𝑪𝑶𝑵𝑭𝑰𝑫𝑬𝑵𝑻 || 𝒀𝒆𝑱𝒖

ʟʟᴀᴍᴀᴅᴀ ᴇǫᴜɪᴠᴏᴄᴀᴅᴀ

— ¡Si~~!— Gimió alto mientras sus manos se aferraban a las sábanas blancas. — ¡No pares!

— Me gustas de tantas maneras, creo que está es una de mis favoritas.

La respuesta fue seguida con que aquellos movimientos siguieran a un ritmo un poco más rápido.

— ¡Dios mío! ¡Aaah~!— Su columna se despegó del colchón para hacer un arco casi perfecto.

— ¡Oh, santo cielo!, me encantas.— Dijo mientras llevaba su boca a uno de sus pechos para lamerlo.

— Siento.... Siento que yo... yo

— No te contengas .— Subió dejando un camino de besos húmedo hasta su oido dónde le surruro para después morder el lóbulo.

— ¡Oh! Lo haces tan bien, cariño.— Jadeó con el poco aire que podía haber en su sus pulmones llevando sus manos al cabello de su contraria.

Sus manos que jalaban levemente el cuero cabelludo fueron descendiendo hasta que dieron a parar a la espalda de la persona arriba de ella, atrayendola más hacia si misma, excitandose más cuando sus uñas rasguñaron levemente su piel haciéndola jadear.

Sentía que era demasiado para que su cuerpo lo pudiera soportar, sentía que iba a explotar en cualquier momento.

Y ya no podía contenerlo más, quería explotar en aquella bomba de placer en la que había sido metida.

— ¿Así es como te gusta?— Preguntó de nuevo en su oido viendo que con solo el tacto y susurros hacia que su cuerpo temblara recibiendo esto como una respuesta a su pregunta

Su mente nuevamente se había puesta en blanco por solo centrarse en las sensaciones y le era imposible formular una respuesta coherente más allá de solo jadeos.

— Aah~~

— Vamos linda, déjalo salir.

Fue todo lo que bastó para que sus ojos se cerrarán y un grito más fuerte que los anteriores saliera de sus labios, mientras todo su cuerpo se sentía tan sensible y tembloroso.

Había llegado al clímax de todo, y físicamente se sentía en las nubes aunque no se podría decir lo mismo de los lugares por dónde estaba su mente

Sintió como el peso de encima suyo desaparecía y fue entonces que se dió el valor para abrir los ojos encontrándose con el liso color blanco del techo de aquel hotel con una mínima iluminación que la luna le otorgaba.

Giró su cabeza hacia la derecha, encontrándose con aquella silueta que se encontraba totalmente desnuda frente al mostrador.

— ¿Qué buscas? Regresa aquí.

— Ya voy, solo quería un cigarro.

Dicho esto se giró nuevamente pocos segundos después sintiendo como el colchón se hundía a su lado y era abrazada mientras el peso de una cabeza se recargaba sobre su pecho.

— ¿Encontraste alguno?— Preguntó recibiendo una negativa con la cabeza que seguía recargada.— Mala suerte, también quería uno.

— No sabía que fumabas.

— No lo hago, solo pensé que sería una buena idea para probar una primera vez. — Admitió.

La cabeza que se recargaba sobre su pecho se levantó y sus ojos hicieron conexión por solo unos momentos.

— Por lo menos sería la primera en algo.

— Tal vez.— Contestó removiendose un poco incómoda por el comentario. Sin poder controlarlo se le escapó un bostezo.