"En el final"

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Omnisciente

El estruendo generado en el choque de ambos cuerpos que batallan bajo la llamarada ardiente de alrededor. Rengoku cada vez se sentía más débil y su respiración parecía acabarse en algún punto, se volvía pesado el mover su agotado cuerpo contra aquel demonio.

4ta postura:
Ola de llamas ardientes

El habilidoso cuerpo manipulado por Muzan esquivaba con facilidad los ataques cargados por el molestoso cazador. Solamente sentir su aura luchadora lo hacía vomitar. La castaña giró ágilmente en el cielo y aprovechó utilizar sus cabellos para penetrar de una vez por todas el corazón de aquel pilar. Sin embargo, el ataque se detuvo cuando estaba a menos de dos metros del radiante sol, Ritsuko aún estaba consciente y daba una extenuante pelea mental para obtener la potestad del cuerpo.

"Maldita sea, vete a dormir" en su interior se desarrollaba una pelea similar con la que tenía Muzan con el pilar. Ritsuko había tomado su cuerpo humano se sostenía con el báculo que alguna vez uso cuando era la Diosa Miyuki. Su batalla interna no se basaba en fuerza física o habilidades sobre naturales, era el espíritu y el poder mental que cada uno chocaba para recuperar lo que era suyo.

-¡Muzan!- Ritsuko había ganado territorio cuando el pelinegro tuvo que esquivar 3 ataques seguidos con la pelea exterior con Rengoku. La castaña aprovechaba los puntos donde flaqueaba para recuperar paulatinamente el control de su cuerpo. Debía sentir su respiración, el latir de su corazón, las fibras de sus músculos, el roce de sus dedos y lo más importante, su autonomía de pensar libre como el humano que fue alguna vez.

El pelinegro maldecía por tener que enfrentarse en esa condición a dos poderosos poderes en su contra. Nada marchaba bien.

1ra postura:
Mar de fuego

-Rayos.-El pelinegro fue herido en su pierna y en el costado derecho de la costilla. El sabor metálico se acumulaba en el cuerpo más perfecto que había llegado a manipular, y claro, no iba a permitir perderlo en esta pelea.

-¡¿Para qué haces esto?!-Ritsuko habló con mucha voluntad mientras trataba de buscar lógica en la pelea del pelinegro. ¿Para qué la quería? ¿Por qué buscaba desesperadamente sus poderes? ¿Con qué objetivo quería su cuerpo y terminar rompiendo la promesa por la cual había entregado su humanidad junto a sus memorias? ¿Cuál era la razón?

Ritsuko cuando era humana tenía una ligera singularidad para "predecir" el futuro, pero no era muy conciso y requería de una ardua meditación para ser precisa. Para cuando cambió a demonio, aquellas habilidades se potenciaron para lograr ver con claridad el pasado y el futuro de cualquier ser, tenía limitado tiempo. Después, cuando su cuerpo pasó a ser Miyuki, el "reflejo" le permitía indagar más allá de lo que esconde el ser. No tenía nada que ver con ver el futuro, sin embargo la capacidad de ver los sentimientos y las debilidades de los seres, pero siempre funcionó por su forma de ser. La empatía era algo que Muzan no podía arrancarle y que ahora ella es capaz de ver con sus propios ojos.

La llameante batalla no tenía fin, ambos cuerpos agotados seguían luchando, Rengoku odiaba con toda claridad la usurpación del cuerpo de su amiga de la infancia y primer amor. Sus manos apretaron fuertemente el agarre de su katana y cortó con rapidez los puntos descuidados del demonio, pero aún parecía tener el control de la batalla.

"¡No me rendiré! ¡Venceré en esta pelea por ti, Ritsuko!"

El calcinador ardor en su garganta y pulmones eran insoportables, había usado por demasiado tiempo su respiración de llamas. El límite de un humano estaba llegando lentamente, en algún punto sabía que el agotamiento extremo lo detendría secamente hasta el momento que no sintiera sus músculos.

【𝘿𝙚𝙛𝙞𝙣𝙞𝙩𝙞𝙫𝙖𝙢𝙚𝙣𝙩𝙚 𝙩𝙚 𝙨𝙖𝙡𝙫𝙖𝙧é】[Rengoku  Kyojuro]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora