Cuatro-I

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Harry acomodaba por en orden sus cuadernos para las clases de hoy en su casillero, para así poder encontrar sus materias correspondientes sin estresarse.

Era martes, el día menos favorito del rizado para tomar clases, ya que ninguno de sus amigos tenia calculo integral avanzado con él, lo cual lo hacía molestar un poco.

Habían pasado diez años desde el diagnóstico de asperger y Harry había logrado, aun siendo mínimo, un cambio en él y sus actitudes.

Había logrado hablar y confiar en el resto de sus amigos.

Con Zayn tardó un par de meses, ya que era muy paciente y trataba de llevarse bien con él sin tener que hablar, dándole la confianza suficiente para saludarlo y así volverse cercanos.

Con Niall, Stan y Liam fue un poco más complicado, ya que no eran muy pacientes, así que le tomó casi un año en poder convivir amenamente.

En cuanto a Fizzy, a Harry realmente le hizo bien conocerla, ya que ayudó a que se sintiera más normal de lo que todo el mundo le decía que era, porque podían compartir sentimientos y experiencias que nadie más lograba comprender entre ellos.

No tenía tanta confianza aún para hablar con muchas personas, sobre todo sí eran nuevas personas por conocer, pero Harry podía ahora pasar como si fuera solo tímido.

—Hola Hazz— escuchó una voz a sus espaldas y dibujó una media sonrisa en su rostro al saber de quien se trataba.

Harry jamás había hablado de esto con nadie más que con Zayn, pero su hipotálamo producía más oxitócica de la normal cuando Louis estaba alrededor de él y, especialmente cuando le decía 'Hazz' justo como ahora.

La oxitócica es la hormona que te hace sentir emoción o admiración por algo o alguien. O incluso, muchas veces, amor.

Las personas poco intelectuales podían decir que Harry sentía un pequeño enamoramiento por Louis.

—Buenos días, Lou— murmuró tomando su cuaderno de ciencias y cerrando su casillero para girar y ver a Louis.

—¿Estás listo para la clase de hoy? — dijo animado —Yo estoy muy emocionado sí te soy sincero, toda pinta a que será genial.

—No estoy muy seguro de poder presentar solo al equipo y el tema del que vamos a hablar— hizo una mueca —no quiero involucrar su calificación.

—Ya lo hemos hablado, Harry— comenzó a caminar junto con él —yo podría ponerte el mismo porcentaje de participación porque, literalmente, haces casi todo el trabajo, pero el profesor Cowell no toma en cuenta eso, y no le importa tampoco que tengas Asperger y te cueste hablar frente a adolescentes que pueden ser bastante crueles algunas veces.

—Tengo miedo de sufrir un ataque de pánico a media clase— mordió su labio inferior con nerviosismo —se supone que hay un documento médico en donde acreditan que me es imposible exponer frente a la gente, está firmada por el neurólogo y el psicólogo.

—Así es, pero tu dijiste que querías ser normal, así que eso es lo que tratamos de hacer. No estás obligado a nada, es tu decisión como siempre y la voy a respetar sea cual sea esa decisión, pero, solo hoy, por lo menos intentemos esto, ¿de acuerdo? — dijo con suavidad sonriendo—voy a estar ahí, al igual que Zayn, Niall y Liam. ¿Qué te dijimos cuando hablaste con los cuatro por primera vez?

—Que no iban a permitir que nada malo me pase y que nada me haría sentir mal conmigo mismo— murmuró.

—¿Y alguna vez hemos roto esa promesa?

—No— dijo jugando con sus manos —siempre la cumplen.

—Y esta vez será así, ya lo verás, yo creo en ti y creo en tu capacidad— sonrió cariñosamente y apretó el hombro de Harry para demostrar su apoyo —andando, Hazz, hora de superar ese obstáculo.

Beautiful Shade (l.s.)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora