Capítulo 25 Visitando el Inframundo

1.7K 219 3
                                    

    Harry y Neville luego de soplar las velas de su pastel procedieron a repartirlo y mientras lo comían empezaron a comentar su día en el parque de diversiones.

    —No se sorprenderían tanto si pasaran más tiempo con los muggles. —Les aconsejo Anubis—. Y tal vez pudieran aprender algo de ellos.

    —Tiene Razón Lord Anubis. —Dijo Ron—. Los magos japoneses tienen años conviviendo con los muggles y saben combinar muy bien ambas cultura y los cosas que han logrado son impresionantes, Creo que el resto de los magos deberíamos imitarlos.

    —¿Quién eres y que has hecho con el verdadero Ron? —Dijo Hermione en broma haciendo alusión en que Ron era muy cerrado en sus opiniones y era difícil hacerle cambiar de opinión.

    —Después de pasar un año aprendiendo tecnomagia en Mahoutokoro y viendo de primera mano cómo son las cosas en Japón con la comunidad mágica era imposible que siguiera pensando lo mismo, además cierta serpiente me ha hecho abrir los ojos. —Al oír esas palabras Hayle Zabini frunció los labios, un gesto que no pasó desapercibido para algunos.

    —Me alegra saber que se convirtió en un animago señor Potter —Lo felicito la directora Mcgonagall en un intento de que Molly y Arthur no vieran que Hayle no estaba de acuerdo con el noviazgo de los chicos—. ¿Puede enseñarnos?

    Harry sonrió y cerró los ojos y como le enseño su abuelo vio su magia y en eso pensó en su padrino, en lo orgulloso que estaría de que fuera un animago como él y su padre, cuando abrió los ojos vio la sorpresa en la cara de Ron y Zabini, en lugar de soltar un chillido se oyó ladrar.

    —Harry eres igual a Canuto. —Exclamo Hermione.

    —Su transformación es perfecta lo felicito señor Potter. —Le dijo Minerva orgullosa cuando Harry volvió a su estado natural.

    —No entiendo que paso. —Dijo Harry asombrado—. ¿Cómo es que me transforme en un perro cuando siempre he sido un halcón peregrino?

    —Eso es porque no eres un animago. —Le contesto Seth—. Eres un animetaformo como lo somos tu padre y yo. —Y mirando a Anubis que asintió con la cabeza se transformaron en sus formas divinas.

    Cuando lo revirtieron tomaron forma animal, Anubis era un chacal y Seth una pantera negra, Hécate sonrío y tomo la forma de un pit bull negro, al notar Harry que se le quedaban viendo pensó en tomar la forma de perro, pero quería saber si podía tomar la forma de otro animal por lo que pensó en un zorro, al oír el gritito de Hermione supo que lo había logrado.

    —¿Tengo algún límite? —Les pregunto Harry cuando volvió a su forma humana.

    —Yo lo limitaría a tres. —Le contesto Anubis—. Aire, agua y tierra. Zeus es el único animetaformo que uso más de tres, pero estamos hablando del rey de los dioses griegos.

    —Por favor ese vanidoso lo hacía solo para alimentar su ego. —Comento Seth burlón—. Cuando se encaprichaba de un mortal fuera hombre o mujer esperaba que lo consideraran un regalo caído del cielo.

    —Vaya Seth describiste muy bien a mi abuelo. —Dijo Cupido.

    —Y hablando de regalos. —Intervino Hécate ya que si empezaban a criticar a Zeus no habría quien los detuviera—. Este es nuestro regalo. —Dijo tomando el regalo de las manos de Casia.

    —Mamá, papá, abuelo gracia. —Dijo Harry mientras lo desenvolvía, cuando lo abrió encontró un pantalón y una sudadera de un tono azul grisáceo, Harry muy entusiasmado saco la sudadera y se la puso, vio que le quedaba grande de las mangas, pero en cuanto lo pensó al momento se le ajusto.

El Mago y El YakuzaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora