|"My heart and feeling are worse than a storm, but by your side it returns to its calm" |
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Mi corazón estaba más que roto, no sabía cómo había terminado usando nuevamente este vestido negro. Recuerdo que al momento que ingresé al hospital de "Emergencia" dijeron drásticamente los doctores que fue un milagro como yo logré pelear incluso por perder mucha sangre, mi vida incluso peligraba pero por alguna razón aguanté y mucho más.
Mi mano fue enyesada ya que al golpear al tipo rompí mis nudillos al momento que le rompí su mandíbula... O no se la verdad, incluso estaba bastante fuera de mi que incluso los mareos a mi alrededor, el escalofrío y la debilidad que sentía en ese momento se fueron al ver cómo mamá... Murió a frente mío. Naoto y papá al ver como los agentes me quitaban las esposas pude notar un alivio en sus caras al escuchar que yo no había disparado ni un arma y mucho menos matado a ese bastardo... Aunque ganas no me faltaban.
Tanto la pistola que estaba en la escena y la bala que estaba en la cabeza de el hombre no congenia van, aparte al ver qué estaba lastimada y sobretodo de que mi madre perdió la vida, me dieron como inocente... Terminaron aceptando que me defendí.
Ahora... al momento que salí de la celda donde permanenci encerrada por más de doce horas lo primero que escuché fueron las palabras de Naoto que mi hermana... Al igual tuvo un atentando acabando con su vida frente a Takemichi.
No tenía cabeza, ni siquiera pude dormir toda la maldita noche... Pero lo que más le preocupaba a papá es que no había soltado una lágrima en todo estos dos días. Claro que no voy a llorar... Pude notar que cambiando la muerte de Draken en el pasado, logramos Takemichi y yo aplazar su muerte unos meses... puedo cambiarlo... Puedo cambiar este destino, lo puedo hacer. Y llorando no ayudará en nada.
Pero aun así ese sentimiento pesado en todo mi cuerpo no se iba, mis uñas se clavaban en mi piel causando leves rasguños en estás, los lentes negros tapaban las ojeras que se me marcaban de por la falta de sueño pero aun así no sucumbia a este.
No quería entrar... La gente volvia a mirarme de la misma manera que la primera vez que entre aquí. Con su rostro lleno de lástima, diciendo su clásico " Pésame". Yo no quería su maldita lástima.
Yo quería a mi hermana y a mi madre de vuelta... Sabia que lo de mamá y Hina no fue casualidad, alguien nos quería ver muertas a Hina y a mí. Solo reza quien sea que mando esa orden... Sus días están contando.
Enserio nunca había estado tan enojada como ahora, pero es que no entendía por qué querían muerta a mi hermana o a mí...Esto es muy confuso.
- Hanae...- La voz de él me hizo voltear directamente a un lado mío.
- Takemichi...- Aunque él hubiera presenciado la muerte de Hina aún seguía estando como si nada, era fuerte... ¿Cómo lo sabía?. El brillo de sus ojos delataba que no se rendiría... Me preguntó si los míos seguían teniendo ese brillo que tanto Hina le gustaba ver en mi. - ¿Que ocurre?...- Pregunté aguantado mis ganas de seguir estando sola, por ahora no importaba lo que quisiese.
