Capítulo 32

55 4 1
                                    

Fernando abrió la puerta, junto a su brazo estaba Mariana, con una enorme sonrisa. Yo intenté ver hacía dentro, para poder observar si ya habían llegado mamá y papá. Los extrañaba mucho, lo admitía; extrañaba a mamá y sus consejos y también extrañaba abrazar a papá.

"Hola hermosa, que bueno que has llegado" Mariana me abrazó de pronto.

"Has llegado muy puntual, que bueno eh...tu y Sebastián han sido los primero"

Abrí mis ojos de par en par "¿Sebastián esta aquí?"

"Sí, claro, esta cena es importante para nosotros, Sebastián es mi mejor amigo, debe estar aquí"

Asentí mientras entraba y me quitaba mi abrigo "¿Han llegado ya mis papás?"

"No, llegarán un poco tarde"

Mariana me tomó de la mano "¿Gustas algo de beber?"

"Si claro, vino blanco si tienes"

Asintió "Claro que si, vamos a la sala"

Caminé detrás de ella. Fernando ya estaba en la sala, preparando unas bebidas, y entonces lo miré. Sentado cómodamente, en una posición relajada y se veía condenadamente hermoso. En cuanto me vio se puso de pie y caminó hacia mí.

"Nina ¿Cómo te va?"

Asentí "Muy bien, ¿Cómo estás tú? Tanto tiempo sin vernos" me reí y me lamí los labios. Tan solo unos días antes nos habíamos cogido en mi departamento, pero claro, teníamos que actuar.

"Te miras muy bien, aunque ese vestido está muy corto"

Fernando asintió "Muy pegado al cuerpo hermana, no dejas nada a la imaginación"

Lo miré molesta "Bueno, solo me verán ustedes y mis papás"

Levanté mi mirada hacia la chica que venía saliendo del baño. No la conocía, no era amiga de Fernando, pero tal vez era de Mariana. Pero de pronto se paró de lado de Sebastián y sentí una enorme punzada en mi pecho.

"Hola" me dijo sonriendo y yo no le conteste.

Sebastián me miro, disculpándose con su mirada "Tania, mi acompañante"

Asentí "Mucho gusto"

"El gusto es mío...eres adorable, tu hermano no ha parado de hablar de ti. Estas hermosísima, te has quedado corto al describirla Fernando"

La miré con ganas de arrancarle esa horrorosa sonrisa, no necesitaba sus adulaciones para nada. Sabía que había heredado belleza y un buen cuerpo, no necesitaba escucharlo de esa tipa.

Mi hermano sonrió "Bueno si, por eso la cuidamos tanto"

"Pareces una muñequita" siguió la mujer y yo sonreí. Si quería que yo le dijera lo mismo a ella, estaba bastante equivocada, pues no tenía ningún cumplido para ella.

"Bueno, si gracias, están exagerando un poco de cualquier forma"

"Es hermosa" Sebastián confirmó y yo lo miré molesta.

Habíamos quedado de estar solamente él y yo por este año. Supongo que no podía cambiar después de todo, supongo que lo mujeriego iba a ganar siempre. Tania lo tomó de la mano y lo guió al sofá.

Dulce Ardiente Tentación [+18]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora