One Shots IronWidow.

Profesor Stark

El profesor Stark era un hombre maduro, inteligente, atractivo, con porte y poder, mucho poder.

Por eso y más razones la pequeña pelirroja de apenas 18 años estaba muerta por él, no había nada de ese hombre que no le fascinara o excitara.

─ Quita esa cara de boba, te verá.─ Susurró Maximoff.

El día de hoy se encontraban en el salón de tecnología, esa clase manejaba Stark, y las miradas enamoradas y coquetas de Natasha eran muy obvias para todos, pero no le prestaban atención al ser símplemente una "niña hormonal".

─ Es lo que quiero. ─ Mencionó mientras mordia su labio inferior.

Las piernas de la pelirroja temblaron cuando su mirada y la de Stark se cruzaron, armandose de valor; la pelirroja le guiñó, el profesor sonrió mientras negaba y desviaba su mirada a unos papeles.

La clase llegó a su fin, la clase de Stark era la última, y siempre se quedaba cuando todos abandonaban la escuela para seguir trabajando solo.

Cuando todos abandonaban el salón sólo quedaron Wanda y Natasha guardando sus cosas.

─ Natasha, necesito que te quedes unos minutos. ─ Mencionó el profesor.

Wanda miró con miedo a Natasha y abandonó el aula cerrando la puerta tras ella.

Nerviosa, la pelirroja avanzó hasta el escritorio para luego sentarse.

─ ¿Que sucede? ─ Preguntó la pelirroja mientras sacaba una paleta de su bolso para luego abrirla y meterla en su boca.

─ Sabes perfectamente que pasa, tus calificaciones están bajando; y necesito que dejes de mirarme como si hubiese algo entre nosotros, empiezan a creer que es así. ─ Mencionó antes de tragar saliva al ver a la pelirroja jugar de manera sugerente con la peleta y su curiosa lengua.

Stark aclaró su garganta mientras acomodaba su corbata; Natasha sonrió satisfecha, se puso de pie y rodeó el escritorio para luego quedar frente a el castaño y sentarse sobre sus piernan.

─ Ambas cosas se pueden resolver. ─ Soltó mientras sacaba la paleta de su boca y la dejaba sobre el escritorio.

Stark fruncio el ceño y negó.

─ ¿De que carajos hablas, Natasha? ─ Preguntó mientras sentía como la pelirroja se movía sobre su miembro semi erecto.

Natasha jamás admitiría que había bajado sus calificaciones a propósito para llegar a esto.

─ Se ve muy sexy hablando así, profe; pero en fin, he visto como me ve, y se que me desea igual o hasta más que yo a usted. ─ Sonrió mientras deshabrochaba los botones de su blusa, dejando ver su sostén de color blanco.

─ No sé de que hablas. ─ Stark desvió su curiosa mirada del rostro hasta los senos bien proporcionados.

Y ahí todo se fue al carajo, ninguno supo cómo fueron las cosas, ¿cómo fue que el cuerpo de Natasha estaba desnudo de la cintura para arriba? ¿cómo fue que la ropa interior de Natasha fue removida? ¿cómo fue que el miembro hinchado de Stark entraba una y otra vez en el trasero de su alumna?

No lo sabían, no sabían como es que Natasha había terminado con el pecho pegado al escritorio mientras era embestida por su profesor de tecnología.

No sabían como de esa primera vez, llegaron más, muchas más, al punto de que ya no disimulaban, en cualquier lugar y a cualquier hora, Natasha se había convertido en la obsesión de el profesor Stark.

Y por eso decidieron irse, Natasha obtuvo el apoyo de sus padres al decirles que estaba enamorada, y a Stark no le importó dejarlo todo, tenía sus empresas y una enorme fortuna, sólo querían vivir solos su amor, su pasión.