13. Es todo culpa tuya

74 12 0
                                    

-¡No, joder! -Vi cómo mi única esperanza, la única manera de descubrir quién fui en realidad acababa de perderse. Cómo la línea que separaba este mundo del otro se ensanchaba sin yo poder hacer nada más que observarlo.
Fui enseguida a donde estaba su cuerpo y lo aparté a una zona más segura de las bombas rocosas que el Titán Bestia lanzaba a lo lejos.

-Oye... Ey... Necesito mi respuesta, oye... -Le di palmaditas flojas en la cara para tratar de despertarlo, pero ya era demasiado tarde. Una de esas piedras había atravesado su hígado, y su ya crítica situación había culminado. Mi puente entre mundos murió entre mis brazos. Acomodé su cuerpo y lo dejé en el suelo. Lloré a la vez que lo maldecía por no revelarme nada antes. ¿Cómo se suponía que me iba a conocer realmente ahora que la única vía que me conectaba al otro mundo se había cerrado?

"Está bien, no pasa nada, encontrarás la manera" me dije a mí misma, tratando de convencerme de que todo estaría bien. Aún sabiendo que no tenía razón...

Fuera de esa casa todo era un caos. Sabía que no era normal que no hubiese nadie... Quizás nosotros fuimos inteligentes elaborando un plan. Pero ellos se adelantaron.

Fue gracias a Armin que descubrimos más o menos lo que tramaban. Lo preocupante era que no sólo eran Reiner y Berthold, si no que se había sumado otra persona más.

A mí me mandaron con Armin y Erwin a la puerta interior. Hange, Levi, Eren y Mikasa estaban en la puerta exterior. No sé si fue suerte o coincidencia, pero Eren logró tapar sin problema el agujero exterior. Mientras, nosotros investigábamos sobre los pequeños descubrimientos de Armin.

-Pero, Armin... Esa tetera podría ser de cualquiera de los habitantes de Shiganshina. Podría ser de hace años. -Dije, perdiendo toda esperanza.

-No, T/N, una tetera no aguanta más de cinco años intacta. Además, encontré tres tazas y los restos eran bastante recientes. -Argumentó Armin.

-... ¿Tres? -La perplejidad se hacía notar en mi expresión.

-Así es... -Un silencio agrandó la tensión y los nervios de la misión.

Todos los miembros presentes en el interior de la muralla se acercaron y se amontonaron alrededor de Armin.
Entonces Erwin lo puso al mando de todos ellos. Y fue por eso por lo que descubrimos a Reiner y Berthold.
Al principio, buscamos en casas, alrededor de las murallas y en cualquier lugar posible. Hasta que Armin propuso mirar dentro de los muros. Y tenía razón. Toda la razón. Reiner y Berthold nos sorprendieron al salir de un hueco en la muralla perfectamente simulado.

No había pasado mucho tiempo desde que empezamos la lucha con Reiner hasta que Berthold entró en escena.

Y supongo que el destino decidió que era buena idea estar a pocos metros de Berthold cuando decidió convertirse en titán.

Una fuerte luz cegó mis ojos seguida de un estallido y una sucesión de explosiones. Claro, las casas y rocas de alrededor salieron volando, y con la buenísima suerte de que yo me interpuse en la trayectoria de una de esas rocas...

~~~~~~~~~~~~~~~~

-T/N... Ey, soldado prodigio... No podremos ganar esto sin ti, ¡oh! ¿Qué será de nosotros sin T/N?

Abrí los ojos... ¿Cuánto tiempo había pasado?

-Tan gracioso como siempre, Connie. -Traté de levantarme.

-¡No, no, no quieta T/N! -Gritó Jean.

-¿Qué, por qué no puedo...? -Decidí moverme un poco antes de levantarme y... Desearía no haberlo hecho. -¡Agh... Joder! ¡Vale, ya sé por qué no tenía que moverme!

Llévame contigo   ︴ hange zoëDonde viven las historias. Descúbrelo ahora