Problemas (Karushuu)

Cap 5

-Hola Shuu- Lo saludo Ren.

-Hola Ren- dijo Gakushuu dedicándole una sonrisa a su amigo, empezaron a hablar del examen que tenían la semana que viene mientras se dirigían a clase.

-Por cierto, ¿ya te has enterado de lo que ha anunciado el director la semana pasada? lo digo porque tú estabas enfermo y faltaste- dijo Ren.

-No, no me ha dicho nada, ¿Qué dijo?- preguntó Gakushuu.

-Bueno, como tú ya sabes, este curso está compuesto por dos años, al primer año suele ser más difícil porque es todo teórico, se hacen la mayoría de exámenes etc y el segundo suelen haber más excursiones, prácticas cursos, tú ya sabes, pues el punto es que como todos los alumnos de tercero, incluso la clase E han pasado la primera parte del curso con notas ejemplares las excursiones serán más largas, bonitas, elegantes y hasta la clase E empezará a venir en primera clase- terminó de decir Ren.

-Eso me parece bien y justo- dijo Gakushuu mientras entraba a su clase, estaba vacía como de costumbre, al fin y al cabo era muy temprano y los únicos que tenían permitido entrar a la clase eran los 5 virtuosos y los otros 3 siempre llagaban tarde.

-Oye Shuu, mis padres se han vuelto a ir de casa u no volverán hasta la l año que bien como poco- empezó Ren.

-¿Ya se han ido? Llegaron la semana pasada- dijo Gakushuu.

-Ya, pero por lo menos me vistan, hay padres que no visitan a sus hijos, se ven de viaje, los dejan tirados y les mandan dinero como si el los pudiera reemplazar- dijo Ren.

-Bueno, prosiguiendo- continuó Ren- ¿Me puedo quedar a dormir en tu casa, no sé, tal vez... una semana o dos?-

-Claro, aprovechando que aún no han empezado las clases vamos a decírselo a mi padre- Dijo Gakushuu.

-Okay, vamos- dijo Ren finalizando esa conversación para ir al despacho del presidente de la junta.

Después de tocar la puerta del despacho se quedaron esperando delante de esta hasta que escucharon un se puede pasar de parte del director.

-Hola- saludó el director Asano.

-Hola- dijeron al unísono

-Qué se os ofrece- Gakuho

-Te quería preguntar si Ren se pude quedar a dormir en nuestra casa por una dos semanas- dijo Gakushuu.

-Por supuesto, Ren siempre es bienvenido- dijo Gakuho recordando los momentos en el que este había estado para apoyar a su hijo y las veces que se había quedado en su casa porque sus padre no solían estar en la de él.

-Ahora si me disculpáis, tengo que subir la montaña de la clase E a dejar cierto papeleo, nos vemos esta tarde, adiós- dijo el director Asano mientras agarraba ciertas hojas de su escritorio y salía por la puerta de su despacho.

-Parece que me voy a quedar en tú casa durante un tiempo Asanito- dijo Ren.

-Siempre- Respondió Gakushuu.

El director Asano estaba subiendo la montaña, cuando llegó a la clase E tocó la puerta para después entrar.

Gakuho entró a la clase haciendo que todo el mundo se callara y le prestara atención.

-Buenos días director Asano, se puede saber la razón por la que está aquí- dijo Karasuma.

-Buenos días Karasuma, he venido a entregar el papeleo- dijo Gakuho mientras se dirigía a la mesa a dejar los papeles.

Gakuho se había olvidado que tenía las manos vendadas por lo que había pasado esa noche y no pudo evitar que Irina y Koro-sensei se fijaran en esto.

-¿Qué le ha pasado en las manos director Asano?- preguntaron al unísono haciendo que todo el mundo que estaba en esa clase se fijara en sus vendas.

Las vendas...¿Qué les digo ahora?

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Karma se acababa de levantar, era lunes y le daba mucha pereza ir al instituto así que decidió simplemente hacer el vago y jugar videojuegos hasta que se aburriera, cuando eso pasara simplemente iría al instituto como si nada y aprovecharía que tiene un pulpo como profesor que asesinar y que se mueve a mach 20 para entretenerse.

No le hacía mucha gracia tener que subir la montaña de la clase E y si no fuera por el asesinato no lo haría, pero la verdad es que lo que había estado pasando desde el año pasado había mejorado muchos aspectos de su vida y de la de sus compañeras y subir la montaña ya no era un gran problema y todo gracias a Koro-Sensei y a Karasuma.

No pasaron más de 15 minutos de hacer el vago para que Karma se aburriera y decidiera prepararse para ir al instituto, en su vida hubiera pensado que ir a clases iba a ser más divertido que no hacer nada en su casa, a veces pensaba que lo del pulpo de verdad le estaba afectando, pero no era así, a él le divertía mucho estar con Koro-Sensei, Karasuma, Irina y la clase E en general.

Karma siempre había sido un chico independiente, a sus dos años sus padres lo dejaron a su suerte rodeado de sirvientes, pero ninguno lo trató como familia, tenían miedo de hablar a un niño de una familia con dinero y meterse en problemas, fue ignorado la mayor parte de su vida y sus padres pensaron que podrían ser reemplazados por dinero y regalos caros.

A sus 12 años de edad, no hace mucho sus padres despidieron a todos sus sirvientes diciendo que ya era lo suficientemente mayor para cuidar de ser mismo y ser independiente, ignorando la mala actitud que tenía y sus actos de rebeldía, ignorando que lo hacía para llamar su atención, para poder sentir que sus padres sí que estaban allí, aunque no fuera por orgullo sino por problemas que había causado, no era que no haya intentado hacerlos orgullosos, pero no bastó, ese sí, nunca abandonó sus buenas notas, no iba a joder su futuro por una personas que en el fondo sabía que por mucho que lo intentara no le iban a prestar atención.

Por eso la clase E se había vuelto parte de él, ellos no lo sabían, pero la familia que nunca tuvo había sido reemplazada.

Las figuras paternas que nunca tuvo se volvieron tres personas que hasta hace un año aproximadamente no conocía.

Para él, para Karma Akabane, la clase E estaba compuesta por tres profesores, que eran las figura paternas, personas de confianza, gente honesta y las únicas personas que te miraran con determinación y te aceptaran tal y como eres y también estaba compuesto por los alumnos, hermanos, gente te apoya, personas que por muy difícil que sea la situación van a estar ahí para ti, la verdadera amistad que va durar para siempre.

Karma terminó de prepararse para ir al instituto, salió de su casa y fue rumbo al Kunugigaoka, aunque llegaba un poco tarde no creía que Koro-Sensei se le fuera a tomar muy mal.

Subiendo la montaña el pelirrojo de la clase E vio el director por delante de él a unos diez metros de distancia.

Estaba llevando un taco de papeles y subía la montaña tranquilamente.

A Karma le impresionaba como este subía la montaña sin ningún problema, parecía que lo hacía muy a menudo. Lo que no sabía Karma es que el director dio clases en el viejo aula tío durante mucho tiempo y hasta hace aproximadamente un año, antes de que empezara el caso de Koro-Sensei, él y su hijo subían todas las tardes a hacer ejercicio y a entrenar y por la mañana también solía traer a sus alumnos de bachillerato a hacer ejercicio también.

Lo que más llamo la atención al delincuente del Kunugigaoka eran las vendas que rodeaban las manos de este.

Karma entro en el momento exacto en el que todo se detuvo porque Irina y Koro-Sensei le habían hecho la pregunta a Gakuho que él se estaba haciendo durante toda la subida de la montaña.

La pregunta que puso contra las cuerdas al director administrativo del centro educativo de secundaria y bachillerato, Gakuho Asano.

-¿Qué le ha pasado en sus manos director Asano?- preguntaron Koro-Sensei e Irina al unísono.

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Edición 1: 11/4/22