luna, sale convertido en el enorme lobo negro para dirigirse al lago y aspira el aróma de su gatita comprobando que estuvo ahí, pero olfateo más y eran la putrefacción de vampiros.
-- maldita sea pensó Enzo, aullando dío aviso a los guerreros de la manada que su luna fue raptada, todos reunidos en la parte delantera de la mansíon unos armados y otros más en forma de lobos, estaban siendo guiados por los alphas para dar inicio a la busqueda de Antonella, los ancianos padres de antonella ya por fin lograron averiguar el destino de su hija, y con una apariencia de unos 40 años volvieron más jóvenes gracias al jefe del clan de hechiceros que les concedio volver a su verdadera edad ya que estos aparentaban 65 años y los recompensaron por no utilizar de manera avariciosa su magía en el mundo de los humanos.
Todos estaban esperando la ayuda del hechicero Baltazar junto con los padres de antonella conjuraron un hechizo de ubicación gracias a la pulsera de antonella que contiene el alma de la madre de ella, quien ha sido su protectora todos estos años sin saberlo la joven loba.
Dándo con la ubicacíon de antonella eran las ocho de la noche cuando todos salieron rapidos y cautelosos para ubicar a la luna, sin saber que antonella es un arma peligrosa para aquellos que osaron raptarla...