Yuuri estaba marchando de un lado al otro de la pequeña casa del árbol que pertenecía a la familia Nagai.
Hina, su mejor amiga, estaba sentada en un cojín mirando a su amiga preocupada. No desviaba los ojos de la otra niña ni un segundo.
— Yuuri-chan, ¿qué haces?
Yuuri paró y miró a la otra niña.
— Estoy pensando en un plan.
Hina bostezó un poco y abrazo a su peluche de los ositos cariñositos.
— Yuuri-chan, ¿qué plan? Me dijiste que hoy si jugaríamos con nuestros osos.
Las dos niñas eran fanáticas de la serie de los ositos cariñositos y eso las había hecho mejores amigas.
Pero Yuuri ese día precisamente no tenía la idea de seguir viendo su serie favorita o hablar de ella, ya que en realidad, tenía asuntos más importantes que poner en discusión con su amiga actualmente.
— Hina, soy cupido.
La niña no mostró reacción ante la declaración.
— Ajá. No sé qué es eso.
Yuuri resopló y negó con la cabeza.
— ¿Cómo no vas a saber quién es cupido?
Hina alzó una ceja.
— Yo sé quién es cupido.
— ¿Sí?
Hina asintió.
— Me lo acabas de decir. Eres tú. Pero no sé que es "un" cupido.
Yuuri pasó su mano por su carita, mostrando visible frustración.
— Cupido es un ángel que dispara flechas y hace que la gente se enamore.
Hina abrió en grande los ojos y se levantó con una gran sonrisa.
— ¿De verdad? Qué increíble. ¿Tienes poderes? ¿Tienes una insignia de barriga?
Yuuri rió y negó.
— No es algo de ositos cariñositos.
Hina resopló y volvió a sentarse abrazando fuerte su peluche de Divertiosito.
— Pero voy a hacer que mi hermana se enamore.
Hina alzó una ceja y sonrió.
— ¿Enserio? ¿De quién?
Yuuri sonrió orgullosa. Finalmente tenía el interés de Hina.
— La maestra Miyoui.
Hina abrió la boca.
— Pero las dos son mujeres.
— Mejor aún.
Hina lo pensó y después asintió.
— Bueno eso sí. Creo que no ha de haber nada mejor que tener dos mamás. Además los niños son tontos.
Yuuri asintió igualmente.
— Sí, lo son.
Hina después se paró y se puso frente a su amiga.
— ¿Y qué harás para que la maestra Miyoui y tu hermana se enamoren?
Yuuri puso sus manos en los hombros de Hina y la miró a los ojos.
— Necesito que me ayudes como Cupido suplente.
Los ojos de Hina brillaron y sonrió de oreja a oreja.
— Me encanta la idea.
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𝙇𝙞𝙩𝙩𝙡𝙚 𝘾𝙪𝙥𝙞𝙙 [Mina y tú]
FanfictionT/N tiene que hacerse cargo de su pequeña hermana desde que sus padres fallecieron, cuando ella tenía tan sólo 16 años. Mina, por su parte, es una maestra en un jardín de niños, muy dulce y paciente con los estudiantes. Una pequeña niña actuará de c...