¿Es correcto amarte? | Lee Jong Suk

XXI (EP. Especial III)

Desde que llegó a casa, siempre pensó en él. En su casi hermano, Shinseok. Cada día piensa en una manera para salvar al más alto de aquella situación tan horrible. Sabe que la solución no será fácil, pero a la vez, tiene mucha esperanza.

Día a día recuerda lo que vivió con el de cabellos oscuros, recuerda como lo cuidó, motivó, apoyó y más. Cada vez que revive los momentos de los dos juntos, siente como las lágrimas se acumulan en sus ojos y como un nudo se crea en su garganta.

Siente que es injusto, que las cosas no deberían ser así. ¿Por qué Shinseok? ¿Qué había hecho él para merecerse tal cosa? Pensaba y pensaba, quería sacar a su hermano de otra familia de aquel tan desagradable lugar.

Deseaba volver al pasado, cuando todo estaba bien, cuando se sentía seguro, cómodo, acompañado…querido.

Cuando estaba solo en casa o no tenía a nadie, siempre estaba Seok para hacerlo sentir bien. Sabía que, estando juntos, nada podría salir mal, y si pasaba, se tenían el uno al otro.

Desde su perspectiva la gente se juzga mucho entre sí, a pesar de conocerse desde hace poco tiempo o no tan profundamente, siempre hay alguien que te critica a tus espaldas. Muchas veces incluso la familia es quien lo hace, porque no comprenden los problemas de sus hijos, sobrinos, nietos, etc. Pueden decir palabras muy dolorosas debido a ello y, sinceramente, es de lo peor que puede suceder.

¿Por qué dejamos de la opinión de los cercanos a nosotros nos afecte tanto? ¿Por qué unas simples palabras nos pueden llegar a afectar tan fuertemente? Sinceramente no sé si algún día sepa la respuesta a todas estas preguntas, quizás el tiempo nos dé una.

Mientras camina, recuerda, mientras recuerda, extraña y mientras extraña, llora.

Mira el césped de su patio y sonríe con melancolía. Ahí es donde ellos solían llevar a cabo varios juegos.
Su mundo cambio drásticamente sin su fiel acompañante. Siente que le falta una gran parte de él, de su familia, de su corazón.

Sabe que el mayor estará bien, pero aun así no puede estar tranquilo. Es consciente de que no será fácil recuperar la libertad de Kim, ¿Pero que pierde intentándolo?

Está vez sale de su casa, camina lentamente. No le importa que lo vean con los ojos hinchados y rojos, no le interesa que observen como sus lágrimas caen por su delicado rostro.

No se mostrará feliz sin serlo, de todas maneras, lo único que le importa es él, él y su amada madre, la cual tristemente, ya no está a su lado.
Nuevamente vuelve al pasado, a la adolescencia específicamente a sus 16 años. Meses después de haber cumplido dicha edad, se vio afectado por el fallecimiento de su progenitora. Sintió tanto dolor, creía que no podría salir nunca adelante sin aquella mujer la cual lo llenaba de felicidad día a día. Pero fue gracias a él, gracias a Shin pudo salir adelante.
Ahora, nuevamente volvía al pasado, sin Seok, ¿Quién lo sacaría de ese oscuro lugar, de esa terrible tristeza y soledad?

Necesitaba hacer algo, mientras más rápido mejor.
Sin darse cuenta llego a aquel lugar, en el que ambos comenzaron aquella tan especial y fuerte amistad, donde supieron que serían inseparables…donde descubrieron que eran hermanos, no de sangre sino de corazón.

No lo quiere perder, no quiere que le hagan daño. Sabe que su mayor lo debe necesitar tanto como él lo hace, a pesar de tener esa personalidad tranquila, callada y cerrada, él es consciente de que ambos sienten lo mismo. No necesitan palabras, gestos, acciones, nada.

Al ver que las autoridades no hacen mucho por Shinseok, comienza a investigar y buscar por su cuenta. Ya no será el niño indefenso que no dice y hace nada, él que acepta que lo discriminen y golpeen, no, simplemente no. Él es fuerte, es lo que el pelinegro siempre le dijo, y él, le cree.

“Si quieres algo, lucha por eso, no dejes que los demás influyan en tu decisión” Esas palabras quedaron grabadas en su mente y fue uno de los momentos más difíciles de su vida y, sin embargo, él tuvo las palabras correctas para decirle.

¿Acaso Kim no era un ángel? ¿No era el destino tan bueno con él como para ponerle semejante persona a su lado? Perdió tanto a lo largo de su vida que, sinceramente, siempre pensó en opciones bastante arriesgadas y fuera de sí, pero como si fuera su salvador, el de cabello oscuro siempre estaba en el momento correcto y le decía lo que más necesitaba.

Su investigación fue avanzando, lentamente, pero mejor que nada era. Dejo de asistir a clases, dedicando casi todo su tiempo en investigar donde estaba la guarida de aquel sujeto, el nombre del mismo y como podía hacer para salvar al más alto sin morir en el intento.

Para su suerte todo fue para bien, quizás algo lento, pero al trabajar solo era más complicado obtener respuestas rápidas y seguras.

Investigo, busco, leyó, se informó y, al fin, obtuvo poco a poco respuestas, las cuales le fueron armando un plan, un objetivo, un rescate.

Demostraría que Min Sihyun, no era un simple joven débil y tonto, él era mucho más que eso y, en esa misión lo dejaría más que claro.

Esta vez, sería el quien salve a Shinseok de los malos.