Segundas opiniones

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Después de que sus amigos y novio lo convencieran, el vampiro no tuvo más remedio que hablarle sobre su problema a Zeppeli. Y aquí se encontraban, Dio explicándole la situación mientras en el fondo los otros tres lo apoyaban en silencio. El barón se mantuvo en silenció por unos segundos, sentado en una silla en el salón, mientras comía un sándwich, y consiguiendo que los jóvenes se pusieran cada vez nerviosos.

-Tenia previsto que esto pasara, y me alegro que me avisaras antes de que la situación se saliera de control.

-Si sabias que podía pasar ¿porque no hiciste nada al respecto desde el principio?-La voz del chico sonaba muy irritada al saber que esto se había podido evitar desde un principio y debido al silencio incomodo en que les había mantenido estaba un poco enfadado.

-Disculpe Señor, pero ¿Que hubiera pasado si la situación se hubiera salido de control?

-Por desgracia lo habría tenido que eliminar pero desde un principio supe que eso no hubiera pasado. Y ahora concentrémonos en lo importante, nunca me he visto en esta situación pero tendremos que entrenarte y quizás encontrar alguna manera de saciar tu hambre vampirica por llamarlo de alguna manera cuando las cosas se descontrolen.

-Hay algo que desde el principio me ha inquietado y es que si Dio es un vampiro... ¿no necesita sangre para sobrevivir?

-Bueno, por lo que se puede sobrevivir sin sangre y comer comida normal sin ningún problema, pero beber sangre con regularidad le da inmortalidad y curaría sus heridas casi de inmediato.

-¿Podemos concentrarnos en lo importante por favor?

-Callate Dio, no pienses que te has librado tan fácilmente, sigo enfadada contigo.

-Como si me importará, además ¿¡que tiene que ver eso ahora?!

Los dos se miraban enfadados apunto de enfrentarse hasta que por suerte el peliazul se interpuso entre los dos.

-Tranquilicense los dos, no es momento para discutir y ya te he dicho Erina que no te enfades con el, no es su culpa, el no sabía lo que hacía.

Los dos se separaron a regañadientes, pero la chica olvidó rápidamente ese enfrentamiento al mirar la herida de su amigo. Es verdad que los dos chicos no tenían la mejor relación, el rubio muchas veces se enfadaba y se ponía celoso por cualquier idiotez, y bueno, el peliazul era el que le pedía perdón a pesar de que nunca tenía la culpa el 99% de veces. Cuando se comportaba así le solía parecer adorable, pero ahora se había dado cuenta de que podía ser peligroso y aquella relación si no se manejaba bien podría convertirse en una bastante tóxica. No estaba diciendo que Dio no quisiese a Jonathan, era solo que como ella sabía, pues el mismo le contó (no con muchos detalles) su infancia no había sido la más amorosa y eso podía hacer que el chico no supiera como comportarse a veces, a pesar de que incluso cuando aún no eran novios, el joven Brando había cambiado mucho gracias al joven Joestar. Después de esto hablaría con Jonathan para decirle lo que pensaba. Su noviazgo le parecía una de las cosas más adorables y no quería que acabará por algo como eso.

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enamorando a un Joestar (JonaDio)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora