Capitulo 16

897 87 3
                                    

Sesshoumaru busco un lugar tranquilo en el bosque, detras de la cascada había una pequeña caverna que les daría privacidad, así que se dirigió hacia ese lugar con Kagome en sus brazos, ella estaba realmente agotada, tanto física como mentalmente, al entrar al pequeño lugar se quitó su mokomoko y lo coloco de forma que su mujer estuviera comoda y la recostó en él

-Ahora vuelvo, traeré un poco de leña y algo para que comas, descansa un poco- le dijo besándole la frente

-Sessh, no me dejes sola favor-

-Solo será unos minutos Koi, volveré los más rápido posible-

Busco lo necesario de una forma bastante veloz, sabía que no era conveniente dejarla sola mucho tiempo en ese estado emocional así que rápidamente regresó a la cueva, estaba dormida, el sonido del agua la había logrado calmar lo suficiente para poder dormir un poco, así que preparo el fuego cerca de ella y con su youki llamo al dragón de dos cabezas que estaba en la aldea con Rin

Kagome durmió toda la noche, él Permaneció en vigilia mientras llegaba Ah-hun, en la madrugada al sentir el aura del dragón le indico dónde aterrizar, se sorprendió al ver a Rin bajar de él

-Mi lord, Ah-hun estaba inquieto así que le pedí que me permitiera acompañarlo-

-Hn- respondió el Lord

-Amo, ¿como está mi lady?-

-No muy bien Rin, por eso pedí al dragón que viniera, estaremos unos días aquí, necesitamos un poco de tiempo antes de enfrentar lo que nos espera, dile a la manada de Inuyasha que no se preocupen por ella, yo la cuidare-

-Hai mi lord, ¿que necesita que le ayude?-

- Ten esta bolsa con monedas y ésta lista, cuando tengas todo por favor envía a Ah-hun-

Rin obedeció a su lord, al llegar al pueblo nuevamente le explicó a la anciana lo que solicitaba el demonio y estuvo de acuerdo con él, necesitaban algo de tiempo a solas para procesar su duelo, ayudo a Rin a preparar todo lo de la lista e incluso unas hierbas medicinales para los nervios de Kagome, además de algo de carne seca, montaron todo en el dragón de dos cabezas y le pidieron lo llevará con su amo.

Por la tarde el dragón estaba aterrizando fuera de la cascada, Sesshoumaru lo descargo y lo despachó a cuidar de Rin, Kagome continuaba sin despertar, casi había pasado un día en que había ido a dormir, ho había comido nada así que al ver la carne seca le envío la anciana intentaría que comiera algo.

Una carta acompañaba el paquete:

"Mi lord, le escribo estos pequeños renglones para solicitarle con todo el corazón que cuide mucho a Kagome, solo usted puede ayudarla a sobreponerse de este golpe tan duro, la dejamos en sus manos y no dude en solicitar lo que necesite.
Dele nuestro cariño y mejores deseos a Kagome, la manada está preocupada por ella.
Sinceramente
Miko Kaede"

Sesshoumaru guardo la nota y se dispuso a despertar a su mujer, se acercó a ella y se recostó a su lado, ella al sentir su calor inmediatamente se acorruco en su pecho

-Koi, despierta- le hablaba suavemente- no has comido en días, te enfermaras- le decía acariciando su mejilla

Lentamente abría los ojos y miro hacia arriba coincidiendo con la mirada dorada de su amado, sonriendo le acaricio la cara

-Sessh.... Tuve un sueño espantoso....- decía aún medio dormida

El solo la miraba con tristeza

-Tu mirada está triste amor... ¿Por qué me miras así?? No.. fue.. un sueño.. .¿¿verdad??- decía dándose cuenta de su realidad, se tocó su vientre y estaba plano como si su hijo jamás hubiera estado ahí, al haberla resucitado con colmillo sagrado se recuperó de su parto fallido, sus ojos comenzaron a llenarse de lágrimas nuevamente

-Desahogate Koi, que yo lloraré con tigo- le decía abrazando a la joven que comenzaba a sollozar

-Sessh... Mi pequeño... Nuestro hijo se fue....- lloraba amargamente la joven

-Recuerda lo que nos dijeron los kamis.. algún día volverá a nuestro lado, ellos protegen su alma y volverá con nosotros- le consolaba

- lo sé, pero no es lo mismo, quien me llena estos brazos vacios-

-Dejame llenarlos con los mios-

Ella solo se acorrucaba más en el pecho de él

-Vamos Koi, comamos algo, necesitas fuerza-

El se puso de pie y le tendió la mano a su mujer la cual tomo sin dudar, la guió fuera de la cueva para que le pegara un poco el viento y el sol, le ayudo a sentar en una roca donde corria el agua.

-Mira Saiai, te traje un poco de fruta- le decía cortando una manzana en pequeños trozos con sus garras y colocando un trocito en la boca, ella masticaba lentamente y difícilmente podía tragar, el nudo en su garganta le dificultaba la acción

-Sessh, ¿que habrán querido decir los kamis con que se avecina algo dificil?-

-No lo sé Koi, no lo sé, pero tendremos que averiguarlo-

-Necesito un baño...- le dijo kagome al verse reflejada en el agua del río

- Dentro de la cueva hay una poza termal, la encontré antes que despertaras, ven déjame llevarte- la levanto en sus brazos y la llevo en forma nupcial hasta el fondo de la cueva

La puso de pie en la orilla de la poza y se dió la vuelta para buscar los artículos de baño

Ella se desnudo y se metió al agua caliente

Cuando el regreso ella ya estaba dentro del agua así que comenzó a desnudarse él también

-¿Que estás haciendo?- le pregunto ella

-Voy a bañarte-

-¿Te meteras conmigo?-

-Si, eres mi mujer y es mi obligación atenderte-

-¿Aun después de todo lo que hemos pasado?-

-Kagome- le decía entrando al agua con ella- entiende por favor que no volveré a separarme de ti, el día que te marque como mía, unirás tu vida a mi y nadie podrá separarnos-

-¿Porque piensas que quiero ser tu mujer para toda la vida?-

-Porque se que me amas tanto como te amo yo, porque no voy a cometer el mismo error dos veces- comenzaba a acercarse a ella- porque sin ti yo no soy nada, porque tú eres la razón de mi vida y mi existir y porque no voy a dejar que nada te separe de mi lado- la tomo por los hombros de frente levantando su barbilla- porque la fuerza de mi amor nos mantendrá unidos hasta que la muerte nos alcance a los dos....- se acercó y la beso tiernamente

Kagome no se resistió, pego su pecho al de su pareja y le pasó los brazos por el cuello intensificando su beso hasta que el aire les hizo falta, Sesshoumaru comenzó a besarle el cuello y acariciar sus curvas

-Kagome, no sabes cuánta falta me has hecho- le decía mientras acariciaba sus senos abarcandolos con sus fuertes manos

-Sessh... Por favor.. hazme olvidar este dolor.. aunque sea por un momento...

El miraba como ella le suplicaba y en verdad le dolía saber lo que ella quería olvidar

-Koi, no deberíamos... Es muy pronto-

-Por favor! Solo tu puedes ayudarme a sanar, solo tu amor me ayudará a salir adelante, no me rechaces- le decía con los ojos llenos de lagrimas

-Jamás!!- le respondía besándola con pasión nuevamente, ella envolvió sus piernas en su cadera y el busco dónde apoyarse dentro del agua, encontró una piedra lisa que no la lastimaria y la recargo embistiéndola de un golpe, el aire se le fue de los pulmones a la joven al recibir el poderoso empuje de su compañero, el placer remplazaba momentáneamente el dolor, sus empujes eran cada vez más veloces y pronto llegarían al climax

-Kagome, no creo soportar más, dime.. ¿quieres pasar el resto de tu vida conmigo?-

-Si! Sesshoumaru si, amame por favor y no me dejes nunca, amame por toda la vida- le suplicaba ella

Entonces el poderoso demonio descubrió sus colmillos y en el momento en que ambos llegaron al climax los enterró en hombro de la joven miko inyectando su veneno y marcando a la mujer como suya para toda la eternidad....

La Fuerza De Tu Amor...  (Actualizaciones Lentas)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora