Capítulo VI

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Durante el camino Kara se comunicó con Alex para hacerle saber que querían reunirse con ella y con la agente Lane, habían quedado verse en la morgue del pueblo. Iban a contarles lo descubierto en el pequeño pueblo. Y, muy importante, querían confirmar la identidad de aquella persona que sufrió aquella fatídica muerte. 

Terminaba la llamada con su hermana mayor, aprovechó para informarles a sus padres que no sabía a qué hora pasaría por el pequeño Tyler. Le generaba cierta ansiedad estar perdiéndose los momentos más importantes con su hijo, quería estar para él, quizá llegaba el momento en que debía elegir un único trabajo. Estaba perdida en sus pensamientos mirando a través de la ventana, se giró un momento para observar a Lena, estaba muy callada y concentrada manejando, pensó que no debía ser fácil perder a un mejor amigo, ella no podría imaginar su vida sin Samantha.

Lena, estaba sin poder creerlo, de los trescientos millones de habitantes, jamás hubiera pensado que Jack Spheer, quién fue su mejor amigo, podría ser el desdichado. No había sabido de él desde hacía muchísimo tiempo. Su amistad se vio dañada en el momento que los Luthor y Spheer rompieron sus acuerdos por las diferencias que comenzaron a surgir entre ellos.

Aquellas palabras, las últimas que tuvo Jack es vez comenzaron a resonar en su cabeza con fuerza.

Recuerdo

Lena estaba sentada en la sala de espera terminando su tarea de Álgebra, aprovechaba siempre podía visitar Luthor Corp, para eso, o para reunirse con su mejor amigo, Jack Spheer. Les gustaba de lo que fuera, más que todo de chicas, cruzaban la etapa hormonal, una muy dolorosa para él, estaba enamorado en secreto de Lena, sin embargo, prefiero guárselo para sí mismo antes que romper su amistad.

Tanto como Jack, todos los demás sabían que Lena era gay. Los Luthor la aceptaban sin problemas, claro con ciertos puntos que ellos le recalcaron a su hija, para que tomara en cuenta. Y, ni que decir de su hermano, Lex, siempre se ofrecía a llevarla a sitios nocturnos (strippers), quería que ella tuviera momentos de libertinaje, unos que él no tuvo en su dura infancia. Algo que, por supuesto, sus padres se rehusaron por completo, el apellido Luthor jamás podía ser manchado por descuidos como ese.

— ¡Mi hija no se casará con Jack, Emerson! — los gritos del señor Luthor hacían eco por los pasillos y llegó hasta los oídos de Lena quién estaba confundida.

— ¡Si no se casan no habrá más tratos con ustedes! — los hombres se escuchaban furiosos.

Jack entró avergonzado a la sala con su mirada baja. Lena apenas lo escuchó entrar se levantó para encararlo, puesto que estaba preocupada por los gritos que se seguían escuchando.

— Jack, ¿qué es lo que sucede? — le preguntó con los brazos cruzados. Jack solo suspiró levantando al fin su mirada.

— Mi padre — comenzó a decir con cierta sequedad en su garganta — Mi padre quiere que nos casemos, Lena.

— ¿Qué? — preguntó aturdida — Eso es algo imposible, Jack. Me gustan las mujeres como a ti.

— Lo sé, lo sé — suspiró con cierta tristeza. Lena lo miraba fijamente sin perder detalle de sus gestos — Pero, hay algo que debes saber.

— ¿Ah, sí? — él asintió metiendo sus manos en los bolsillos — ¿Qué sucede? Eres mi mejor amigo, puedes decirme lo que quieras.

— Lena, yo, yo no quería que pasara esto — su voz comenzó a tornarse temblorosa — Yo me enamoré de ti, lo siento mucho — él derramó unas cuántas lágrimas. El corazón de Lena se estrujó por lo mal que debía estar pasándolo.

— Jack — su mejor amigo negó varias veces con la cabeza.

— Lena, no digas nada más — le sonrió de medio lado limpiándose las mejillas — C-creo que lo mejor es dejarnos de hablar, yo no puedo mirarte solo como una amiga — a la ojiverde se le rompió el corazón.

Riesgo De AmorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora