Shades Of Collapse {2}

Capitulo veintiséis.

Estoy acostada sobre la cama viendo una película, la chimenea de la habitación está encendida ya que hace frío.

Grant debe estar afuera en algún lugar con los chicos fumándose un cigarrillo pero se que llegará en algún momento.

Suspiro, todo esto es tan extraño, fue un mundo que mi padre trato de mantenerme alejada, y ahora lo entiendo, el trataba de protegerme.

Pero, ¿como lograba sacar a Amellie del mundo de un asesino el cual es su padre?

La puerta se abre mostrando a Grant, de nuevo el olor a cigarrillo invade la habitación, lo detallo, su cuerpo y su rostro se están recuperando.

—¿Por qué no duermes aún?—pregunta y me encojo de hombros

—Quería esperarte.—respondo y el esboza una leve sonrisa 

Se acerca a su maleta y saca un pantalón de pijama color gris, se quita la franela y yo sólo observo sus movimientos.

En realidad lo estaba intentando, y tal vez tenía razón, no habría otra forma de salir de esto si no hubiese pasado el intercambio.

Me levanto, y me acerco a él.

—¿Qué haces Pre...—le interrumpo uniendo mis labios con los suyos, tomando su rostro con mis manos y besándole, necesito besarle

Al principio no lo entiende pero luego toma mi cintura pegando mi cuerpo las al suyo.

Sus labios se mueven de manera lenta y a la vez devoradora sobre los míos, su lengua acaricia mi labio superior y mi boca se abre dandole la oportunidad de que me explore más, toma mis caderas levantándolas y enrollo mis piernas al rededor de su cintura a medida que me lleva a la cama.

Me coloca en el borde de la cama y el se arrecuesta sobre mi, colocando sus brazos a mis costados para sostenerse, yo acaricio su cabello.

Nuestras lenguas luchan por ganar este juego, pero el se separa y me da un pequeño beso, cortándolo todo.

Frunzo el ceño mirándole.

—Se que no es momento, y por eso es mejor que no hagamos este tipo de cosas...ya que podemos llegar a otro lado y tu no estas lista aún.—murmura y va a separarse pero no le dejo 

—Hey, estas limpio.—murmuro en sus labios, uniendo nuestras frentes y haciendo rozar nuestras narices 

Cierra los ojos y luego se aleja.

—Tu quieres que yo te haga el amor, y mierda yo no se hacer eso, no tienes idea de cuanto te necesito pero,¿y si sólo no puedo?—se pasa la mano por el cabello con exasperación 

Que inseguro es mi hombre, el solo no sabe que con el hecho de ya quererme, le saldrá solo, en realidad quiero esto, porque le necesito, necesito olvidarme de todos los problemas y él es el único que puede lograr eso.

Suspiro y me levanto, me coloco de puntillas y le abrazo con fuerza, me separo un poco y luego tomo su rostro dandole otro pequeño beso en los labios.

—Te quiero, Grant.—sus ojos están clavados en los míos 

Se queda en silencio por unos minutos, le seguía costando decirlo aunque ya lo había hecho. 

—También te quiero...—dice al fin—Pero es solo que no creo que...—le interrumpo

—Sh, ¿ves? Eso es todo lo que necesitas para hacerlo.—esbozo una pequeña sonrisa—Tal vez no sea exactamente el momento adecuado pero ambos lo necesitamos y lo sabes.

Traga saliva y luego sólo me toma de la cintura pegándome a su cuerpo y uniendo nuestros labios en un beso apasionado pero tierno a la vez.

Su mano comienza a acariciar mi espalda y a levantar mi suéter de la pijama, me separo un poco y alzo mis brazos para que el me lo termine de quitar, y así lo hace.

Toma mis pantalones y se agacha a medida que los baja, levanto un poco mis pies dejándolos caer al piso.

Acaricia mis muslos de arriba abajo, me mira y luego posa su mirada en las cortadas.

Sin decir nada, posa un beso en cada una, y me muerdo el labio inferior mirando sus movimientos.

Luego se levanta y une nuestros labios por una vez más, sus manos pasan a mis caderas levantándome y llevándome de nuevo hacia la cama.

Me acuesto sobre ella y se coloca sobre mi, colocando sus brazos a mis costados para no dejar su peso caer sobre mi cuerpo, bajo mis manos por su espalda y comienzo a bajarle el pantalón de su pijama, se aparta de nuevo un poco y se lo quita.

Acaricia mis pies, a medida que va subiendo sus besos por mis pantorrillas, luego mis muslos, con lentitud; besa mi abdomen, me mira y besa la cicatriz que el me ha provocado haciéndome estremecer un poco cuando murmura «Lo siento», y sube por mi pecho en donde besa la quemadura.

Sus besos suben por mi cuello, haciéndome jadear y llevar la cabeza hacia atrás para darle mas permiso, muerde suavemente el lóbulo de mi oreja y luego besa ambas mejillas, a medidas que sus manos acarician mis muslos.

Quiero hacer algo por él pero lo único que hago es acariciar su cabello dejando el placer invadirme, me siento en mi primera vez.

Baja las tiras de mi sostén besando mi hombro y luego coloca la mano bajo mi espalda acariciandola, haciendo que me arquee y así desabrocha mi sujetador, tirándolo a algún lado y dejando mis pechos al descubierto.

Su mirada no se ha despejado de mis ojos en casi ningún momento.

Trato de darnos la vuelta, quiero besar su cuerpo de la misma forma que me lo ha hecho, pero me lo impide.

—Esto es diferente.—murmura atrapando mis labios y sonrío

Se quita por un momento de mi, despejando su bóxer, y toma un preservativo de su pantalón tirado en el suelo, permitiéndome ver su cuerpo.

Me pilla mirándole y sonríe alzando las cejas, me sonrojo y estallo en una risa.

—Me siento una adolescente.—digo riéndome a medida que el se coloca el preservativo y se acomoda entre mis piernas 

—Eres una adolescente, pequeña.—me da un beso sobre los labios y luego lentamente baja mis bragas

Me mira serio una vez que las ha despojado y yo le miro con el labio inferior mordido asintiendo. 

Y lo hace, se introduce en mi lentamente sin dejar de mirarme a los ojos, suelto un gemido y cierro un poco los ojos, no haberlo hecho luego de tanto tiempo definitivamente hacia que doliera.

Mis uñas se clavan en su espalda a medida que el se mueve lentamente, al mirarlo sus ojos están muy grandes, y parece preocupado lo cual en realidad me produce gracia.

—¿Estas bien? ¿Te he lastimado? ¿Sigo?—dice casi jadeando y río, en realidad se siente bien 

—Estoy bien.—murmuro dandole un beso en los labios para tranquilizarle

El asiente y sus movimientos se vuelven más rápidos haciéndome gemir.

—En realidad te quiero.—murmura atrapando mis labios en un beso para callar mis gemidos 

Sonrío, esto se siente diferente a todas las otras veces que lo hemos hecho.

—También te quiero.—digo entre jadeos 

Y no pasa mucho cuando ambos llegamos al orgasmo, me corro primero que Grant, besa mis labios una vez que lo ha hecho y luego solo deja su cuerpo sudado caer sobre el mío.

Sale de mi, se quita el preservativo y lo tira a algún lado, le miro alzando las cejas cuando se pone a mi lado y yo le abrazo.

—Debemos dejarle un regalo a Michael.—dice y río 

Acaricio su pecho y el acaricia la parte baja de mi espalda.

—Me has hecho el amor Grant Segal.—digo haciéndolo reír y provocando que su pecho vibre 

Besa la parte superior de mi cabeza.

—Supongo que lo he hecho.

Levanto mi cabeza para mirarle y el me mira confundido.

—¿Qué?—dice 

—Esto se siente bien.—me muerdo el labio inferior sonriendo—Se siente como si nada estuviese pasando.

—Cuando tengamos a Amellie, te prometo que estaremos así todos los días.

Sonrío.

—Creo que es hora de descansar.—murmuro y asiente

Me tapo con las sábanas, dándome la vuelta, el me abraza por detrás.

—Grant.—murmuro, no se si es un buen momento 

—¿Hm?

—Debemos irnos a París.—siento como se levanta para mirarme pero yo no quiero hacerlo 

—¿Qué?

—Luego de recuperar a Amellie, y quiero que vengas, y así comenzaremos una vida nueva, sin personas que te miren o alguien queriéndote destruir.—ahora volteo y le miro 

—Beth, no es tan fácil. 

—¿Por qué? Hablas francés, puedo conseguir una casa allá...papá de seguro nos ayudara y...

—No puedo dejar el país.—me interrumpe haciendo una mueca 

—¿Qué? ¿Por qué?

—Tengo orden de captura, y no puedo simplemente dejarlo todo, en el momento que lo intente, me enviarán a la cárcel.

—Todo esto lo ha hecho Sarkozy, ¿no es así?

—Si, supongo que aumentar la inseguridad en Toronto, solo provoco que me quiera mas detrás de celdas.

—Pero tu no eres culpable del todo,¿o si?

Suspira.

—Es mejor que duermas.—hace una mueca y me va a dar un beso pero coloco mi dedo sobre sus labios impidiéndolo 

—En realidad eres culpable.—murmuro, con algo de decepción

Vale, sabia que era un asesino a sangre fría, estaba segura de eso, pero el mataba a gente que al menos conocía, pero,¿convertir una ciudad entera insegura? Eso requeriría de matar a miles de personas.

—Cuando solía trabajar con Michael, no se formaban bandas, porque los mataba, pero luego de que te fuiste simplemente no hacia el trabajo porque no quería, mataba a quien quisiera y entré en una banda.

»Me sentí como antes, simplemente no sentía ni me importaba nada.

—Pero has cambiado.

—Si, supongo que lo he hecho.

—Vale, entonces arreglaremos esto.—le doy un beso en los labios y aunque se que quiere decir algo, simplemente asiente 

—Descansa.

~~~~

Sexto día.

Miro el muñeco fulminándolo con la mirada, estoy en posición de defensa lista para atacarle.

Grant me lanza una mirada de reojo sonriendo y yo sólo se la devuelvo, siento un extraño dolor en mi entrepierna pero no dejo que eso me impida entrenar.

Y ataco, comienzo a golpear al muñeco con todas mis fuerzas, golpes con puños, patadas, y lo repito.

Sólo visualizo a Brody, y antes de que me de cuenta el muñeco se encuentra en el suelo.

—¡Wow, tómalo con calma!—grita Matthew y sonrío inclinándome para tomar el muñeco 

—Creo que se lo tomó personal.—se burla Travis y ruedo los ojos 

Segal me mira orgulloso y luego se acerca a mi, tomándome de la cintura y dándome la vuelta sin previo aviso.

—Veo que sigues teniendo fuerzas después de todo.—dice con picardía 

—No se porque no tendría.—digo sonriendo 

Sonríe y acerca su rostro a mi oído.

—Bueno Previtti, quiero advertirte que ahora que te has convertido en una mujer fuerte, tendremos noches intensas.—susurra en mi oído y yo solo estallo en una carcajada y luego le golpeo 

El sonríe y se coloca de nuevo junto al muñeco.

—¡No apto para menores!—grita Samantha, me sonrojo debido a que todos nos están mirando 

Al terminar el entrenamiento de defensa personal Michael nos lleva al exterior, en el jardín. 

Me encuentro con unas mesas en las que encima hay unas latas.

—Penúltima fase, puntería.—dice y le miro algo nerviosa 

Matthew se acerca con un bolso color negro, lo tira al suelo y lo abre, sacando de el dos armas negras, se levanta y le entrega una Samantha y a Travis, luego saca otras dos y me la entrega a mi y Grant, y luego toma una para el y una para Mason. 

—Creo que no hay algo más simple que dispararle a unas latas.—dice Michael y hago una mueca, soy terrible apuntando 

Las latas están a una larga distancia, y ni si quiera se como debo tomar un arma, todos se ponen en línea y me sobresalto al escuchar el primer disparo, que cae justo en la lata de la cima, y el cual ha producido Mason.

—No he dado la orden aún.—dice Michael serio—Debéis usar protección de oídos, no todos están acostumbrados.—me lanza una mirada y le agradezco con un asentimiento, aunque he escuchado tiros mas de las veces que podría creer y la mayoría han sido producidos por Grant

Me pasa unos auriculares y yo me los coloco.

Obliga a los demás también colocarse auriculares menos a Grant, y es que,¿cómo le vas a decir a un asesino que se proteja los oídos de un arma cuando ese es el sonido que mas le gusta?

Suspiro y miro como todos comienzan a disparar pero sigo sin saber como debo agarrarla, la única vez que había disparado había sido drogada y había terminado en el hospital,¿qué tan loco suena eso?

Grant se acerca a mí, y quita mis auriculares.

—Es así.—su brazo derecho cubre el mío y toma el arma junto a mi, colocando su barbilla sobre mi hombro, siento un escalofrío recorrerme

Puedo amarlo, y puede ser el hombre con el que quiero pasar mi vida entera, pero saber la cantidad de personas que ha matado y torturado y saber que es el mejor que me puede enseñar a agarrar un arma, me produce escalofríos.

Nota mi cuerpo tenso y aprieta los labios y aunque pienso que me dirá algo al respecto sólo lo ignora, o lo deja pasar por el momento.

—Toma la pistola con tus dedos corazón y anular, el dedo meñique debe descansar en el arma, pero no se utiliza para agarrar; y tampoco utilizas el pulgar.—coloca mis dedos en posición y asiento

»Tu agarre debe ser firme así que agarrala fuertemente hasta que tu mano empiece a temblar.—suelta mi mano, y ahora coloca la suya en mi cintura observándome y dejándome la pistola comienzo a agarrar la pistola con fuerza, y luego de un poco logro que tiemble

—Si lograste que la pistola tiemble, estás cerca de lograr un buen agarre, ahora relaja tu mano.—dice tomándola una vez más 

Que extraño es esto.

—Estabiliza la pistola con tu mano no dominante.—ahora cubre ambos brazos y coloca mi otra mano en posición

Asiento algo nerviosa.

—Siempre debes estar pendiente de mantener tus pulgares lejos del martillo, ya que te puedes lastimar al halarlo.—aparta mis pulgares con suavidad, son muchas cosas que procesar 

Me termina de explicar la posición adecuada que debo tomar, que es recomendable apuntar con un ojo cerrado y que al momento de disparar sincronice los disparos con la respiración.

—Gracias.—murmuro y sólo me da un beso en la mejilla alejándose 

Me coloco los auriculares y siguiendo sus pasos comienzo a disparar a las latas primero fallo pero luego le logro dar a dos, no soy tan mala después de todo. 

—Esto fue fácil, pero dispararle a una persona no es tan sencillo como esto.—dice Michael y mi cuerpo de nuevo se coloca tenso, e inconscientemente mi mirada se desvía a Grant—Así que pasemos a los muñecos.

Michael comienza a caminar y todos le seguimos, siento como me toman del brazo y al voltearme me encuentro con Grant mirándome serio, claro que no iba a dejar pasar mi actitud.

—No soy tan mala,¿eh?—hago una mueca esbozando una falsa sonrisa, para evitar el momento incómodo 

—Siento si te hago sentir incomoda pero esto es lo que hago y creo que te he sido muy claro al respecto,¿o no?—su mandíbula esta tensa al igual que su cuerpo entero

—Si, vale, lo siento, es solo que me parece irónico todo esto, de que tu seas el que me enseñe como agarrar un arma y que estés practicando para eso.

—Estas haciendo esto por Amellie, no por mi, si piensas que yo alguna vez te obligaría matar una persona solo por satisfacerme estas completamente equivocada.

—Pero me has hecho disparar un animal.

—¡Mierda Beth!—exclama visiblemente molesto—¡Eso fue hace casi cuatro años y ni si quiera te quería! 

Me muerdo el labio, no se porque sigo diciendo cosas tan estupidas.

—Lo si...—pero antes de que termine mi palabra, se va

Maldita sea conmigo. 

Me acerco a donde están los demás, ahora nos encontramos en un campo grande, frente a unos muñecos de color negro, con rayas blancas, que seguro indican donde debes apuntar.

Miro a Grant el cual sólo me ignora tomando el arma con fuerza, lo puedo notar ya que le tiembla, no demasiado pero si.

—Disparen y recarguen.—indica Michael,mierda,¿como se recarga?

Me coloco los auriculares y todos comienzan a disparar pero yo al hacerlo fallo, la bola llega a una esquina del muñeco.

Al mirar el de Grant, ya ha dado cinco tiros, en el corazón, en el medio de una de las rayas, en la cabeza y otras entre las rayas.

Debo hablar con él pero ahora mismo debo concentrarme en aprender a disparar.

Intento por un tiempo pero luego la pistola simplemente deja de disparar, miro a Grant el cual parece muy concentrado en lo que hace, me esta ignorando.

—¿Todo bien?—pregunta Matthew al verme con cara de confusión, vale lo que necesitaba para hacer enfadar a Grant aún mas 

—No se como recargarla.—hago una mueca, si Segal me ignoraba debía continuar entrenando 

—Colocas el seguro, y pisas este botón.—toma mi arma y lo hace, de pronto—Y luego simplemente colocas otro cargador lleno.—toma uno del suelo y lo inserta 

—Cuando escuchas el sonido, es que esta asegurado.—dice con una sonrisa

—Vale, gracias.—respondo esbozando una leve sonrisa 

Al voltearme a mirar a Grant esperando una mirada matadora sobre Matthew, me encuentro con lo contrario, un Grant disparando.

Suspiro y me concentro de nuevo en disparar.

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Luego de cenar, intento a hablar con Grant pero el me evita yendo afuera, le sigo y lo encuentro fumándose un cigarrillo junto a la piscina, sólo.

—Grant.—digo acercándome a él, se voltea con el cigarro en su boca y se da la vuelta una vez más

Coloco mis manos sobre sus hombros y le doy un beso en el hombro derecho.

—Lo siento.—murmuro colocándome ahora junto a él

—Estoy acostumbrado a que la gente me tenga miedo, y me sabe a mierda.—habla mirando al frente—Incluso estaba acostumbrado a que tu me tuvieras miedo.

»Pero no lo hiciste, después de todo no me tenias miedo, no entiendo porque lo haces ahora. 

Esta herido, Grant Segal esta herido, por mi culpa.

—No te tengo miedo, sólo fue una reacción estupida que tuve.

—Se que la cague contigo, y nunca me disculpe en realidad, no se como puedo disculparme con eso, o con lo que hice.—le da una calada a su cigarro, sigue sin mirarme 

—Hey, aquí la culpable soy yo.

—¿Entonces por qué soy yo el que me siento culpable?—voltea su rostro y sus ojos azules que brillan en la oscuridad por fin se encuentran con los míos 

—No te tengo miedo, sólo que nunca me podré acostumbrar a esto, y necesito que lo entiendas.

Esboza una sonrisa irónica.

—Yo necesito que tu entiendas lo que soy, tenemos una hija, y ni siquiera está llevando mi apellido, y lo entiendo,¿por qué querrías que llevará el apellido de un enfermo mental?

—Grant.—voy a tomarlo del rostro pero se aparta, tendemos a caer en el mismo problema

Tira la colilla de su cigarrillo y la destroza con la bota.

—Te quiero.—me da un beso en la mejilla y luego simplemente entra

Contengo unas lágrimas, algo saldría mal, siempre.

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Séptimo día. 

Hoy seria el ultimo día en el que entrenaríamos, luego nos tocaba pelear con nuestro compañero y hacer la última etapa que no estoy segura de lo que es. 

—¡Tomen un arma!—grita Michael y frunzo el ceño, estamos en defensa personal, no puntería 

Todos se acercan a donde esta Michael y toman un arma de la mesa.

—Ultima parte de defensa personal es saber como quitar un arma y como terminar apuntándole al enemigo.—dice Michael

Todos se colocan en posición de defensa, uno frente a otro, y me siento incomoda debido a que la pelea que hemos tenido ha sido por una maldita arma, o bueno, algo parecido a eso.

—Utilicen las defensas y llaves enseñadas.—es lo ultimo que dice, veo a los demás comenzando a pelear fuerte y respiro profundo antes de acercarme a Grant para hacerle una llave y defenderme

Pero antes de lo visto, no se que clase de defensa me ha utilizado, que estoy en el piso, y el esta sobre mi apuntándome con la pistola.

Mierda.

—Nunca ataques de primera.—dice levantándose, esta molesto, demasiado—Y si lo harás asegúrate del golpe que vas a utilizar.

Asiento y voy a atacarle de nuevo, me toma del cuello, y lo piso, aunque no muy fuerte, luego doy la vuelta y voy a golpearlo con el arma, pero con la suya me tumba la mía, y me apuntándome una vez mas.

—Ya has muerto dos veces.—dice serio y ruedo los ojos, es un maldito profesional —Sigue,¿qué harás?

Le miro seria y pienso voy a inclinarme para tomar el arma y no deja de apuntarme pero por sorpresa me levanto, dándole una patada al arma y haciéndola caer al suelo, me va a atacar pero tomo su mano dandole la vuelta, y casi logrando hacerle una llave, pero toma mis piernas y me da la vuelta haciéndome caer al piso y luego lo golpeo una vez mas, pero toma mis brazos.

Miro hacia el arma que esta al lado de el y trato de soltarme de su agarre, estas no son cosas normales que una pareja haría, definitivamente estamos peleando como animales.

Me estiro un poco y corro el arma con mis pies, se da cuenta y me levanta arrodillándome y colocando mis brazos detrás de mi espalda, y toma el arma apuntándome en la cabeza.

—Buen intento, Previtti.—susurra en mi oído, quiero rendirme pero no lo hago

—Tienes razón.—hago una mueca y cuando ha quitado el arma de mi cabeza y aflojado mi agarre con mi codo le golpeo en el estomago 

Abre los ojos y en un movimiento rápido torno el arma hacia el, hace fuerza y yo también y empieza a tornar el arma hacia mi, pero le golpeo en su entrepierna y hace una mueca de dolor, voy a golpearle una vez mas pero abre los ojos y me deja el arma.

—¡Me vas a dejar estéril!—exclama haciéndome reír—Ya veo cual es tu movimiento, Previtti.—coloca sus manos sobre su entrepierna mientras yo le sonrió orgullosa apuntándole 

Todos nos miran y estallan en una carcajada.

—La aplicaré.—dice Samantha sonriendo y Travis frunce el ceño, ella le golpea en su entrepierna y Travis cae al piso gimiendo de dolor 

—Maldita sea,¡¿cual es tu puto problema?!—exclama, todos reímos una vez más

Al terminar el entrenamiento de defensa nos dirigimos al bosque, para puntería, aunque no estoy segura de lo que vamos a hacer.

De pronto noto las escopetas encima de una mesa y abro mis ojos muy grande sorprendida.

Miro a Grant horrorizada y el se acerca a mi.

—Yo tal vez te puse a matar un animal, pero al menos no estabas del todo consciente.—dice haciendo una mueca—Ahorita lo estarás, y no será un animal “feo”.—hace las comillas con sus dedos 

—¡¿Qué?!—exclamo 

—Pájaros volando, debéis apuntarles y hacerles caer mientras están en movimiento.—habla Michael 

—¿Que coños?—digo mirando a Michael sorprendida 

—Pájaros no son nada frente a personas, Beth.—habla con voz severa—Uno por uno.—dice Michael mirando a los demás 

Respiro hondo y miro a Mason que es el que pasa primero, toma una escopeta entre sus manos, mierda, esa arma es enorme.

Michael lanza una piedra a un árbol y de inmediato pájaros negros salen, Mason apunta y comienza a disparar, unos seis o siete pájaros caen y chillo tapando mi boca.

Me miran, si para ellos puede ser normal pero para mi no, ¡pobres animales! 

—Quince, podrías haberlo hecho mejor.—dice Michael tomando el arma,¿mejor? Mierda si yo no le voy a disparar ni a uno—Grant.—le llama y el se acerca tomando el arma 

De nuevo hace lo mismo con otro árbol, tira la piedra y cientos de pájaros salen.

Grant comienza a disparar, y parece que demasiados han caído,¿como puede hacerlo? 

Los pájaros desaparecen.

—Veinte, nada mal.—dice Michael y Grant sonríe con orgullo 

Samantha mata diez, Travis doce, Matthew diecisiete, me sorprende que todavía queden pájaros.

—Beth, vienes tu.—dice Michael, asiento nerviosa y tomo el arma, que pesa demasiado

—Mantenla con fuerza y trata de no inclinarte mucho hacia atrás ya que puedes caerte.—me explica Michael, afirmo 

Tira una piedra al árbol, y cuando voy a disparar me voy hacia atrás, haciendo que mi trasero quede al suelo, y ni siquiera le he disparado a un pájaro.

—Inténtalo de nuevo.—dice Michael 

Me levanto y asiento, los pájaros salen y les disparo, pero sólo logró hacer caer a uno y chillo.

—No me gusta esto.—murmuro 

—Debes hacerlo y no puedes actuar así cuando estas apunto de salvar a tu hija y debas matar a alguien.

Suspiro y asiento, me coloco de nuevo en posición y lo intento, los pájaros salen y comienzo a apuntar disparando, o eso intento.

Cuando desaparecen Michael me mira orgulloso, ni he notado cuando he terminado.

—Seis, para nada mal.—dice sonriendo y le agradezco también con una sonrisa—¡A descansar!—exclama—Mañana nos espera un fuerte día ya que es el ultimo, y en la noche planearemos el ataque.

Todos asienten y nos damos la vuelta para irnos.

—Buen trabajo.—dice Matthew extendiendo su mano con un puño, el hijo de Michael es todo un casanova

—Gracias.—respondo pegándole al puño y el sonríe 

Nos dirigimos a la casa y me dedico a meterme de inmediato a la ducha, me siento agotada y me duele todo.
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Capitulooo largo y escena hot con gif incluido jajaja. Que lo disfruten espero votos y comentarios, Feliz Sabado!