EXPLOSIÓN

Capitulo 19

—¡No!— contestó Quinn— ¿Dijo eso?

—Si— respondió dando un sorbo a su cerveza.

Santana se juntó en un bar con sus dos mejores amigos a hablar, ya que hace mucho no lo hacían, y aprovechó para contarles todas las novedades de su relación con ella.

Si bien siempre salían en equipo, esta vez no pudo ser posible, ya que Kurt y Artie estaban en Chicago tratando de encontrar a Hanna Evans.

Por el lado de Britt y Rachel, estaban en el departamento de la castaña, también hablando.

—¿Y qué dijiste vos?— preguntó Blaine sonriendo.

—Nada. Me quedé totalmente en shock— rió, dándole otro sorbo a su cerveza— Quiero decir... en shock.

—¿Te acostaste con tu ex, días después se le escapa estar enamorada de vos, y te quedaste en shock?— preguntó alzando las cejas— Increíble.

—Está casada.

—¡Y enamorada de vos!— contestó Quinn.

—Me rechazó la propuesta de matrimonio dos veces. Dos.

—Eran chicas, y existe el miedo al compromiso.

—Está casada— repitió.

—Si, amiga. Pero vos le propusiste matrimonio a los veinte años, y después a los ¿veinticinco?— Santana asintió— Eran chicas. Brittany conoce a este idiota hace tres años, así que probablemente se casó a los... ¿treinta?

—Sigue siendo joven, pero esa edad no es la misma que cuando salía con vos— completó Blaine.

—¿Podemos no hablar de mi relación con mi ex? por favor.

—Está bien— sus amigos rieron— ¿Blaine, vos y Kurt están bien?— agregó Quinn.

—¿Por?

—Porque desde que está en Chicago no hablan...

—Estamos... no se cómo estamos— suspiró triste.

—¿Que pasó?— preguntó Santana.

—Sebastián.

—¿Que tiene que ver tu ex?

—Volvió— suspiró, y ante la cara de sus amigas agregó— No pasó nada con él, pero Kurt piensa que sigo sintiendo cosas por el.

—¿Y no es así?— preguntó Quinn.

—Lo quiero, pero no lo amo, Quinn. Amo a Kurt.

—Y decile a Kurt eso— Santana se encogió de hombros.

—Se lo dije, pero no me escucha, y ahora está en Chicago, quien sabe hasta cuando— suspiró.

—Lo siento por mandarlo a él— respondió la latina.

—Trabajo es trabajo, Tana— sonrió triste.

—¿Y... cómo está tu hermano?— preguntó Quinn— hace mucho no lo veo, y... y nada, quiero saber cómo está.

—Noah está bien— respondió Santana.

Quinn y Noah salieron un tiempo hace muchos años, y luego por el trabajo de el tuvieron que separarse.

La separación había sido muy dura para Quinn, ya que ella estaba muy enamorada en ese entonces. Aunque para el también había sido difícil.

—Bueno, todo lo bien que se puede estar después de que maten a tu padre y a tu hermano— agregó en voz baja— ¿Por qué no le hablas? quizás les vendría bien ponerse al día.