-𝔠𝔞𝔭𝔦𝔱𝔲𝔩𝔬 𝔰𝔢𝔰𝔢𝔫𝔱𝔞 𝔶 𝔡𝔬𝔰-

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Kim Seungmin.

Me desperté y lo primero que vi fue a Minho rodeando mi cintura con su brazo. No puedo estar más arrepentido de lo que hicimos anoche, ¿cómo fui a caer tan bajo y dormir con él? No merece estar conmigo de aquella manera tan intima, no puedo darle ese privilegio de tenerme de nuevo, realmente me siento tan patético de haberlo hecho.

Quité su brazo con cuidado para levantarme de la cama y vestirme, sin intenciones de despedirme, salí de la habitación sin hacer ningún ruido, pero me llevé una gran sorpresa.

Había una pequeña niña sentada en el sofá mirando la televisión mientras chupaba su dedito de una manera tan tierna.

Me quedé quieto y totalmente confundido, ¿qué hacía una niña en el departamento de Lee?

Cuando alzó su mirada y me vio, me sonrió enseñando sus lindos dientes de conejito— ¿Has venido corriendo hasta aquí?

Me dijo eso y entonces la reconocí, era la misma niña del parque, realmente me sorprendió que me haya reconocido.

Ella recogió un juguete y me lo llevó— ¿Quieres jugar conmigo?

Sentí un horrible nudo en la garganta al mirarla de cerca, era idéntica a Minho, tenían el mismo lunar bajo los labios, los mismos dientes de conejito y aquellos hermosos ojos cafés.

—¿Cómo te llamas?

—Lee Hye... ¿por qué has dormido con mi papi?— me preguntó con los brazos cruzados y los labios fruncidos— Solo yo puedo dormir a su lado.

—¿Tu papá es Minho?

—Si, él es mi papi— contestó con una sonrisa muy orgullosa.

—¿Y tú mamá?

—No sé— se encogió de hombros.

No pude contestar nada porque se apareció Lia tomando a la pequeña entre sus brazos— ¿Quién eres tú?

—¡Durmió con mi papi!

—No es cierto— contesté a la defensiva— Con permiso, me tengo que ir.

Apresuré mis pasos para salir de ahí, pero entonces Minho salió de la habitación y fue detrás de mi, ignorando por completo a su hija y a la niñera.

—¡Seungmin, espera!— me tomó del brazo para hacer que me detuviera.

—¿Tuviste una hija con esa zorra?— pregunté con enojo.

—S-si— sabía que me refería a Hyejin— Hye es nuestra hija.

—¿Y en dónde está ella?

—No lo sé, un día se marchó sin decir nada y no he vuelto a verla desde entonces.

Me pasé las manos por el cabello tratando de no insultarle o algo parecido. —¡Debiste decirme que tenías una hija antes de acceder a tener sexo en tu habitación!

Quería convencerme de que estaba enojado por eso, pero la verdad es que sentía muchos celos de saber que Hyejin llegó a ser tan importante para él, que llegó al extremo de embarazarla.

—Lo siento, ¿si? pero por favor no grites eso, ella puede escucharte— me pidió en voz baja.

—Ya me voy— me di la vuelta para irme, pero él me detuvo una vez más— ¿Qué quieres?

—¿Me das tú número?

—¿Para qué?— me solté de su agarre.

—Quiero ser tu amigo...

Estaba a punto de decirle que no, pero entonces lo pensé bien, necesitaba seguir comunicado con él si quería llegar a destruirlo—Está bien.

Le di mi número y después me fui para llegar lo más pronto posible a casa, necesitaba darme una ducha y arreglarme para llegar al consultorio. Estaba tan enojado, no podía negarlo, que Minho fuese papá era algo que no era fácil de asimilar, era demasiado para mi, ¿pero qué podía hacer?

Lee Minho.

Entré al departamento totalmente apenado con Hye y Lia, de verdad que no tenía previsto que ellas llegaran tan temprano. Ahora tenía que buscar la manera de explicarle a mi hija porque un chico durmió conmigo.

—¡Él chico vino corriendo hasta aquí, es un corredor!— exclamó mientras venía a abrazarme fuertemente.

¿Corredor? sinceramente no tenía idea de porque decía aquello pero no le dije nada, me senté en el sofá y solté un gran suspiro, estaba tan avergonzado.

Lia tenía las mejillas coloradas, sabía que ella no era una niña inocente, no era muy difícil imaginar lo que sucedió, si anoche le pedí que se llevase a Hye y que hoy saliera un hermoso chico de mi habitación.

—Lo siento Lia— tomé mi billetera y le pagué un poco más de la doble paga— Gracias por cuidar a Hye, puedes irte.

—De acuerdo, adiós pequeña— acarició su cabello, tomó sus cosas y se fue.

Le hice señas a mi pequeña para que se sentará en mis piernas y así lo hizo —Papá, ¿por qué ese chico durmió contigo?

—No lo hizo.

—Mentir es malo, yo lo vi salir de tu habitación— frunció el ceño— Creí que solo yo podía dormir a tu lado, no se vale.

—Lo siento, no volverá a suceder, ¿de acuerdo?— la abracé— Lo qué pasa es qué Seungmin necesitaba donde quedarse anoche y yo me ofrecí a ayudarle.

—¡Qué bueno eres, papá!— me dio un beso en la mejilla— Siempre debemos ayudar a los demás, lo vi en mi caricatura favorita.

—Claro que sí, amor.

Me sentía tan mal, yo ya no era un adolescente que podía hacer lo que quisiese, era un adulto y tenía una responsabilidad, debía comportarme maduramente. O sea, no es como si no pudiese tener sexo con alguien, pero debía ser cuidadoso y no hacerlo en mi casa, pues no estaba solo, Hye también estaba aquí.

No era tan fácil explicarle a una pequeña porque su papá dormía con alguien, afortunadamente Lia había recogido la botella y las copas que use con Seungmin anoche, pues aquello no era buen ejemplo para mi hija.

#♡

Espero que les guste:))

novio toxico ✧ knowminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora