Zafiro [Emiliaco-omegaverse]

15

Emilio decidió no ir a el restaurante. Amaris cumplía tres años ese día, su bebé estaba creciendo tan rápido, Joaquin se había despertado temprano para prepararle un desayuno especial a su bebé, Emilio se quedó en la cama esperando a que el Omega saliera de la ducha para bañarse él, el menor no había querido que se bañaran juntos porque perderían tiempo.

Emilio planeaba hacerlo perder tiempo por no ducharse con él, sí. Era todo un Alfa vengativo. Joaquin salió vestido de la ducha, llevaba un short y un sueter de su Alfa que le quedaba por los muslos, estaba descalzo, su cabello estaba húmedo. Emilio se paró de la cama y se acercó a su Omega, una gota de agua se estaba resbalando por el cuello del menor, Emilio la lamió, el Omega se estremeció.

──Mmm, me hubiera gustado secarte yo mismo. ──lamió la oreja de Joaquin, el Omega cerró los ojos. ──¿Que dices?, ¿quiere volver a mojarte y así te seco?

Joaquin ladeó el cuello, Emilio lamió la marca del Pequeño, el Omega sabia que su Alfa hablaba en doble sentido. El mojarse y que lo secase era simplemente otra madera de decir que quería probarlo.

──Digo que me harás perder tiempo. ──Emilio sonrió contra su piel, la besó. ──Emi...

──Sí, sé que lo quieres, amor. Soy tu Alfa ──Joaquin se sostuvo de los hombros de Emilio, cuando sintió sus piernas debilitarse.

──Emi...

Emilio caminó a la puerta, Joaquin solo lo observó, colocó el seguro y se acercó sonriente a su Omega, descubrieron que en realidad no debía importar si su hija estaba en la casa o no, ellos simplemente cerraban la puerta, hacían lo que querían y luego simplemente salían. No tuvieron más problemas, no hubieron más frustraciones sexuales y Amaris estaba bien.

Agradecían al Omega de Romina, el niño de cuatro años siempre amaba jugar con Amaris, así que solo se iba a casa de ellos. Así que su relación en cuánto al sexo, estaba bien.

──Es el cumpleaños de nuestra hija... ──murmuró Joaquin en medio del beso caliente con Emilio.

No supo en qué momento estaba en la cama, con Emilio encima suyo, tocandolo como solo el sabía, estaba bajando sus shorts junto a la ropa interior.

──Sí, lo sé. Hay que darle de regalo un hermanito, ¿no crees? ──preguntó Emilio en un tono coqueto, mientras llevaba sus manos más abajo.

──No funciona así ──jadeo Joaquin ──Tengo que estar en celo, o tienes que estarlo tú.

──Bien podemos intentar.

Joaquin rió y besó a Emilio.

──Tu hija está despierta. ──jadeó. Emilio subió el suéter y lamió un pezon de Joaquin, el Omega jaloneo su cabello largo. ──y está gruñendole a la puerta.

──Que espere ──lamió los labios de Joaquin ──tú eres mío.

──Sí, pero seamos realistas, son más de ella──Emilio gruñó.

──Mío.

──Eres un bebé. ¡Ah!, bestia ──Emilio sonrió.

──Di que eres mío.

──¿Estás peleandote con una niña de tres años por mí? ──Joaquin sonrió y sintió el dedo de Emilio moverse en su interior.

──Es que eres mío. ──Joaquin gimió bajo. ──solo mío.

──Es tu hija, no seas terco. ──Emilio gruñó. ──Bien, bien. Soy tu Omega, tuyo. Ahora quitate que tu hija va a llorar fuera de la puerta.

Emilio se levantó a regañadientes, ambos caminaron hacia el baño, Joaquin para limpiarse y el Alfa para tomar una ducha bien fría. El Omega le dio un beso y salió de la habitación para encontrarse a su bebé llorando en el suelo, frente a la puerta de su habitación.

──¡Ay, bebé! ──Joaquin la alzó. ──No llores.

──Mami... ──Amaris abrazo el cuello de su mamá, sintiendo el aroma del Omega para tranquilizarse.

──Shhh, bebé. Está bien, mami está aquí, ¿ves? no llores, preciosa. ──Joaquin dejó un beso en la naricita de Amaris.

──¡Hola, bebé!, ¿quién cumple años hoy? ──exclamó Emilio saliendo luego de unos minutos. ──Ven aquí, princesa.

Amaris se lanzó a los brazos de su padres, el día iba a ser largo cuando llegarán los hijos de Nikolas, y el hijo adoptivo de Romina, y por supuesto Diego y Emanuel que técnicamente también eran niños.

Emilio suspiró.

──Va a ser un día largo.

Joaquin estuvo de acuerdo. Ambos se pusieron a acomodar para la pequeña fiesta de su hija, Amaris veía caricaturas mientras sus papis la consentian.