Capitulo dieseis

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Doctor Saks, emergencia en el pasillo diez
Doctor Saks, emergencia en el pasillo diez.

El extenso pasillo se inundaba de los avisos de aquella cocina encargada de estar siempre al pendiente de todos los enfermos.

Al llegar a recepción, La mujer se recargó y miró sonriente a la enfermera. La cual le regresaría una sonrisa igual de cálida.

— Hola buenas tardes, soy Guren, una amiga del paciente Naruto Uzumaki, me gustaría verlo.

— Mucho gusto, soy la doctora a cargo de Naruto Uzumaki. Claro puede pasar. Es la habitación doscientos treinta.

— Muchas gracias.— Ambas se despidieron con una reverencia corta y Guren se encaminó a la habitación mencionada.

Toca la puerta varías veces hasta que escuchó la voz del chico al otro lado.

— Delante.— Se escuchó

— Hola naruto.— Dijo Guren al tiempo que cerraba la puerta detrás de ella.

— Guren, hola. Por un segundo creo que sería Sakura. — Dijo tomando la sabana y sobrarla un poco.

— Por qué debería?— Guren pregunto tomando asiento.

— Cosas mías. No te preocupes , dime mejor qué haces aquí?— El chico sonrió a su amiga.

— Bueno, la verdad es que estaba preocupada por ti. Que, no puedo?— Guren levantó una deja un tanto molesta.

—  Pero si no e dicho nada. — El chico soltó una risa cálida— Me alegro de verte.

— Te veo un poco mejor.

— Si, la verdad es que los cuidados de aquí son muy buenos y Sakura me ayuda mucho en este rato. — El chico al mencionar a la pelirosa desvió un poco la mirada con nerviosismo.

— Y entiendo.— Guren por su parte miraba atenta a su amigo, ya que este parecía estar sonrojado. — Te puedo preguntar algo?— Le dijo finalmente haciendo que el chica la mirara.

— Sabes que si.

—De qué va con la señorita Haruno.— Ella fue directa y sin rodeos.

— Te refieres a...— Dejo incompleta la frase ya que no entendía del todo a su amiga.

— Naruto, creo que no es necesario que te lo diga pero... pareciera que estás enamorado.

El chico se puso rígido, la mirada de burla que tenía hace unos segundos se desvaneció y su estómago se contrajo un tanto... avergonzado.

— C-Crees que se note mucho.— Dijo después de un rato afirmando lo que su amiga había deducido.

Guren se quedó sin luneto, vio como el chico rascaba su nuca claramente nervioso así que no dijo nada y solo suspiro fuertemente.

— Si,— Le afirmó— Es muy notorio. Bueno, es obvio que no la ves igual que las demás mujeres.

— Es su ella no es para nada igual a las demás.

— Si claro.— Ella suspiro — Pero me atrevo a preguntar... la conoces lo suficiente?

— Si, bueno, al menos lo que yo necesito conocer si lo hago. La conozco desde que traje al señor Hiashi aquí.

— Enserio? Nunca me dijiste.

— Bueno, no pensé que la volvería a ver.

— Pero... como fue?

— Nada difícil ni del otro mundo. Ella me ayudo a aclamarme cuando me altere por el estado del señor Hiashi, platicamos un rato y logro calmarme, se lo agradecí y ella aprecia muy linda a mi vista. Sus ojos verdes y ese cabello rosa único. Me hipnotizo por completo. Después intercambiamos números por cualquier cosa y al final... llegue aquí. Supongo que fue un empujón del destino.

El chico terminó con una carcajada nerviosa haciendo que Gurne se sintiera contenta.

— Me alegro por eso. De verdad.

— Quería suponer que le caigo bien, así que por el momento no quiero tratar de adelantarme con mi declaración.

— Sin duda, no creo que ayude demasiado ya que apenas y ambos se medio conocen.  No me gustaría que te rechazara.

Guren se acercó más a naruto el cual estaba sonriendo muy tranquilo.

— Bueno, si eso pasa, creo que lo único que toca hacer es aceptarlo. Soy bueno asimilando cosas.

— Mira nada más. Que Maduro.— Se rió  Guren un segundo.

De repente la puerta fue tocada un par de veces haciendo que los amigos giraran al mismo tiempo hacia el mismo punto.

— Ya es hora de irme?— Pregunto Guren aún si abrir la puerta.

— Las visitas son ilimitadas. Bueno supongo que debe ser ella. Hablo de sakura claro. — El chico se acomodo mejor y se "arreglo" para recibir a la chica.

— Pase— Dijo Guren esperando que la puerta se abriera.

Así fue, de esta apareció la increíble melena color café, la cual sorprendió a los dos dentro de la habitación.

— Hola hola, supongo que me extrañaste oxigenado. — La voz de la pequeña Hanabi Hyuga resonó por toda la habitación.

La cara de Naruto y Guren era todo un poema, la sorpresa se les veía en todo su esplendor y la risita de Hanabi fue la que les confirmó que si estaba pasando.

— Veo que no me esperabas...— Miró a un lado del chico encontrándose con Guren— Pero mira nada más, estás también Guren, Hola.

Saludo como si anda, camino y se sentó para poder dejar salir el aire que acumulaba.

— Qué hace aquí señorita Hanabi?— Pregunto Guren un tanto en shock

— Me tocó hacerla de mandadera, algo que tú conoces bien. En fin, solo venía a darte esto — de su bolso de último modelo sacó un sobre blanco y lo extendió a Naruto. El cual

hanabi estiro su mano con un sobre en ella y naruto la agarro con delicadeza....

- 𝑏𝑢-𝑏𝑢𝑒𝑛𝑜 𝑦𝑜 𝑚𝑒 𝑟𝑒𝑡𝑖𝑟𝑜 𝑎𝑑𝑖𝑜𝑠 𝑛𝑎𝑟𝑢𝑡𝑜...𝑐𝑜𝑚𝑝𝑒𝑟𝑚𝑖𝑠𝑜 𝑠𝑒𝑛̃𝑜𝑟𝑖𝑡𝑎 ℎ𝑎𝑛𝑎𝑏𝑖...

- 𝒔𝒊, 𝒔𝒊 𝒂𝒋𝒂 𝒂𝒅𝒊𝒐𝒔.....

- 𝐚𝐝𝐢𝐨𝐬 𝐠𝐮𝐫𝐞𝐧....

- 𝑣𝑎𝑦.....

- 𝒑𝒐𝒓 𝒒𝒖𝒆 𝒏𝒐 𝒍𝒆𝒆𝒔 𝒍𝒂 𝒄𝒂𝒓𝒕𝒂?....𝒒𝒖𝒊𝒆𝒓𝒐 𝒔𝒂𝒃𝒆𝒓 𝒒𝒖𝒆 - 𝒅𝒊𝒔𝒆...

- 𝐞𝐬 𝐝𝐞𝐥 𝐬𝐞𝐧̃𝐨𝐫 𝐡𝐢𝐚𝐬𝐡𝐢.....

- 𝒑𝒖𝒆𝒔 𝒍𝒆𝒆𝒍𝒂 ....
.....𒊹︎︎︎......𒊹︎︎︎........𒊹︎︎︎.....

3-01-22

Soy Tu Dueño, Pero Yo Tu Jefa. | En Edición Donde viven las historias. Descúbrelo ahora