¿Es correcto amarte? | Lee Jong Suk

XXV

Apenas comenzó el día, el joven adulto de cabellos oscuros comenzó a pensar en cómo sacaría a sus amigos y novio de prisión.

Pensó, pensó y pensó.

No quería sentirse presionado, pero si las cosas salían mal, podría estar en graves problemas.

— ¿Has planeado algo? — preguntó Sihyun.

— Sinceramente es muy complicado, hay pocas probabilidades de que las cosas salgan 100% como las planeo. — contestó con algo de frustración.

— Sabes que ayudaré en lo que pueda, después de todo, eres como mi hermano. — confesó con una sonrisa, la cual tenía intención de reconfortar al más alto.

— Es increíble como aún en estas situaciones, tú me sigas apoyando de esta manera. — dijo observando al menor con una sonrisa.

— Tú siempre me apoyaste en todo, ¿Por qué yo no lo haría? — respondió el castaño.

Ambos se conocían a la perfección y harían lo que sea por el opuesto. Era bueno saberlo y recordarlo, más en aquellas circunstancias tan complicadas.

— ¿Quieres que vea como están Jongsuk y el resto? — preguntó el castaño.

— Me haría sentir más aliviado saber que están bien. — comento. — Puedes ir mientras yo planifico. — propuso.

— Claro, cualquier movimiento raro que perciba te avisaré instantáneamente. — aseguró para luego retirarse de la habitación.

Dicho aquello, Sihyun comenzó con su camino a la comisaria en la que estaban los tres hombres que acompañaban a Shinseok.

— Buen día Sr. Min, ¿Vino a ver a los sujetos que capturamos? — preguntó uno de los oficiales apenas vio al chico de baja estatura.

— Buen día oficial Shin. Respondiendo a su pregunta, si, quería interrogarlos sobre algunas cosas más...personales. — explicó.

— De acuerdo, puede hacerlo tranquilamente, comprendo lo importante que es Shinseok para usted. — dijo mientras le daba las llaves de la celda en la que estaba el trío de hombres.

¿Así de fácil era conseguir la llave? No desaprovecharía aquella oportunidad.

Una vez que estuvo frente a la celda, la abrió y entro, siendo observado por los encerrados.

— ¿Qué haces aquí? — preguntó el pelirrojo.

— Vengo a hablar con ustedes. — respondió.

— Tks, no tenemos nada de qué hablar contigo. — dijo con enojo Liheon.

— Shh, estoy seguro que está aquí por una razón importante, ¿No es así, Sihyun? — preguntó Lee.

— Así es, al fin alguien que me toma en serio. — habló Min. — Vine para saber cómo están. Seok está trabajando en un plan para sacarlos de aquí lo antes posible. — explico en voz baja.

Un radiante brillo se hizo presente en los ojos del mayor de todos al oír aquel nombre.

— ¿Cómo está él? — pregunto.

— Él está bien, deberías preocuparte más por ti mismo. En realidad, vine para saber eso y, por lo que veo, están en buenas condiciones. — dijo mientras los observaba.

— Lo estamos, ¿Pero sabes algo sobre ese plan? No creo que podamos estar aquí mucho tiempo. — cuestionó con algo de desesperación el rubio.

— Por lo que se, es algo muy complicado. Seokkie me explicó que no había muchas posibilidades de que las cosas salieran como las planee. — contó.

— Comprendo, debe ser bastante presión para él, pero dile que estaremos dispuestos a esperar el tiempo que sea necesario. — dijo Mihyuk.

— Por supuesto. Dicho todo esto, estoy casi listo para irme. — dijo mientras buscaba algo en su bolso.

— ¿Casi listo? — preguntó el castaño con curiosidad.

De su bolso saco un lápiz y un papel.

— ¿Qué harás con eso? — preguntó Heon.

— Ya verán. — dijo con una sonrisa el menor.

Tomó la llave que el oficial le había dado y la apoyo sobre la hoja, dibujando el contorno de la misma.

— ¿Acaso esa es la llave de nuestra celda? — preguntó Hyuk.

— Claro que lo es. Con este contorno y con las medidas del grosor de la llave, será más fácil para Seok idear como sacarlos de aquí. — explicó.

— Eres astuto. — halagó Suk.

— Que puedo decir, aprendí del mejor. — dijo con una sonrisa. — Nos vemos pronto, caballeros. — se despidió y finalmente, se fue.

Mientras salía de la celda puso su cara más seria que pudo, no debían sospechar de él.

Apoyo la llave sobre el escritorio del policía y dijo:

— Ya averigüé lo que necesitaba, ahora les dejare el resto a ustedes. — dijo para luego retirarse.

Al llegar a su hogar puso observar como Kim estaba rodeado de hojas escritas.

— ¿Está todo en orden? — preguntó con duda.

— Sí, estoy haciendo un plan, esta vez estoy seguro de él. ¿A ti como te fue? — respondió y luego preguntó con curiosidad.

— Eso es bueno. — dijo con felicidad. — A mí me fue de maravilla, los chicos están bien y, además, mira lo que conseguí. — hablo mientras sacaba la hoja que tenía los trazos de la llave de la cárcel en la que estaban encerrados los mayores.

Shinseok observó la misma y sonrió luego de mucho tiempo, ese papel lo ayudaría mucho.

— ¡Eres un genio, Sihyun! — dijo con alegría.

— Lo sé, lo sé. — dijo presumidamente.

El de mayor estatura soltó una leve risa y continuo con entusiasmo escribiendo sobre la hoja todo lo que harían al día siguiente.

— ¿Puedes darme un spoiler del plan? — preguntó el castaño mientras se sentaba sobre el escritorio.

— Será jodidamente difícil y deberemos tener muchísimo cuidado a la hora de realizarlo. Si las cosas salen bien, no nos veremos en un tiempo. — explicó mientras continuaba con la escritura.

— Mmn, entiendo, me encargare de hacer todo lo posible desde aquí mientras tu no estas. — dijo con seguridad.

— Es bueno saber que asumes que todo saldrá a la perfección. — dijo con una sonrisa.

— Confió en ti, conozco a la perfección a mi hyung. — dijo en forma de burla.

— Sihyun, tenemos meses de diferencia, pero si me tienes tanto respeto puedes decirme hyung cuando quieras. — le siguió el juego.

Por suerte, ambos jóvenes tuvieron al menos una noche tranquila. Descansaron lo máximo que pudieron debido a que, el plan del día siguiente sería bastante intenso, necesitarían mucha energía.

Una noche de tranquilidad antes del caos. 

Vengo a comentarles que el próximo capítulo será publicado el viernes de la semana que viene y, además, es el último.

¿Están emocionados?