♧Destiny♧

Ganaremos

Pov:Karla

Siento el agua caer por mi cuerpo, desde que me había levantado no he dejado de pensar en Cidius, mis ganas de apoderarme de aquel lugar eran enormes tendría el control de absolutamente todo pero niego, Enzo quería destruir lo que tanto daño nos han hecho y yo debía pensar igual pero mi lado controlador quiere salir y yo lo he estado reprimiendo desde la llegada de Enzo y Lexi.

Suelto un suspiro saliendo de la ducha, me tomo un momento para apreciar mi cuerpo desnudo, cicatrices que antes las veía y pensaba que eran por la explosión, ahora que recuerdo mi niñez, recuerdo el porqué de cada una de ellas, paso mis dedos por uno que está en mi abdomen, uno pequeño pero notable, la muerte para Cidius eran más bien un favor, quería hacerlos sufrir por cada uno de los niños que torturaron a su antojo, pero aún así sentiría que es poco, salgo del baño envuelta en una toalla cuando las puertas de mi habitación se abren.

-¡Buenos días chica ardiente!-Escucho a Enzo mientras entraba con una sonrisa de oreja a oreja.

-¡Enzo! ¡Toalla!-Apunto mi toalla y el parece captar mi indirecta y luego ríe.

-Lo siento, sólo pasaba a avisarte que es día de entrenamiento te espero en el comedor debemos desayunar para tener músculos fuertes.-Dice él mostrándome los suyos y yo sólo suelto una risita.-Vistete rápido.-Dice por último para luego retirarse.

Niego riendo, antes lo hubiera matado al instante pero ahora que sé quien es ya no me imagino un día sin él, es él único que parece entenderme y me ha apoyado en cada cosa estos días, incluso en nuestra infancia él siempre estuvo para mi.

Hoy sólo me vestire simple no había nada especial más que sólo entrenamiento y no quería quemar más de mis ropas elegantes, tan sólo un pantalón Jogging color gris y una remera suelta de color blanco ya bastaba para mí, tomo mi teléfono y mis audífonos se suponía que hoy también Enzo tenía un nuevo entrenamiento que no incluía los poderes me dijo que mis brazos estaban algo flacuchentos lo cual me ofendio muchísimo pero termine dándole la razón.

-Espero que hoy al menos el desayuno sea bueno.-Digo entrando al comedor.

Lo primero que veo al entrar es a la chica nueva, se veía mejor un poco más feliz hoy.

-Primero que nada buenos días y segundo esto esta delicioso.-Dice ella devorando los panqueques que tenían arriba una especie de carita feliz.

-Es un panqueque genia.-Dijimos Enzo y yo al mismo tiempo.

Ambos nos miramos y comenzamos a reir, era lo que le había dicho de pequeña cuando él no sabía que era un panqueque sentí un poco de nostalgia, me hubiese gustado darle un buen picnic entonces tuve una idea, al terminar el entrenamiento lo invitaría a uno.

-¿Quieres café?-Me pregunta Enzo mientras se servia él.

-Si, por favor.-Digo pasándole una taza.-¿Ya te sientes bien?-Pregunto mirándo a Brat y ella asiente con la boca llena.

Enserio se veía muy tierna y yo solo sonreí pero enseguida lo borro al darme cuenta, vuelvo mi mirada a la taza que le había pasado a Enzo, ya estaba llena se veía bastante delicioso, le di un sorbo y suelto un suspiro al sentir el sabor placentero del café.

-¿Que tienes planeado hoy?-Pregunto mirando a Enzo.

-Para tus brazos de fideos, le tengo preparado una bolsa de boxeo.-Dice mientras terminaba su café.

Brat al escuchar lo que dijo Enzo comenzo a reir tomando toda mi atención.

-Pues yo no la veo tan mal.-Dice ella sonriendo.