¿Donde lo dejamos?
A sí, mi amiga se había quedado si casa.
Nos quedamos en silencio, yo no sabía que hacer. No tenia ni idea, no moví ni un solo músculo.
-Mierda -Susurra- La he liado pero buena.
Antes de que yo pudiera decir nada, en el pasillo aparece Evae (esta vez vestida) con el chico con el que estaba.
Ella va delante con un aire de superioridad, mientras que él solo la sigue, indiferente.
-Esta noche no duermo aquí -Dice Evae abriendo la puerta principal- Pero que sepas que cuando venga mañana por la mañana no quiero ver nada tuyo.
Mi amiga está pensativa, asustada.
-Espero no verte más, zorra -Dice antes de cerrar la puerta de un portazo.
Todo en silencio. Después de ese sonoro portazo, no se emite ningún otro ruido más que la respiración acelerada de Sheila.
Sé que ahora se le está viniendo el mundo encima.
-Oye, no te preocupes nena -Le pongo mi mano en su hombro en señal de apoyo- Te puedes quedar en mi piso hasta que encuentres donde quedarte.
-No -dice casi en un susurro- Me iré a un hotel.
- Oh! Vamos ni de broma. Tu te quedas conmigo.
Ella me mira a los ojos, sería. La preocupación es palpable en su cara.
- Ya tienes suficientes problemas, no necesitas ninguno más -suspira- además, que Bieber y tú no estáis bien...
-Me da absolutamente igual lo que digas, te vienes a mi casa y no hag más que hablar. Y sobre Bieber... me ayudarías mucho estando allí, de apoyo, el ambiente no será tan tenso y podrás quedarte todo el tiempo que desees.
En sus ojos se asoman lágrimas y dibuja una sonrisa y me coge de las manos.
- Gracias Alexa, tú sí que eres una amiga de verdad- Dicho esto me da un fuerte abrazo que yo le devuelvo de manera cálida- Por cierto te pagaré mi parte del agua y comida.
- No te preocupes por eso ahora -Le digo sin separarme de ella- Ahora me voy a quedar aquí a dormir, contigo y te ayudaré con la maleta y a recoger tus cosas.
Ambas nos separamos y sonreímos.
-Gracias.
***
Cogí mi teléfono.
Tenia un montón de llamadas de Bieber, alguna de su madre, mensajes, algunos de trabajo...
Me metí en el chat de Bieber. Le escribí que hoy no dormiría en casa, sin más explicaciones.
Tampoco es que fuera el momento de explicarle mucho más.
Lo primero que hicimos fue comernos la comida, porque si no se iba a poner fría.
Después de eso comenzamos a recoger todo lo que le pertenecía a Sheila. No podía dejarse nada.
En su cara la confusión y la preocupación reinaban.
***
-Claro no se preocupe, lo tendrá listo el mes que viene, me encargaré personalmente- Le aseguré a la cliente.
- Eso espero. Hasta luego, gracias -se despidió y colgó.
Suspiré frotándome la cara con las manos, cansada. ¿Porque no hacen el trabajo bien? No lo entiendo.
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El Chico No Es Siempre Un Caballero [#2]
ChickLitLa vida de Alexa ha cambiado mucho desde que acabó la preparatoria. Vive con su novio en un amplio departamento, pero la aparición de su antiguo amor le hace dudar de si esa es la vida que ella desea. 📛2º Libro de la saga de No son siempre de la r...