¬ Tobio uke one-shtos.
Porque el rey de la cancha, es, sin duda alguna, un genio digno de reconocer.
° Tobio uke/bottom/pasivo.
° Historia 100% original mía.
° One-shots del manga/anime "Haikyuu". Uso de universos alternativos.
° Las imág...
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Narrador omnisciente.
El día era frío y lluvioso, la gente en las calles de Tokyo lucía chamarras e impermeables, algunos se cubrían bajo sus paraguas y otros, carentes de estos, apresuraban su paso para llegar a sus hogares y evitar empaparse.
Kenma no tenía que preocuparse por nada de eso, él solo disfrutaba de la comodidad de su cuarto mientras jugaba videojuegos, en espera de su lindo novio que llegaría pronto. La partida acababa de iniciar, justo cuando la lluvia se intensificó, Kenma temió por un momento que hubiera problemas con la conexión, pero al parecer todo estaba bien... hasta que ya no. Un trueno azotó el cielo, y seguido de este varios más. A poco de que el juego terminara, la pantalla se apagó. Se había ido la luz.
- Mierda... ¡No, mierda, mierda! -Kenma frunció el ceño y comenzó con su berrinche- ¡Maldita sea, estaba a nada de ganar! Estúpida luz, estúpida lluvia, estúpida vida.
(...👑...)
Kageyama acababa de llegar a casa de su pareja, pagó al conductor del taxi que lo había transportado desde la estación de trenes hasta ahí y entró a la casa. Se estaba quitando los zapatos cuando todo se oscureció, se fue la luz, pensó.
- ¡Kozume-san, llegué! -anunció Tobio caminando hacia el cuarto de su pareja- ¿Kozume-san? -indagó confundido al no haber obtenido una respuesta antes-
Kenma, que no lo había oído por estar maldiciendo la existencia de cada mínimo ser en el universo, volteó para encontrarse con Kageyama ligeramente mojado bajo el marco de su puerta.
- Tobio. -responde Kenma, en medio de su puchero-
- Mmh... ¿está enojado? -señala el menor, dudoso- ¿Pasó algo? Se ve molesto, Kozume-san.
Kenma no responde y se limita a apuntar la pantalla completamente negra con desgano. Por otro lado, Tobio ya se imaginaba lo que había pasado, estaba claro que la partida de su novio se vio interrumpida por la lluvia, no había que ser genio para deducirlo.
- ¿Hay algo que pueda hacer para alegrar a Kozume-san? -preguntó acercándose a él, con una brillante idea en mente. Al estar frente al rubio, movió un poco la silla en la que estaba y con cuidado se sentó sobre su regazo, dándole la cara- Tal vez-
