La mascota del rey /君宠难为 [novela china]

109. ¡Si el ministro supiera que es la vergüenza, no amaría a su majestad!

Li Guangning levantó sus manos y miró detenidamente frente a él.

Las muñecas de Du Yuzhang habían estado hinchadas, tienen profundas cicatrices, azules y moradas.

Durante tanto tiempo encerrado, Du Yuzhang ha tenido sed y se le han roto los labios.

Al ver esto, Li Guangning tomó la palangana de té y la acercó a Du Yuzhang.

Du Yuzhang abrió la boca para beber agua. Inesperadamente, la lámpara de té fue alejada repentinamente.

Li Guangning le sonrió y bebió el agua limpia con la cabeza en alto!

-"¡Su Majestad!"

Du Yuzhang se mordió el labio y bajó la cabeza.

Li Guangning de repente señaló su barbilla, abrió sus labios y una gran cantidad de agua entró en su boca.

Du Yuzhang no pudo evitarlo. La mitad del agua cayó de las esquinas de sus labios y fue limpiado por el pulgar de Li Guangning.

-"Parece que Yuzhang todavía tiene que estar atado para ser obediente".

Li Guangning besó a Du Yuzhang como dijo, pero la muñeca de Du Yuzhang estaba desgastada y sus labios se retrasaron, lo que lo hizo encogerse de dolor.

-"Su Majestad"

-"¿No, no te gusta de esta manera?"

Li Guangning resopló con frialdad,

-"¿Así está mejor?"

Cuando terminó el primer "de esta manera", Li Guangning todavía besaba a Du Yuzhang en la muñeca.

En el segundo "de esta manera" ¡Se inclinó y aplastó directamente a Du Yuzhang en la cama! Las piernas todavía estaban atadas a la cadena. Bajo tal presión, su espalda estaba contra la cama, pero sus piernas y caderas estaban colgando en el aire.

Sus piernas estaban protegidas por la cadena y no podían cerrarse en absoluto. Su ropa de cama estaba muy abierta, y toda la luz primaveral se filtró a los ojos de Li Guangning.

Amasó el cuerpo de Du Yuzhang con ambas manos. Desde su cuello lleno de marcas , bajó hasta la clavícula, el pecho y los pequeños pezones... Sus manos hicieron viento y fuego por todas partes, lo que hizo que los muslos de Du Yuzhang se tensaran y le temblaran. .

Con solo una mano, Li Guangning intimidó a Du Yuzhang hasta las lágrimas y siguió jadeando.

Los muslos de Du Yuzhang estaban tan apretados que sus piernas no podían dejar de temblar.

Li Guangning lo vio en sus ojos, pero no lo hizo, no le dio la oportunidad de descansar en absoluto. En cambio, se volvió más y más salvaje.

Du Yuzhang no podía detenerse. Sus mejillas estaban enrojecidas y seguía mordiéndose los labios. Pateaba y encogía las piernas, no podía seguir

En cambio, sus manos tiraron de la cadena haciendo que las campanas sonarán juntas y el tintineo continuó.

No fue hasta que Du Yuzhang dejó escapar un gemido, que su cuerpo fue dejado y sus pies sangraban.

Li Guangning finalmente se detuvo.

Du Yuzhang decayó por un momento y su cuerpo de repente se paralizó.

Jadeó, pero fue sostenido por un par de manos grandes, dejando dos huellas dactilares de un rojo intenso en su rostro y cintura que aún brillaba por el sudor.

-"He hablado con los médicos imperiales. Dijeron que no estabas enfermo en absoluto.

Pero recuerdo claramente que escuché que me dijistes que estabas gravemente enfermo antes, he incluso fuiste al callejón Xuanhu para conseguir medicina.