La verdad sobre nuestro líder

Uniones y Conexiones

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Habían ido a la playa a caminar, pero ¿En qué momento habían terminado en una habitación de hotel?

Su mente divagaba mientras veía al alfa desnudarse para luego entrar a la ducha con él.

Dejó que el agua mojara su cabello mientras alcanzaba al chico más cerca de él .

Este cerró los ojos al entrar su rostro en contacto con el agua. Namjoon alzó las manos, con las que comenzó a recorrer el pecho caliente bajo el tacto de las yemas de sus dedos, subió hasta alcanzar el rostro, trazo el contorno de  cada uno de sus rasgos; le gustaban mucho sus cejas, su linda nariz que otorga carácter al rostro y por último sus labios, podría dedicarle cientos de canciones a sus labios.

Acercó sus labios sintiendo cosquillas en ellos.

Esto no es un sueño, esto era real.

Fue besado, al inicio se asustó pero cerrando los ojos dejándose llevar, hundió los dedos en la espesa cabellera, acarició el cuello. Esto era real, estaba aquí. Podría morir de la felicidad que sentía.

Contempló a su pareja .

Quería disculparse, no era su intención haberlo tratado de esa forma, cada vez que recordaba como lo había tratado se odiaba así mismo, sentía repugnancia de sus acciones, todas ellas resultado de sus temores

—Lo siento, no te quiero lejos, te quiero cerca. —susurro en el cuello de su alfa

—Está bien —El alfa lo besó hasta dejarlo sin aliento.

—Hyung. —Suplicó, desesperado por el calor en su vientre. Tomó la mano de largos dedos y la llevó hasta su entrada  húmeda.

Un gruñido de aprobación provino de sus labios cuando sintió como eran introducidos dos dedos al mismo tiempo. No había pasado mucho tiempo, pero el estímulo fue retirado. Abrió los ojos para encontrar a Seokjin posicionándose para entrar.

Entró completo en una sola embestida. Seokjin cerró los ojos, y abrió la boca aspirando aire. Cuando abrió los ojos sus miradas se conectaron.

—Si me ves me sentiré tímido —Embistió otra vez, haciendo que namjoon se mordiera los labios para reprimir un gemido de placer —¿Acaso desarrollaste un fetiche mientras no estaba? —Tomó sus caderas con ambas manos, y sosteniendo su trasero firmemente lo volvió a embestir.

—Hyung es muy sexy cuando hace ese gesto —Gimió ante la nueva embestida, sonidos húmedos que lo excitaban más se escuchaban en cada uno de los movimientos violentos del alfa —Me gusta mucho hyung. Me gusta como se siente dentro de mi

—Namjoon espera necesito ponerme un condón —Cruzó los pies a la espalda de Jin impidiendo que se apartara. Los ojos de este se agrandaron, y una dulce sonrisa apareció en sus labios —Deja de jugar.

—Pero quiero tener los bebés de Jin Hyung —Sus caderas se movieron estimulando el miembro del mayor.

Jin aspiró profundo, tratando de resistir la tentación, verlo suplicar y la sensación en su pene lo estaba volviendo loco —Aún es muy pronto para que venga nuestro bebé. —Dijo eso, pero su cadera no dejaba de moverse, contradiciendo sus palabras.

—Hyung no te detengas —Namjoon araño en busca de soporte, podía sentir como crecía la necesidad de liberarse, casi estaba ahí. Sintió su liberación llegar. Seokjin gruñó algo que sonaba a "responsabilidad".

Sintió como Jin se detenía por un momento que no duró mucho. Lo giro y colocándose sobre su espalda lo embistió con rapidez y fuerza.

Esta vez no pudo contener el gemido, mordió sus labios para calmarse. Sentía las caricias en sus costados, las manos de su alfa lo levantaron, el pene de Jin llegando más profundo en su interior, se mordió el labio de placer.

—Namjoon mírame. ¿A quién perteneces? —El mayor dejó una serie de besos en la base de su cuello.

Estaba confundido, pero le gustaba este Seokjin dominante, Gimió su nombre, fue recibido por un gruñido de aprobación y la base de su cuello fue mordida.

—Lindo, nunca más nos alejemos—Lo beso en los labios, mientras en sus entrañas sentía los espasmos de placer de su alfa. Tomó ambas muñecas entre sus manos y empujándolo contra la pared de la ducha, lo inmovilizó contra su pecho —Mío — Le mordió el lado contrario del cuello.

Sin soltarse se dirigieron hasta la cama para continuar.

El sonido de su móvil, lo despertó sacándolo de su sueño, removiendo el brazo de Jin se levantó de la cama y comenzó a buscar su ropa, hasta dar con sus pantalones y contestar a tiempo la llamada.

"¿Namjoon? —La voz al otro lado era de Yoongi poniéndolo en alerta.

—¿Sucedió algo hyung? —comenzó a ponerse el pantalón mientras sostenía el teléfono entre el hombro y la oreja.

"¿ sucedió algo? Tú dime, son pasadas las diez de la noche y tu jefe dijo que no te presentaste a trabajar...".

—Lo siento hyung, yo... lo lamento, perdí la noción del tiempo. Voy en camino —Terminó de vestirse.

"Entonces... ¿Estás bien? " —La voz tranquila de Yoongi fue casi imperceptible.

—Si, lamento haberte preocupado hyung.

"Solo no demores"

Namjoon sonrió al ver la pantalla en donde se indicaba el fin de la llamada.

Tendría mucho que responder, y no estaba seguro de cómo hacerlo.

Dio un último vistazo a Jin, que dormía pacíficamente, su rostro de bebé bueno engañaba a cualquiera, nadie podría sospechar del tipo de persona que se volvía cuando se relajaba.

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