Espectros del pasado

97 9 1
                                    

Cuando llegamos a la verja que rodea el Instituto nos despedimos de los demás prometiendo que quedaremos dentro de más o menos dos días. Y después entramos.

Estamos casi a punto de subir las escaleras que llevan hasta la puerta de entrada, pero algo me da en la cabeza. Me llevo la mano a la zona donde recibí el impacto, y de nuevo algo me da, pero ahora en la frente.levanto la vista frotando la parte dañada, y veo a Eric a punto de lanzar otro vez lo que creo que es una piedrecita.

-¡Para!-Grito antes de que la lance.

Él baja la mano con la que iba a lanzarla, pero se pone un dedo en la boca indicando silencio. Desaparece unos segundos en la habitación y vuelve a salir con un...avión de papel en la mano, que nos lanza. Gabriel consigue coger lo al vuelo y lo abre. En el interior, con una cuidada caligrafía, se lee:

"La señora Eleanor acaba de volver al Instituto, así que no podéis entrar por la puerta principal u os oirá y os preguntará dónde estabais. Creerme, no es bonito que esa mujer te interrogue.

  Si queréis, podéis subir por mi ventana e ir desde aquí a vuestras habitaciones."

  Ambos nos miramos, y después levantamos los pulgares en señal de aprobación. Eric vuelve a desaparecer, y en seguida una larga cuerda cae por la ventana. Yo soy la primera en trepar, y a los pocos segundos me sigue Gabriel.

-¿Cómo es que sólo ha vuelto ella?-Pregunta nada más llegar a la ventana y colocarse a mi lado.

-No lo sabemos.-Responde nuestro interlocutor.-Simplemente llegó y nos mandó a dormir, sin dar explicaciones de ningún tipo.

  Yo voy a replicar, pero Gabriel me indica por gestos que será mejor ir a dormir antes de que nos pillan, y Eric asiente dándole la razón. Suspiro resignada y sigo a mi amigo fuera de la habitación.

...................................................................................................................................................................................

  Esa mañana despierto animada. No sé el motivo, pero supongo que tendrá algo que ver con que pronto podré volver a ver a mis padres.

  Me ducho y me visto con lo primero que encuentro, y bajo a desayunar. Por el camino me encuentro a Eric, y vamos charlando de cosas sin importancia hasta el comedor. Pero al llegar allí, nuestros ánimos se descinchan por completo.

  En el comedor reina el silencio. Y, o me lo parece a mí, o la decoración es más lúgubre de lo habitual.

  Entramos, y yo me deslizo disimuladamente en el asiento que hay libre al lado de Gabriel, mirándolo interrogante. Él encoge los hombros sin respuesta a mi pregunta silenciosa. Suspiro y me concentro en el desayuno, que consiste en pan con ajo, café y tortitas quemadas.

-Muy bien, ya que hemos conseguido aparecer todos,-Comienza Eleanor lanzándome una mirada acusadora.- supongo que os estaréis preguntando el por qué de mi grata presencia aquí.

  Todos dejamos a medias nuestros desayuno y prestamos atención a lo que tenga que decirnos. Aunque soy de la opinión de que el desayuno se habría quedado a media de todas formas.

-Bien.-Continua.-La culpa de todo la tiene ella.-Dice señalándome con un dedo acusador (¿pero es que nunca la han enseñado que señalar es de mala educación?)-Al parecer, la Clave quiere formularle algunas preguntas, y para ello tenemos que celebrar un consejo. Así que venga, todo el mundo a prepararse. Nos vemos en el santuario dentro de una hora.

  Y dicho esto, se marcha de la sala totalmente tiesa.

-¿Un consejo?-Pregunto sin comprender.-¿Para qué?

La caja metálica-(Cazadores de sombras) (LCM #1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora