Capítulo 22

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El tiempo 

Seis meses después

Dormir se había convertido en una tarea complicada gracias al pequeño Jack que está creciendo a un paso apresurado.

Me coloco una camisa de Jake ya que las mías ya no me quedan, me quedo con el pantalón de pijama y me pongo mis pantuflas para poder bajar a comer.

— Buenos días — saludo a mamá y Estela quien está cocinando

— Buenos días Any — dice Jake quien está entrando a la habitación — ¿Esa es mi camisa?

— Estoy embarazada de siete meses, no me molestes Jake, igual hoy me voy.

— Prometemos ir a visitarte hija.

— Gracias mamá — me acerco a ella y le doy un abrazo

Me siento para poder comer y después de una ducha rápida ordenó mis cosas para poder irme, volver a Nueva York era algo que quería hacer excepto por el hecho de que siempre encontraré a Daren en ese lugar.

Tras una larga despedida subo al avión, el cansancio se adueña de mi lo que hace que me quede dormida, el temor se adueña de mí, tener la posibilidad de volver a verlo y no saber que más decir.

— ¿Necesita ayuda? — pregunta un señor al ver que quiero bajar la maleta

— Sí, por favor — esbozo una sonrisa

Él me ayuda a bajar la maleta y la tomo entre mis manos, bajo del avión y camino para buscar un taxi.

— Muchas gracias — digo al ver la entrada de mi apartamento

Le doy el dinero al taxista y bajo, subo por el ascensor hasta llegar a mi apartamento el cual me hace recordar que no he comprado nada para el pequeño Jack.

— Que dices pequeño ¿te gustaría una habitación?

Esbozo una sonrisa, me voy a cambiar de ropa poniendome un vestido de tela el cual es perfecto para el clima frío el vestido resalta de mi embarazo lo cual me roba una sonrisa de inmediato y tomo las llaves de mi auto, comienzo a conducir aunque debido al trafico todo se demora más, por esa razón prefiero caminar aunque en este momento no es una opción ya que mis pies duelen.

— Vamos pequeño Jack, no des patadas o vas a hacer que choque.

Murmuro mientras levanto la vista y freno en seco al ver que el semáforo cambió a rojo, en ese instante escucho el golpe de otro auto.

— Maldición — murmuro al ver como un auto negro acaba de chocar contra la parte trasera de mi auto

Tomo aire y bajo con cuidado del auto para ver los daños.

— ¿Esta bien señorita? — pregunta con preocupado el señor

— Sí yo solo...

Mi respiración se corta al ver como Daren baja de la parte trasera del auto, él me observa con angustia hasta que repasa mi cuerpo con sus ojos.

— Anne... — dice casi en un tartamudeo

— Hola Daren — digo mientras intento cubrirme con mis brazos

— Debo de llevarte al hospital, puedes estar lastima — dice con preocupación

— Estoy bien solo...

Nueva YorkDonde viven las historias. Descúbrelo ahora