Capítulo 58 Al descubierto.

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    —Duerme Harry, te hará bien. —Le dijo Asami al tiempo que entraban a su recamara.

    —Lamento haber arruinado todo esta noche. —Dijo Harry sin mirarlo.

    —No digas eso. —Le dijo Asami abrazándolo—. Porque no te metes en la cama mientras voy por un vaso de leche caliente con miel. —Beso su cabeza antes de soltarlo y salio del cuarto. Al pasar por la sala se encontró con Kirishima que aún no se iba a su casa.

    —Asami sama. —Le dijo kirishima al verlo—. Esta noche me quedare en la central si necesita algo solo tiene que llamarme.

    —Gracias Kei. —Le dijo Asami a su hermano de armas—. Espero no tener que hablarte, trata de descansar. —Solo hasta que lo vio salir del departamento siguió su camino a la cocina sin perder tiempo puso la leche a calentar para luego poner un poco de miel en un vaso mientras recordaba parte de lo sucedido en la casa del sacerdote Mitsuhide Hirose.

    —Gracias por todo lo que has hecho por kim. —Le agradecía Harry a Nazuna mientras veía como Kim se echaba al lado de Ishi que estaba en el pasillo—. Lamento no haberte reconocido.

    —No te preocupes Harry, en cuanto te vi me di cuenta que algo había pasado con tu... —Al ver la mirada que le dirigía su abuelo tocio y se corrigió—. Contigo, supongo que encontraste a esa persona que estabas buscando.

    —Estoy tan confundido. —Dijo Harry agarrándose la cabeza—. De un tiempo para acá no sé si son mis recuerdos, son sueños o si es algo que he inventado.

    —Tranquilízate Harry. —Le dijo Asami tomando su mano—. Te diremos todo lo que sabemos, eso te ayudara a aclarar tu mente.

    Saliendo de sus recuerdos se dispuso a agregar la leche y batiéndola hasta que se disolvió la miel volvió a la recamara para encontrar a Harry sentado en la cama mirando a la nada seguramente pensando en lo que había pasado.

    —¿Por qué no puedo recordar a mis amigos? —Pregunto Harry desconcertado luego de escuchar el relato de Asami, Nazuna y Natsumi.

    —Eso es por lo que hiciste junto con las Moiras, lo bueno es que no es permanente. —Dijo Griffin desde la entraba atrayendo la mirada de todos al oírlo su pequeño gruñido haciendo que Harry asistiera.

    —¿Qué dijo? —Pregunto Asami adelantándose a los demás.

    —Que es a consecuencia de lo que hice, pero que no es permanente. —Respondió Harry sin mirarla, Kim al sentir los sentimientos de Harry se encogió al tamaño de un gato y se acomodó sobre sus hombros en un intento de consolarlo haciendo que Asami se echara ligeramente hacia atrás.

     —Harry aquí está la leche. —Le dijo Asami sobresaltándolo lo que le confirmo al Yakuza que estaba inmerso en sus recuerdos de la plática de esa noche—. Tómala ahora antes de que se enfríe. —Una vez que se termino la leche tomo el vaso y lo puso en el tocador, se volvió hacia Harry y lo empezó a ayudar a desvestirse una vez que estuvo desnudo lo metió a la cama para luego hacer lo mismo en su lado de la cama, una vez que se introdujo a la cama lo atrajo a sus brazos y lo puso encima de él que era la postura favorita de Harry—. Ahora duerme, mañana te sentirás mejor.

     —Asami yo... —Comenzó a decir, pero no pudo continuar ya que Asami lo beso.

    —Nada de esto es tu culpa Harry, deja de darle vueltas al asunto. —Le dijo Asami una vez que termino el beso—. Duerme mañana será otro día. —Harry no necesito más para acurrucarse sobre el pecho de Asami y dejar que el sueño se apoderara de él.

El Mago y El YakuzaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora