Capítulo 35

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P.O.V. Lilura

-Yo igual te amo hermana. Gracias, de verdad muchas gracias.-dice Riva y se pone de pie para plantarse frente a mí.-Ponte de pie Lilura.-me pide y lo hago observándola cuando ya lo he hecho.- Atacame.- me pide.

-Vale.-respondo pero después de que se me reinicie el Windows reaccionó.-¡¿Qué?! ¡¿Por qué haría eso?!-digo algo, solo un poco, un pelín, alterada.

Ella solo ríe.-Tranquila, solo es entrenamiento ya que más adelante no podrás por tu embarazo. Así que hay que aprovechar ahora.-explica y entonces, aquí plantada en el patio trasero de mi casa el cual no tiene rastro de césped sino solo tierra, apartados de los vecinos, lanzó mi primer golpe.

El cual, por supuesto, Riva esquiva.

-Vamos Lilura, se que puedes dar más que eso. -me ánima, así que adquiero la misma posición que la he visto adquirir cuando la he visto luchar y lanzó dos puñetazos más. El primero es esquivado, pero el segundo no, bueno eso es lo que pienso cuando de un momento a otro estoy de espaldas al pecho de Riva.

Su respiración es calmada cuando se acerca a mi oreja.-Tienes las ganas de aprender Lilura. Solo te falta el conocimiento.-dice y me suelta.-Venga de nuevo.- pide pero esta vez no solo se queda parada a espera de mi golpe sino que se pone en posición de ataque.

Imitó su acción y lanzó otro golpe con dirección a su mejilla pero ella lo esquiva y dirije el suyo a mi mentón solo que para antes de tocarlo.

-En un combate no buscas solo debilitar sino ganar. Los puntos vitales de una persona al combatir son: la sien,-finge golpearme ahí- labio superior, el mentón, el plexo solar y los genitales. Aunque Sahiro conoce bien el último.-comenta con una risa burlona. Mientras me enseñaba demostró como golpear cada uno de los puntos sin llegar a lastimarme.

-Venga de nuevo y esta vez saca tu pulgar de tu palma o podrás lastimarte.-pide por cuarta vez y esta vez decido no ser tan obvia a la hora de atacar.

Nuevo mi brazo izquierdo directo a su rostro que ella para pero no ve venir el derechazo que le meto haciendo que retroceda.

-¡¡Mierda!! ¿Estas bien? ¡¡Lo siento!!-chillo alarmada tapando mi rostro de la vergüenza.

Hasta que escucho que Riva ríe a carcajadas , destapó mi rostro y la observó masajeando la zona afectada con una sonrisa.

-He de admitir que eso no me lo esperaba. No te preocupes, estoy bien.-aclara y cuando me sercioro de que en realidad está bien es cuando grito y hago un baile raro por la emoción del momento.-Me alegro por ti. Ahora pasemos a las patadas.-dice y oh, mierda. Esto será duró.

(...)

2 semanas después...

P.O.V. Sahiro.

-Ha mejorado.-afirmo observando a Lilura luchar contra Leya en el patio trasero, lo hago desde la ventana de mi habitación.

-Claro que lo ha hecho, tiene el espíritu y una buena maestra.-dice Riva irrumpiendo en mi habitación quedándose en el umbral de la puerta con una gaseosa en mano.

-Cierto.-le sigo volteando a verla y ella solo me ve con cierto desagrado. Así que decido hacerle una pregunta, la cual ha estado rondando en mi cabeza desde que nos conocimos.- Riva, ¿Por qué te desagrado?-mi pregunta hace que detenga su intención de tomar un sorbo de la botella.

-Por la manera en la que te comportabas con Lilura. Eras un completo imbécil pero veo que vas cambiando aunque eso no significa que me caigas bien, bueno, no del todo.-aclara y bebé un poco.

-Lo entiendo, créeme, nadie mejor que yo se lo cruel que fui con ella. Ahora, quiero algo mejor con ella. Lo quiero todo si ella está a mi lado.-digo observando a la nada.

-Basta o voy a vomitar arcoiris.-alega con muesca fingida de asco causando así que ría y ella junto a mí. Pero las risas paran cuando se escucha otra risa mucho más ronca y escalofriante en la habitación.

Rápidamente me volteó observando el lugar de donde proviene la risa.

El baño.

Riva deja de lado su botella y se pone a mi lado.

-Niños, tan inmaduros.- dice un hombre saliendo del baño. En su rostro hay una cicatriz que abarca la mitad de esta, porta un elegante traje gris, su cabello está rapado y sus manos son cubiertas por guantes de cuero blancos.-Les pediré que se tranquilice y bajen las escaleras sino se quieren morir.-comunica y cuando pienso responderle Riva toma mi brazo y me guía fuera de la habitación con el tipo siguiéndonos.

-¿Qué estas haciendo?-cuestiono en un susurro a Riva pero es el tipo quien me responde.

-Esta siendo inteligente muchacho. Ahora, cierra la boca.-

Llegamos al primer piso sin que nadie mediara palabra en lo que quedaba de camino. Al llegar al área en el que los sofás y televisión se encuentran observamos a todos de rodillas siendo rodeados por hombres vestidos de negro y el rostro cubierto por pasamontañas, en sus manos armas con silenciador están siendo empuñadas.

En casa solo estábamos los de siempre y Beleck junto a Saith, ya que los hombres de Beleck fueron a otra casa en el pueblo porque aquí no cambiamos todos. Ahora es cuando maldigo la falta de espacio aunque así no saque nada.

- Arrodillados.-exige el tipo a Riva y a mí. Le hacemos caso, ella se posiciona al lado de Beleck que es al final de la fila, yo lo hago en la otra punta al lado de Lilura quién está temblando un poco y abraza su vientre disimuladamente.

Le están haciendo pasar un mal rato y eso no me gusta.

-Y bien, ¿Quién es Lilura Alistair?-pregunta el tipo.

Mierda, estamos hundidos en la mierda y mucho.

Los Alistair || COMPLETA ✔️✔️||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora