Capítulo 29- ¿Quién eres?

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ADVERTENCIA

El capítulo es un poco fuerte y sensible. 






Tokio (2017)

Sus pies formaban un vaivén desesperante al igual que el sonido que emitían sus zapatillas en el piso reluciente, sus codos reposaban en la parte trasera de la silla de aquel pasillo solitario, realmente estaba desesperada por llegar a su casa a tomar una siesta, su cuerpo pedía a gritos un descanso, pero reconocía que la culpa era suya al aceptar llevar una doble vida; había enterrado en una falsa tumba a su personalidad sentimental pues ya no existían esperanzas, cada día resultaba mas tormentoso que el anterior desde que acepto el trato con Kisaki. Su mirada permanecía en el techo para después girarla al escuchar la puerta abrirse, la figura de un chico de cabellera negra se dejo ver, hizo un ademan con sus manos indicándole que le siguiera el paso.

-tardaste demasiado, ¿Qué necesidad tenia de esperarte?- reprocho la peli naranja levantándose de un salto de su asiento. 

-le recuerdo que su vida corre peligro-acelero el paso mientras su mirada se dirigía a todas direcciones -yo tampoco he descansado por hacer guardia- señalo sus notables ojeras

-descansaras el día en que yo muera... y ese día se acerca- sus labios soltaron una sonrisa que mas bien parecía una mueca, metió sus manos a los bolsillos de su saco y se adelanto. ¿Qué cosas pasaban por la mente de una experta criminal?, pasaba todo lo contrario a lo que cualquiera se imaginaria, al menos en la mente de Saeko pasaba una nebulosa de inseguridades que hacían que su pequeño cuerpo flaquease.

-no diga eso, haremos de todo para salvar su vida, lo prometo-

-Chifuyu...-llamo la peli naranja mientras sujetaba con fuerza sus gafas de sol.

-si..-

-¿Como buscas el sentido a la vida si has perdido todo?- la mirada perdida de la chica dejo un silencio en su acompañante, no podía formular palabra alguna pues no había pensado en ello, ¿Quién se pone a pensar en ese tipo de cosas?, solamente cuando intentas llenar un vacío salen esas preguntas. La peli naranja buscaba llenar un corazón inexistente, los sucesos de su vida la habían apedreado dejando su alma hecha trizas, las palabra tenacidad se hizo polvo y se perdió en el frío viento; ya no tenía una razón para seguir adelante, su familia había sido reducida a un integrante y era ella.

Los problemas que cargaba en su infancia sucumbieron dejando una mancha en su expediente de vida, la cordura la abandono dejando que sus impulsos actuasen, aquella imagen se repetía en su mente atormentándola cada noche, aun sentía el cuerpo frío de su padre en su piel, el río de sangre la rodeaba y eso no importaba mucho, su mirada se mantenía en sus manos las cuales sujetaban un arma; desde ese momento cargo en su espalda una enorme cruz que nunca se iba a quitar ni dejando este mundo.

-a veces pienso que un viaje en el tiempo arreglaría mis problemas-

-no piense en eso como una solución, no arreglaría mucho, sería aun peor- el peli negro recordó aquella platica que mantuvo con Takemichi cuando aun la pandilla hacia cosas divertidas; en la anterior línea en la cual él moría, Saeko tuvo una disputa con Kisaki, al parecer ella también había traicionado su confianza y la relación que tenía con Mikey no era de lo mas empática, aquello termino en una dolorosa muerte para ella pero a cambio de ganar tiempo para salvar a Takemichi.

Alas rotasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora