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Capítulo 13 - Celdas y Golpes Duros

Preso de mis decisiones..

 

Ese si era un buen juego de palabras.

Frankie por supuesto habia sido mas inteligente y se escapo, yo en cambio volvi por mis cosas y por Cara, preocupado por lo que los demás tipos pudieran hacerle, pero a tan solo unos minutos de largarme la policía me detuvo y no iba a escapar, no era un delincuente aunque la adrenalina no hubiese estado de mas esa noche, iba aceptar lo que vendría porque lo merecía.

- nunca crei que conocería alguno de los bastardos de esa familia-uno de los oficiales hablo al verme- denle una celda para que pase la noche y saldrá antes del almuerzo

- pero aun debe hacer su llamada-dijo la oficial que estaba a mi lado, sea quien sea todos tienes derecho a esa llamada.

- creeme que este no, ¿sabias acaso lo que su abuelo hacía? ¿o su padre? Caray, hasta su madre es una delincuente

La sangre hervía en mis venas, estaba furioso y no podía contenerme. Intente abalanzarme sobre el aun esposado pero los oficiales que me custodiaban me detuvieron mientras el bastardo frente a mi reia.

- ¿ves? Es de familia.

- tu no sabes nada acerca de mi familia-gruñi- asique cierra la maldita boca

- tu no puedes hacer nada, tengo tu trasero en mis manos y puedo joderte como una perra cuando quiera-sonrio

Estaba a punto de mandarlo al demonio cuando la oficial tiro de mi brazo señalándome que no hablara y tenia razón, si metía aun más la pata no seria tan solo una noche. Me trague las palabras y deje que me guiaran a mi celda, aunque antes de entrar la oficial me pregunto si podía llamar a alguien para hacerle saber que ocurria. En verdad eso no importaba, mi familia estaba lejos y estaría libre para cuando ellos aparecieran, era momento de valerme por mi mismo.

- se lo agradezco pero no-medio sonreí

- eres muy joven hijo.. ¿no tienes a nadie?

- mi familia esta lejos, estoy por mi cuenta por ahora.. no se preocupe.

No había pasado mas de una hora cuando la celda volvió abrirse y dos tipos que parecían matones fueron empujados dentro, podia reconocerlos puesto que casi me he criado con los de su tipo. Musculosos, amenazadores y mirada salvaje. Yo sabia el protocolo, tio Louis me lo habia dicho un millón de veces..

“chico, si algun dia te metes en problemas y terminas en la cárcel no olvides estas tres cosas que salvaran tu vida. No hables, no mires a nadie y no te duermas. Si puedes hacer eso estarás a salvo”

 

Pero al parecer estos tipos tenían otros planes.

- he chico ¿Cómo te llamas? Te he visto antes

No respondi

- vamos, no voy a morderte, solo quiero charlas. Todos estamos fastidiados aquí.

Sonaba como un tipo agradable asique decidi obviar la advertencia de Louis

- James..-respondi

- ¿a secas?-rio el otro- ¿Por qué estas aquí? ¿le robaste el coche a tus papis?