PDV Beatrice
Cuando llegamos a Chicago, quedaban cuatro semanas antes de que empezaran las clases, y durante todo ese tiempo mi familia y yo estuvimos "explorando" nuestra nueva ciudad.
Hace unos días antes, llamaron de la escuela diciendo que ya estaban formados los grupos; al parecer la organización de este colegio es diferente: se acomodan, por así decirlo, a los alumnos en tres grupos por cada curso y los grupos los identifican con las letras "A", "B" y "C".
Les dijeron a mis padres que debían ir de nuevo a la escuela para ver en que grupo estábamos Caleb y yo. Al parecer yo estoy en el grupo de 1°A y mi hermano en el de 1°C. Curiosamente, los tres grupos tienen 16 integrantes cada uno.
Hoy es el primer día de clases y ya vamos de camino la escuela. Estoy nerviosa, aunque no debería.
Me vestí con una camisa de cuadros rojos y blancos con las mangas recogidas, un mallón negro que me llega a los talones y unos zapatos rojo brillante, voy peinada con una media cola. Mi hermano lleva una camisa verde de Aeropostale, un pantalón de mezclilla azul y zapatos negros.
Mi padre conduce rápido, al grado de hacerme querer devolver el desayuno. Cuando llegamos al colegio, me despido de mi padre y de mi hermano. Pregunto a una chica por mi salón y me pregunta si estoy en ese grupo.
-Sí -le contesto.
-Genial, yo también -dice emocionada- Vamos, te acompaño y entramos juntas.
Camino dudosa detrás de ella, al parecer se da cuenta y reacciona.
-Oh, lo siento. Soy Christina, pero si quieres dime Chris -dice sonriendo- ¿Y tú? ¿Cómo te llamas?
-Soy Be...- me lo pienso un momento y llego a una conclusión: si empiezo una nueva etapa, en un nuevo lugar ¿por qué no hacerlo con un nuevo nombre?- Soy Tris..., mi nombre es Tris.
Después de esa pequeña charla, subimos las escaleras que están un poco adelante y a la izquierda de la entrada principal. Pasamos el primer piso y llegamos al segundo; una vez en él, doblamos a la izquierda y entramos en la segunda puerta que encontramos, la que sigue es la última y el baño para chicos.
Entramos al salón y nos sentamos en la segunda y tercera filas, hasta adelante.
Echo un ojo al salón y hay tres grupitos, uno en cada esquina a excepción de la de la puerta. En cuanto me siento, Christina me agarra de la muñeca y me jala hacia el grupo más grande que está al frente del salón y me presenta con cada uno de los que están reunidos.
-Hola chicos, ella es Tris.
-Hola -dicen todos.
-Bueno Tris, ellos son Will, Al, Uriah, Lynn, Marlene, Zeke, Shauna y Tobias -comenta Chris.
Todos se ven buena onda y parecen buenos chicos, pero hay algo en ese tal Tobias que me llama la atención. No sé qué opinan las demás chicas, pero para mí él es el más guapo de todos.
¿Qué te pasa Beatrice? me digo a mí misma.
Nos pasamos como 10 minutos hablando de cosas no tan importantes como mi familia, de dónde vengo, cuándo cumplo años y cosas así; en esa plática me contaron que todos estudiaron juntos la primaria y casi se consideran una familia.
Las primeras tres clases se me hicieron eternas, ya que para mí son las más aburridas que puede haber: Historia, Geografía y Español.
Suena el timbre y salimos al receso.
-Así que... de Arizona, eh -dice Tobias poniéndose a mi altura y caminando a mi lado. Le sonrío- ¿Y qué tal allá?
-Pues, si te soy sincera, es más bonito Chicago.
-¿Te parece si comes con nosotros?
-Sí, no es mala idea.
-Bien, vamos.
No se si es mi imaginación o estoy loca pero me sentí nerviosa al hablar con Tobias.
