Capítulo 1 La vida después de una guerra

6.9K 469 20
                                    

    Estaban los pocos miembros que quedaban de la orden reunidos en la madriguera para apoyar a los Weasley después del entierro de Fred, la familia estaba devastada por lo que Hermione y Luna con la ayuda de Harry y Neville se estaban haciendo cargo del almuerzo mientras que los demás estaban tratando de hacer que los miembros de la familia se recostaran un rato en lo que el almuerzo estaba listo, la señora Weasley acepto tomar la poción de dormir sin sueños y subió a su recamara mientras Ginny se encargaría de cuidar de ella, mientras Bill y Fleur acompañaban a Arthur, al mismo tiempo Charle, Percy y Ron estaban con George que de todos ellos era el más afectado.

    El almuerzo se sirvió y todos empezaron a comer en silencio y un momento sin saber cómo alguien hizo un comentario de algo que había hecho Fred y al otro estaban riendo al recordar las bromas y travesuras que hizo con la ayuda de George, por un momento todos sintieron la presencia de Fred calmando el dolor que habitaba en sus corazones.

    -Felicidades Kingsley por tu nombramiento como primer ministro. –Le dijo Arthur.

    -Gracias Arthur realmente no me lo esperaba. –Agradeció el ahora primer ministro-. No va hacer nada fácil pero lograremos que vuelva a ver paz en nuestro país, lo que me recuerda. –Y viendo a los adolescentes continuó-. Quiero verlos a todos ustedes mañana en el ministerio de magia.

    ¿Para qué quieres ver a los chicos? –Le pregunto Molly, Kingsley miro a Mcgonagall que asintió por lo que le contesto a Molly.

    -Josiah Mcgonagall ha descubierto que la maldición imperius deja un rastro a nivel celular por lo que a los Mortifagos que capturamos y que alegaban estar bajo la maldición se les hizo la prueba revelando que decían la verdad, una vez que estuvieron libres de los cargos aceptaron colaborar con nosotros, lo que llevo a la captura de otros mortifagos y carroñeros, descubrimos que tienen pensado hacerles daño a los chicos. –Sus palabras no solo sorprendieron a los chicos sino que asustaron a los padres de Ron que no soportarían perder a otro hijo.

    -Por Merlín Kingsley. Exclamo Arthur-. ¿Qué vas a hacer?

    -No se preocupen Arthur, Molly. –Los calmo Shacklebolt-. Ya tome las medidas necesarias para que salgan del país.

    -No nos iremos. –Dijeron al mismo tiempo Ginny y Ron.

    -Claro que se irán. –Aseguro Molly-. No voy a perder a otro hijo o hija. –Y mirando a Harry y a los otros chicos continuó-. Todos ustedes deberán irse, recuerden que tienen personas que los quieren y dependen de ustedes.

    -Los chicos que se preparaban para discutir al oír las palabras de Molly se quedaron callados y los adultos comprendieron que iban a aceptar las medidas de Shacklebolt.

    -Y pensar que todo lo que ha pasado a sido por que las familias sangre puras no pudrieron ponerse los zapatos de los mestizos y los nacidos de muggles. –Dijo apenada Hermione.

    -¿Ponerse sus zapatos? –Pregunto Kingsley-. Eso de que hubiera servido.

    -Es una frase muggle que habla de la empatía. –Explico Hermione

    -Lo que Hermione quiso decir es tener la capacidad de comprender lo que siente la otra persona. –Intervino Harry.

    -¿Quieres decir que vivieran como muggles? –Pregunto Mcgonagall

    -No que vivieran como muggles pero sí que comprendieran un poco a los nacidos de muggles y el shock que representa entrar en un mundo que ni siquiera sabemos que existe, si lo experimentaran tal vez serian un poco más comprensivos.

El Mago y El YakuzaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora