tobacco─flavored kisses

𝟬𝟴¡ tú, yo y los jotos de tus amigos

❛ ¿𝖸 𝗁𝗈𝗒 𝖼𝗈́𝗆𝗈 𝗍𝖾 𝗌𝗂𝖾𝗇𝗍𝖾𝗌?

𝖳𝖺𝗅 𝗏𝖾𝗓 𝗉𝗈𝖽𝗋í𝖺𝗌 𝖼𝗈𝗆𝖾𝗇𝗓𝖺𝗋 𝖼𝗈𝗇 𝗎𝗇 𝗆𝖺𝗇𝗍𝗋𝖺 𝗌𝗂 𝗌𝗂𝖾𝗇𝗍𝖾𝗌 𝗊𝗎𝖾 𝖺𝗅𝗀𝗈 𝗁𝖺𝖼𝖾 𝖿𝖺𝗅𝗍𝖺❜

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— ¿Qué haces? — Kai ni siquiera le estaba prestando atención por estar metido en su celular por un tonto juego que trataba sobre alimentar vacas y cochis, pero aún así hacía preguntas sólo para confirmar que no estaba solo en la mesa de la cafetería.

— Pienso. —Respondió sin más, al igual que sin quitar su vista de los pies de los que estaban sentados en la mesa de al lado. Parecía estar perdido en su cabeza, antes que ver como Kai le mostraba su lengua.

— ¿Y qué piensas?

— En lo poco que sé de Beomgyu. — Llevó su vista a la mesa con ese malestar en la panza. — Digo, lo conozco desde hace meses y nos hacemos llamar mejores amigos, pero te juro que ni su color favorito me sé.

— ¿Información innecesaria?

— No creo que sea innecesaria, sino más bien un dato no tan importante pero que sirve para el futuro. —Hizo un puchero mientras dejaba caer su cabeza en su mano. — Me siento mal porque hablamos como si nada y no sé nada sobre su familia, o sea, sé que su abuela vive en un pueblo de aquí que está a dos horas en coche y que su padre murió cerca de las fechas navideñas, pero fuera de eso no sé nada.

Kai parecía querer reírse de él en su cara, pero la cosa era que Huening no veía lo mismo que él, pues no le daba la misma importancia a esos datos pequeños pero lindos. Y que, si tenían más función de la que parecía.

Eso no cambiaba la cara de molestia en Taehyun.

— Deja de matarte la cabeza y sólo dile que quieres saber más sobre su vida.

— Es que va sonar tan feo que llegue y le diga: "Beomgyu, ¿Cuál es tu color favorito y por qué somos amigos?" ¡Ni siquiera recuerdo cuando lo conocí! — Dejó caer su cabeza en la mesa fingiendo sollozar, aunque si se sentía mal por no recordar demasiado, al menos no con lo que tenía que ver con Beomgyu.

Una risa grave se dejó escuchar mientras era levantado de la banca, para después se acomodado en los muslos del pelinegro. — Primero; no tengo color favorito, todos son iguales de feos y con mucha vida. Segundo; nos conocimos en casa de Soobin porque tenías un proyecto con él y yo estaba husmeando sus cosas. Recuerdo que te estabas quejando de que Chrisnosequé te había puesto el cuerno y que estabas harto de gente como él. Después de eso te invite de mi comida y nos quedamos charlando hasta que Soobin llegó del trabajo.

Taehyun se removió en su regazo sin quitar el puchero de sus labios. — Me acabas de decir mal amigo sin esfuerzo.

—No necesitas recordar ese tipo de cosas, de ser necesario te habría hecho un listado de cada momento importante de nuestra amistad para ponerte un examen, lo cual suena ridículo. Y es que esto no se basa en sólo recordar, a veces tenemos que crear nuevos y ya.— Sonrió en grande sabiendo que el menor no lo veía, aún así las manos tímidas de Taehyun le hicieron saber que lo estaba escuchando atentamente. —Y a mí me gustaría recrear demasiados contigo.

Taehyun se dio media vuelta sin saber cómo decir lo que sentía en ese momento. Porque aunque no quisiera, creía estar gustando de Beomgyu, del mismo chico que lo besó con ese olor tan sucio como delicioso.

Del mismo chico que a veces hacía mención de lo suyo como si fuese algo hermoso.

Tenía miedo de estarse enamorando, de que no supiera jugar las cartas de Beomgyu y terminar lastimado, pero el otro lado quería arriesgarse y besarlo tan rápido como lento, de sentir las manos del mayor bajar por su cuerpo.

Y eso seguía siendo un sueño.

— Eres tan lindo. — Dijo golpeando su cabeza com el pecho del contrario. Beomgyu rió y besó sus cabellos.

Kai los miró con asco e hizo una mueca con sus labios. — Sí se besan juro que les parto el hocico, babosos.