|"The night is short, but a festive night lengthens it." |
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La mirada fría de ella era penetrante ocasionando que quisiera arrodillarme, pero aun así mi dignidad era más fuerte que su frialdad. Las palabras de Jade rebotaban en mi cabeza que eran mezclada en cada una de las líneas que había leído en el diario que encontré en esa caja, demonios enserio estoy 80% segura que la chica quien tengo frente a mí y quien es considerada la reina de este bajo mundo de las pandillas, aquella que de un chasquido hace que todo se incline a sus pies se trate de ni más ni menos que Yui, la hermana menor de Jade y Ren.
No lo entendía, no tenía nada que me recordara a Jade... Incluso podía decir que había sido criada por el mismo diablo en persona. No mentía al momento que me dijo que se ve físicamente débil, pero viendo sus nudillos y como está este hombre detrás mío es más que claro que es demasiado fuerte.
- ¿Eh? Y tú eres...- Rindou se acercaba para sin más hincarse y mirarme fijamente a mis ojos, es extraño esa chica no dejaba de verme de la misma manera que me vió el día del Bloody Halloween.
- ¿No es acaso la chica que se disfrazó de un integrante de la ToMan?...- Rascó su cabeza para sin más acercarse de igual manera a mí, su mano tomó la mía de un momento a otro para sin más comenzar acariciar la única cicatriz de mi cuerpo. - Si, así es... Esa cicatriz la delata, lástima que una pequeña niña ya tenga marcas tan horribles en su cuerpo...- Mi mano la moví rápido de la suya, la presencia de estas personas no me gusta para nada... Hanae en qué lío te metiste.
- ¿Cómo te atreves?...- De un jalón pase entre ambos sujetos, su mano apretaba con fuerza mi cuello estampado me contra la pared, incluso escuché mis huesos crujir al mismo tiempo que los ladrillos de la pared se agriertaron.
Mi respiración se entre cortaba ya que su apretón no daba paso al aire, está chica....¿¡Cuánta fuerza hay en su mano?!. Sus ojos fríos se veían fijamente con los míos, estamos demasiado cerca que incluso su respiración choca en mi cabeza, no puede ser verdad... Ella no puede ser la hermana de Jade, incluso si Jade jamás lastimaría a alguien dejándolo como ese hombre.
- ¿Quién te crees tú para meterte en mi caminó?.- Su apretón aunmento más. - ¡Para que lo sepas maldita mocosa tú no eres nadie!, Tu no eres nada y aunque mi hermana te allá entrenado no te hace ni especial y ni mucho menos fuerte.- Todo se ponía negro, no podía más... Me hace falta la respiración, pero... No quiero pelear con ella, no quiero pelear con la hermana de Jade.
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