¬ Tobio uke one-shtos.
Porque el rey de la cancha, es, sin duda alguna, un genio digno de reconocer.
° Tobio uke/bottom/pasivo.
° Historia 100% original mía.
° One-shots del manga/anime "Haikyuu". Uso de universos alternativos.
° Las imág...
Especificaciones: Slytherin Tobio x Ravenclaw Kiyoomi.
- Lemon: No.
- Advertencias: lenguaje potterhead; probablemente si no has leído la saga o visto las películas pueda ser algo confuso, pero no es imposible de entender.
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Narrador omnisciente.
Expecto Patronum*, uno de los hechizos más complicados de lograr en todo el mundo mágico. El maestro de defensa contra las artes oscuras*, Takeda-sensei, había estado intentando enseñarlo a sus estudiantes más sobresalientes, entre ellos, Kageyama Tobio.
Al chico de Slytherin* no le llamaba mucho la atención aprender el encantamiento, creía que era algo demasiado fácil para él, o así fue hasta que luego de intentarlo un sinfín de veces no logró conjurar su patronus. Decir que estaba frustrado era poco, pero es que de verdad no podía encontrar un recuerdo lo suficientemente felíz para lograrlo y eso lo hacía sentir miserable.
Kageyama miraba con odio -y envidia- al resto de sus compañeros que reían alegremente invocando sus patronus y presumiendolos entre sí. El león de Hinata, la liebre de Yachi, e incluso la estúpida rata (una nutria, según Kei, que para Tobio era solo un roedor cualquiera) de Tsukishima se veían geniales a su alrededor, corriendo y saltando por ahí a un lado de sus invocadores. Frunció el ceño y decidió que no era para tanto. No tenía un patronus, ¿y qué? No lo necesitaba. Y es más, por él se podrían pudrir todos los que sí lo tuviesen.
A paso veloz caminó molesto de regreso a los dormitorios de Slytherin, murmurando maldiciones por lo bajo. Al entrar a la sala común lo primero que vio fue a su senpai de último año leyendo en el sillón. No estaba de humor para lidiar con Oikawa y sus comentarios burlescos en ese momento, así que trató de no hacer ruido y pasar desapercibido directamente a los cuartos, pero el castaño lo descubrió tan pronto como dió un paso.
- ¡Oh, Tobio-chan! -saludó el mayor con una sonrisa y un signo de amor y paz en su mano derecha- ¿Cómo le va a mi kohai favorito?
- Bien. -contestó cortante Tobio, dándose la vuelta para tratar de huir, pero de la nada ya tenía a Tooru abrazándolo por los hombros- Tooru-san, por favor, quítate.
- Vamos, Tobio-chan, dime qué tienes, se te nota tenso. -comentó Oikawa, despeinado un poco sus cabellos con la clara intención de molestarlo-
Tobio estaba por replicar, cuando Tendou Satori, otro de sus senpais de último año, entró corriendo a la sala, con una fiesta de colores en su cabello. El chico era un metamorfomago*, y aún no sabía controlarlo muy bien, por lo cual en ocasiones el tinte de su pelo cambiaba de color contra su voluntad y lo exponía totalmente al resto de alumnos que no eran demasiado amigables con él y su condición.