Cuando voy por la comida está todo lleno, así que Tobias hace fila conmigo. Mientras esperamos hablamos de cómo vamos en la escuela, me dice que, de vez en cuando, lo llaman Cuatro.
-¿Por qué? -le pregunto.
-Porque esa ha sido mi calificación más baja en un examen.
-¿En serio? ¿Sólo por eso?
-Sí... Y tú ¿cuál ha sido tu nota más baja?
-Seis, en un examen diagnóstico.
-Entonces creo que te llamaré Seis
Me río ante su comentario y cuando me doy cuenta no hay nadie frente a mí en la fila. Pido de comer una ensalada de frutas y me dan un plato con trozos de manzanas, plátanos, melón, sandía y piña. Tobias pide lo mismo.
Vamos a donde están los demás, que es en la esquina de una cancha en el piso. Me siento entre Tobias y Christina. Platicamos de nuevo de tonterías y de repente me dan un balonazo en la cabeza.
Grito y me agarro la cabeza.
-Dios, Tris ¿estás bien? -dice Tobias, rozándome el brazo.
-Sí, estoy bien.
-¿Segura? ¿No quieres ir a la enfermería? -pregunta Christina.
-No, gracias chicos, estoy bien.
Bajo las manos de mi cabeza y sigo comiendo, y en seguida llega un chico que se pone detrás de mí, pero todos lo miran con... ¿odio?
-¿Qué haces aquí Peter? -dice uno de los chicos, creo que es Uriah.
-Vine a disculparme con esta hermosa chica por el golpe que recibió de mi parte -dice Peter.
-Oye ¿quisieras dejarnos en paz? -dice Tobias algo molesto.
-Uy, lo siento, pero creo que el problema no es contigo. Pero en vista de que no puedo ser amable con ustedes mejor me retiro -comenta Peter- Adiós, Tris -Eso lo dijo dirigiéndose a mí.
¿Cómo sabe mi nombre?
-No le hagas caso, Tris- dice Lynn- es un inútil, holgazán. No sabe hacer otra cosa que no sea molestar a la gente; igual su bolita.
-Son Peter, Molly, Drew y Eric- dice Zeke, señalando a cada uno.
Tocan el timbre y volvemos al salón. Las últimas clases son más entretenidas, excepto Matemáticas; después de esta tengo Educación Física y Biología.
Dan el último toque y todos salen del salón.
Llamo a mi padre para avisar que ya salí y me dice que llega en 20 minutos. En ese tiempo todos se fueron, dejándome sola con Tobias en la entrada esperando a mi padre. Nos quedamos hablando sobre como estuvo el primer día y ambos concluimos en que fue algo aburrido.
Cuando llega mi padre, veo salir a Caleb por la puerta, y cuando estoy a punto de irme, Tobias me agarra por el codo y me detiene.
-Oye ¿me das tu número?
-Sí, claro.
Se lo doy y luego subo al auto.
-¿Cómo te fue, cielo?- saluda mi padre.
-Bien, gracias por preguntar.
-¿Hiciste amigos?
-Sí
Mi padre sonríe
-Que bueno Beatrice.
Nos vamos a casa y yo no dejo de pensar en Tobias. Cuando llegamos comemos unas deliciosas albóndigas que mi madre preparó. Luego vamos todos a la sala y vemos una película basada en la vida real. Una vez que termina preparo lo que usaré mañana para el colegio.
De repente recuerdo a Tobias. Se me va la tarde pensando en él, en sus hipnóticos ojos color azul oscuro. Y cuando me doy cuenta de algo, se me forma un nudo en el estómago, ya que es algo que nunca había sentido por otro chico en Arizona.
Creo que me gusta Tobias.
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Mi Nueva Vida (En edición)
FanfictionTras haber terminado la primaria, la familia de Beatrice Prior decide mudarse a Chicago para que sus hijos, Beatrice y Caleb, comiencen sus estudios de secundaria allí. Beatrice, al ser una estudiante de promedio alto, no es muy buena en lo que se d...