*Reto Omegacember con el universo mágico de Harry Potter.
31 días, 31 situaciones con los personajes del universo de Harry Potter.
La mayoría de Shipps son LGBTQ+
*Participo en el reto de la fanpage @Es de Fanfics.
*Los personajes no son míos, desca...
Esto era originalmente el día 13, pero lo cambie para que encajara en la historia sin necesidad de cambiar tiempos.
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Día 11 "Gargantilla"
—¿Harry que- — la pregunta de Seamus quedó a medias cuando pudo observar bien al azabache.
—Voy a matarlo— declaró Ron al instante—, no, mejor voy a decirle a Prongs y Padfoot y lo matamos juntos.
—¡Yo voy con ustedes!— gritó Ginny, con el ceño fruncido.
La forma tan seria en que Ron asintió hacia su hermana lo hicieron reconciderar su decisión.
Talvez debió prepararlos antes.
Su imprudencia de Gryffindor hace de las suyas de nuevo.
— ¿Sorpresa?
Toda la atención cayó en él apenas pisó el gran comedor, los observadores seguramente vieron la herida, y lo que solo ven cosas obvias, posiblemente vieron la gargantilla brillante que colgaba de su cuello.
— ¡Harry James Potter! ¡Explícate en este instante! — gritó en un susurro Hermione, quería explicaciones, pero ya estaban llamando demasiado la atención.
—¿Pueden esperar al terminar de desayunar?... Merlín, ni mi mamá hizo un escándalo
A regañadientes, todos asintieron, y le hicieron un lugar en la banca para sentarse.
—¿Te duele? ¿Quieres que vayamos a curarte?— preguntó Neville, con timidez.
—Draco fue por parches ayer Nev, pero gracias— le regaló una sonrisa a su amigo.
Los demás parecían bastante arrepentidos de no haber preguntado primero por el estado de su amigo.
—...Harry, ¿Seguro que estás bien? Algo leí por ahí de que los omegas se quedaban sin energía cuando son marcados.
—El profesor Regulus me dió una poción para eso, tranquila Herms.
Ella asintió, no muy convencida.
—Come Harry...— animó Ginny.
— ¡Pero no puros dulces! Sírvete verduras, caldo, o algo que si sea comida— chilló su mejor amiga, mientras le arrebataba el plato de galletas que llevaba y le pasaba un plato con avena.
—¿¡Y porqué a Ron sí lo dejas comer dulces!?— se quejó.
—Porque a Ron no lo marcaron, y por ende no está débil.
Con un bufido se comió la primera cucharada, Hermione sonrió satisfecha y le preguntó qué carne quería, y junto a los dos pelirrojos se dedicó a separarle solo las verduras que saben, se come de buena gana.
—Listo, después podrás comerte todos los dulces que quieras.
