19 of June | dreamnotfound

007.

Sentado en un costado de su cama, recordando y analizando su sentir.

Tal vez ya era hora de superarlo y caer de nuevo por alguien más...

Ya no sentía ese vacío, ese hoyo en el que sentía que iba a caer y nunca poder salir.

Por un momento, pudo volver a sentir mariposas en su estómago, mirándose a un espejo y viendo sus mejillas teñidas del color carmín.

O incluso, ya había caído...

Volviendo a sentir esa sensación de nerviosismo en su cuerpo que conocía a la perfección, que a cualquier roce de sus pieles se preguntaba a sí mismo; ¿De nuevo?

Pensando en que tal vez ya no debería dejarle todo el trabajo al tiempo, y empezar por su cuenta. Queriendo sanar para su bien y no solamente por la necesidad de tener que hacerlo.

Quería hacerlo, de hecho, lo necesitaba. Su vida había mejorado considerablemente para bien, sus amigos estaban con él e incluso cuando estaba por los suelos.

Recostandose suavemente en su cama, desordenando un poco para poder tomar su teléfono que descansaba en una pequeña mesa que yacía al lado de su armario.

A duras penas poder tomarlo sin querer hacer tanto esfuerzo, mirando la hora; 12:40 de la mañana, agradable.

Deslizando la pestaña de notificaciones, encontrando cosas normales; correos, redes sociales y llamadas perdidas de sus padres. Suspirando un poco ante estos últimos, y arrugando su nariz ante su claro disgusto con esto.

Tratando de hacer algo con que distraerse, había dormido durante la tarde, probablemente no podría dormir después de tantas horas acostado.

Abriendo su bandeja de mensajes, Clay, Nick, Will, Niki y Alex. Nada fuera de lo común, aunque después de deslizar un poco su dedo por la pantalla pudo ver un contacto apodado con un corazón rojo.

Dudando de quién era, pero después cayendo en cuenta de que era él.

Suspirando nuevamente y sintiendo un poco de fastidio al entrar a dicho contacto, viendo un poco de sus conversaciones y no pudiendo evitar sonreír ligeramente ante tantas cosas tontas de las cuales solían hablar.

Bufando por la cantidad de halagos que decía hacia el contrario, maldiciendo a sí mismo con diversión.

Dudando si debía de hacerlo, pero lo hizo.

Bloqueando el contacto, ya no lo necesitaría más después de todo.

Soltando una pequeña sonrisa a sí mismo en forma de demostrar su orgullo.

Incorporándose y recargándose en la pared detrás suya, aun sin que esa sonrisa se borrará de su rostro.

Saliendo de su habitación en silencio, entrando a la de Alex, sin sorprenderse de que aún no estaba durmiendo.

- ¿Qué haces aquí? - dijo el mexicano entre susurros, viendo como se acercaba con una dulce sonrisa en su rostro, contagiándose también.

- ¿Recuerdas que... eso? - no quería dar detalles, pero necesitaba sacar su felicidad, en todo ese tiempo ese ya era un gran avance.

- Ajá, chico, lo sé; ¿Qué tiene que ver eso con que vengas a mi habitación a mitad de la noche?

- Creo que quedó en el pasado... - susurró y enseñando a Alex su teléfono, sintiéndose como un niño pequeño mostrando su dibujo recién hecho a su amada madre.