Tal vez no es para siempre...
— Dar... — me recuesto en la puerta
— Por favor déjame pasar, no te puedes quedar más tiempo encerrado, vamos a solucionar esto, solo...— Solo ¿qué? — finalmente abre la puerta haciendo que caiga de espaldas
— ¿Vamos a solucionar lo que ocasionaste?— Dar yo nunca quise...
— Pero lo hiciste, hiciste que me quedara sin nada.
— Prometo que todo se va a solucionar, solo tienes que...
— Voy a salir, no puedo estar más tiempo encerrado en este lugar — dice entre dientes
Sale de la habitación y cierra la puerta con enfado, la actitud de Daren era algo normal, al menos así se volvió en las últimas semanas, un mes había pasado desde que todo se fue a la ruina.
Dar no lograba solucionar los problemas de la empresa y no le permitían regresar a su puesto, volvimos a mi antiguo apartamento el cual Daren odia aunque no creo que haya algo que no odie en estos momentos.
Había logrado encontrar un buen trabajo y me ofrecieron mi propia columna para poder escribir en la revista.
— ¿Jake? — digo confundida al verlo de pie en la puerta
— ¿Cómo estás? Supe lo que pasó — me da un abrazo
— Todo esta mal, esta vez si lo arruine, arruine a Daren — digo en un sollozo mientras abrazo a Jake
Las lagrimas comienzan a salir al igual que los murmuros de Jake intentando consolarme.
— Tienes que irte — me separo de él
— Pero acabo de llegar y tú necesitas ayuda...
— No quiero que estés aquí en este momento, voy a llamarte, lo prometo.
— Si no me llamas vendré a buscarte.
Yo asiento y limpio las lagrimas de mi rostro, él me observa un momento antes de darme un último abrazo y darse las vuelta, cierro la puerta y me quedo sentada en la cama en espera de Daren hasta que escucho el sonido de las llaves intentando abrir la cerradura.
— Esto terminó — digo firme al verlo dentro del apartamento
— ¿Qué? — dice en tono molesto
— Esto, nosotros, terminamos — cruzo mis brazos — Se que fue mi culpa y que estas pasando por un mal momento, pero de eso se trata apoyarse y salir juntos, pero tú no sabes hacer eso y solo estás concentrado en culparme y no en buscar soluciones. La vida no se trata solamente del dinero que tienes Daren.
— Bien, si eso quieres, pero yo no soy el que arruino esta relación Anne.
Se acerca al clóset, toma su maleta y comienza a meter su ropa mientras habla entre dientes.
— Deja las llaves cuando te vayas — indico antes de salir
Bajo por las escaleras intentando tomar aire y no llorar, pero no puedo, mi vida se había convertido en un infierno estando con Daren, éramos dos desconocidos bajo un techo, dos desconocidos que solo sentían odio y resentimiento aunque no quisieran aceptarlo.
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Nueva York
Teen FictionUna lavandería, una equivocación y una oportunidad. Todo sucede en Nueva York, Daren y Anne dos polos opuestos que siempre saben donde encontrarse. Un empresario y una escritora, no tenían razón para toparse en un lugar como la gran manzana, pero lo...