Capítulo 55 Separados

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    —¿A dónde vas? —Le pregunto Átropos a Seth cuando lo vio dirigirse a la puerta luego de que vieran esa escena de Harry convertido en la lanza de Ra.

    —Me preguntas eso luego de lo que vimos. —Le contesto Seth solo volteando su cabeza—. Me dirijo a donde esta Harry y haré lo que tenga que hacer para que eso no suceda. —Átropos suspiro antes de acercarse a él y darle un zape en la cabeza—. ¿Qué crees que estás haciendo? —Le pregunto Seth molesto mientras se sobaba la cabeza.

    —Viendo si con eso la única neurona que tienes empieza a trabajar. —Le contesto Átropos—. Esto que vimos es su posible futuro, un futuro lejano que puede que se haga realidad o no dependiendo de sus decisiones, si haces algo imprudente puedes hacerlo una realidad.

    —Me pides que no haga nada. —Le dijo Seth incrédulo.

    —Solo estoy diciendo que seas cuidadoso o puedes desencadenar lo que quieres evitar. —Le dijo Átropos y fulminándolo con la mirada agrego—. ¿Acaso olvidaste a Edipo?

    —Edipo. —Repitió Seth desconcertado—. ¿Quién es Edipo?

   —A veces olvido que eres un egipcio ignorante. —Dijo Átropos soltando un suspiro mientras Seth la fulminaba con la mirada—. Edipo es el claro ejemplo de lo que puede pasar cuando conoces tu futuro y tratas de cambiarlo.

    —En serio Átropos... —Empezó a decirle molesto.

    —Silencio ¿Quieres saber quién era Edipo sí o no? —Le dijo Átropos arrogante.

    —Solo porque te mueres de ganas de contármelo. —Le contesto Seth con altivez.

    —Ya quisieras. —Le refuto Átropos—. El padre de Edipo, antes de ser rey fue desterrado, pero Layo halló refugio en la corte de Pélope, pronto demostró ser un ingrato porque raptó al hijo de éste, Crisipo cuya belleza le fascinaba, en castigo a su pecado Apolo le anunció que estaba destinado a morir a manos de su propio hijo. Para evitar ese destino decidió que no tendría hijos, pero cuando nació Edipo se dejó llevar por el pánico, jamás uso la cabeza solo pensaba en evitar que se cumpliera la profecía, por lo que dejo a Edipo en el monte donde esperaba encontrara la muerte. —Al ver que Seth la escuchaba atento continuo—. Pero un criado se compadecido del niño y se lo entregó a uno de los pastores del rey Pólibo de Corinto. El pastor, a su vez, entregó el niño a su señor, el cual carecía de descendencia y este lo crio como si fuera su propio hijo. Siendo ya Edipo un joven se enteró que no era hijo de sus padres, angustiado se dirigió a Delfos para averiguar su origen. Pero el oráculo en lugar de responder a su pregunta, le anunció que daría muerte a su padre y se casaría con su madre. ¿Puedes imaginar lo que pasó?

    —La profecía se cumplió. —Dijo Seth.

    —Sí. Edipo al igual que su padre fue imprudente ya que para él sus padres eran Pólibo y su esposa y esperando escapar de este horrible destino decidió no volver nunca a Corinto. En su viaje hacia Beocia en una encrucijada tropezó con Layo con quien tuvo una violenta disputa, a consecuencia de la cual Edipo mató a Layo sin saber que era su padre. Con el tiempo Tebas se encontró sometida por la esfinge que aniquilaba a todos los que no sabían responder al enigma que proponía, Edipo resolvió el acertijo ganándose la mano de la reina Yocasta, con el paso del tiempo la verdad llegó a ser conocida. Yocasta entonces se suicidó y Edipo se arrancó los ojos, fue apartado del trono y marchó al exilio.

    —Ya dejaste claro tu punto. —Le dijo Seth—. No debo intervenir ¿Qué propones?

    —Ver su futuro cercano. —Le dijo Átropos—. Dependiendo de eso ya veremos.

***

    —¿Hécate que tienes? —Le pregunto Anubis mientras la sostenía al verla que se tambaleaba.

El Mago y El YakuzaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora