XVI

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Rápidamente se alejó del contrario, lo miro con sorpresa y enojo.

A lo lejos se encontraba Kim, quien había sido testigo de aquella situación. No quería admitirlo, pero estaba celoso. Desde su teléfono prendió el micrófono del mayor, debía saber por qué el más bajo había reaccionado de tal manera.

— Chicos, creo que algo pasa con Jongsuk hyung, acabo de prender su micrófono, no se acerquen a él a menos que yo lo diga. — habló mientras observaba al nombrado.

Comenzó a oír la conversación.

— ¿Qué haces aquí? — preguntó con notable enojo del castaño.

— Soy quien compró a Lim Jinseo. — dijo con una sonrisa.

— ¿Por qué? ¿Acaso ahora te dedicas a tener putas? — preguntó rodando los ojos.

— ¿Acaso estás celoso? — preguntó con una sonrisa de lado.

— ¿Quién te crees que eres? — preguntó con enojo.

— Probablemente a quien todavía amas. — respondió el castaño claro.

Shin apretó fuertemente su puño, ¿Quién era aquel sujeto y por qué trataba así a su hyung? Decidió intervenir.

— Chicos, iré a dónde está ellos, cualquier inconveniente ya saben la señal. — aclaró mientras se dirigía hacia Suk y el otro sujeto.

Al llegar, captó la atención de ambos adultos.

— Buenas noches. — saludó educadamente. — Soy Kim Shinseok ¿Puedo saber quién es usted? — preguntó mientras posaba su mano derecha en la cintura del castaño.

Lee no sabía que hacer o decir, se sentía nervioso al no tener idea de lo que pasaría, de que serían capaces Shinseok y Yoohyeon.

— Soy Hong Yoohyeon, un placer conocerlo, joven Kim. — le guiñó el ojo con una sonrisa.

El rostro del castaño era de enojo, ¿Cómo se atrevía a coquetearle a SU Seokkie?

— También es un placer conocerlo. No sabía que usted era tan guapo, señor Hong. — halagó el pelinegro.

¿Qué carajos? Pensó el de menor altura, ¿Acaso había halagado a ese estúpido?

— Tú no te quedas atrás, posees una belleza inigualable. — dijo de igual manera, Hong. — Si gustas puedes llamarme hyung, después de todo tenemos mucho de que hablar. — propuso.

— Muchas gracias Yoohyeon hyung. — dijo con una leve sonrisa.

Dicho esto soltó la cintura del mayor y fue directo a sentarse a una de las tantas mesas con Hong. Al más bajo de los tres no le quedó más opción que ir con ellos.

— Así que usted quiere comprar al joven Lim. — comenzó a hablar el más alto.

— Por supuesto. Jinseo llamó bastante mi atención y pude notar que tiene un gran valor debido a quien es. — explicó el castaño claro.

Jongsuk soltó un leve pff, pero decidió no decir nada.

— Comprendo. Tiene gustos muy buenos hyung. — dijo con una sonrisa.

El castaño rodó los ojos, odiaba que Kim fuera tan buen actor.

— Diría lo mismo, pero puedo notar que no es así. — dijo mirando al castaño.

— Oh, ¿Lee Jongsuk? Él no es nada mío. — dijo con una sonrisa, a pesar de que por dentro quería golpear a aquel sujeto.

El mayor miró al suelo, pero rápidamente sintió como el menor tomaba su mano. Ahora comprendía todo, aquello era parte de su plan.

— Me alegra oír eso. Llamaste mucho mi atención, es una de las razones por las que ofrecí tanto por Lim. — explicó.

— ¿Osea que hizo todo para acercarse a mi? — preguntó el de pelo negro.

— Claro, no sabes lo mucho que me atraes, sin duda le gustas demasiado. — confesó.

El castaño apretó la mano del contrario, no toleraba de Hong le estuviera coqueteando a su adorado Seok.

— Admito que usted es muy guapo señor Hong. — hizo una pausa, se levantó y acercó su cara al oído del nombrado. — Pero quiero que sepa que yo no soy el de abajo. — le susurró, para luego volver a su correspondiente asiento.

Lee comenzaba a cansarse, quería golpear a Yoohyeon hasta que se desmayará, ¿Cómo se atrevía a hacer tales cosas?

— Comprendo, lo supuse desde que lo ví, usted tiene un aire de dominante. — dijo con una sonrisa. — Y admito que realmente no pensaba ser yo quien mandé. — confesó con un leve rubor.

¿Acaso había visto bien? ¿Yoohyeon estaba sonrojado? ¿Iba en serio con Shinseok? Miles de preguntas pasaban por la mente del mayor, quien estaba más que sorprendido al ver tal reacción de aquel tan odioso hombre.

— Wah, me sorprendió mucho su confesión hyung, pensé que usted solo era el de arriba, quien diría que estuviera dispuesto a tanto por un simple joven como yo. — dijo con sorpresa fingida.

— Cuando realmente te gusta alguien eres capaz de todo. — habló con una de sus sonrisas.

— Ya veo hyung. Me siento realmente halagado, pero lamentablemente me debo retirar dentro de poco, si me permite mi secretario y yo nos estaremos yendo. — se levantó e hizo una leve reverencia.

— No sabía que Jongsuk era su secretario. — exclamó con algo de sorpresa.

— Lo es desde hace un tiempo, lamento si mal entendió nuestra relación, solo nos llevamos bien como jefe y empleado, nada más que eso. — le contó con una sonrisa.

— Comprendo, espero que nos podamos reunir pronto. Usted ya tiene mi contacto, espero con ansias sus mensajes. — se despidió e hizo igualmente una reverencia.

A Jongsuk no le quedó más opción que imitar la misma acción que el mayor y que el menor. Yéndose luego con el último que describí.

— Wah, que intenso. — oyeron por sus audífonos al tercer mayor.

— ¿Acaso ese era Hong? — preguntó sorprendido el pelirrojo.

— Si, me sorprendió bastante verlo en persona, más contigo Suk hyung. — habló mirando al nombrado.

— Tks, te contaré las cosas cuando lleguemos a casa. — dijo con bastante seriedad.

Por otro lado, el castaño claro sonreía, aquello era un dos por uno. Se vengaría de Jongsuk y además, obtendría como premio un precioso muchacho el cual llevaba mucho tiempo observando y deseando.

— ¿Se puede saber qué carajos hiciste en la fiesta? — preguntó con enojo el castaño.

— ¿Nuestro trabajo? — preguntó sin comprender la duda del mayor.

— ¡Coquetearle a Hong no era parte de tú trabajo! — gritó enojado.

— ¿Acaso crees que esos quinientos mil dólares no son parte de mi trabajo? — preguntó incrédulo el menor.

— ¡Pudiste tratarlo de manera neutral! — le reprochó.

— Es obvio que le gusto, ¿Por qué no puedo aprovecharme de eso? — se quejó el de mayor altura.

— ¡Porque Hong no es como los demás! — gritó.

— ¿Por qué? ¿Por qué aún te gusta? — preguntó con enojo.

El silencio reino en la habitación.

¿Es correcto amarte? | Lee Jong SukDonde viven las historias. Descúbrelo ahora