𝙇𝙞𝙩𝙩𝙡𝙚 𝘾𝙪𝙥𝙞𝙙 [Mina y tú]

♡ocho♡

Yuuri estaba en casa de los Hirai cuando escuchó una campana sonar por las calles.

La niña emocionada fue a buscar a Momo, quien la estaba cuidando esperando a que T/N volviera.

Los Hirai eran los vecinos de las Tokunaga desde incluso antes de que Momo naciera.

Yuuri veía a los Hirai, especialmente a Momo, como parte de su familia, algo así como primos y tíos.

Después de la muerte de los señores Tokunaga los vecinos habían estado ayudando a T/N para cuidar y criar a Yuuri. Los Hirai se quedaban con Yuuri la mayoría de las veces cuando la niña salía de clases y T/N la llevaba de vuelta a casa.

La pequeña sentía muy cercana especialmente a una de las miembros de la familia Hirai: Momo.

Momo casi siempre era quien terminaba cuidándola ya que sus padres eran jefes médicos en el hospital más cercano al pueblo. Ella, por su parte, no había querido seguir los pasos de sus padres y estudiar medicina y, en cambio, estudió diseño gráfico.

Yuuri era una niña muy calmada, obediente e inteligente así que no tenían problemas con cuidarla. Y, lo hacían también aunque sabían perfectamente que ella podría si quisiera cuidar de ella misma sola, pero tanto los Hirai, como T/N eran bastante sobre protectores con la bella niña.

Yuuri se asomó por la ventana, pensando que las campanas que sonaban pertenecían a un camión de helados.

Pero, en cambio vió a la profesora Miyoui andando en bicicleta y tocando una campanilla que estaba pegada en el lado izquierdo del manubrio.

Se quedó espiando con curiosidad detrás de una cortina.

Momo estaba ocupada haciendo un trabajo que un cliente le había pedido, así que no prestaba demasiada atención a la menor y menos se daría cuenta de que la pequeña espiaba a cierta chica, tal como un ángel de la guarda vigilando a su humano. Tal vez Yuuri si era un querubín como cupido que cuidaba a su pareja favorita de todo el mundo.

Yuuri se quedó a mirar toda una corta interacción que tuvieron su hermana y su profesora y sonrió para sus adentros. Sabía que esa bolsa que le entregaba T/N a la maestra Miyoui era un lindo vestido que había comprado.

Yuuri había acompañado a comprar ese vestido a su hermana y se había extrañado al ver como T/N tenía tanto interés en un vestido, sabiendo que ella no usaba de esos.

Pero ahora todo tenía sentido. Tal vez nunca hubiera visto a su hermana enamorada pero no dudaba que era una detallista romántica e ilusionada enamorada, ya que sin enamorarse siquiera, hacía gestos super lindos a sus novias de juegos, como en Stardew Valley.

Yuuri sonrió pensando que finalmente ambas tórtolas darían el paso definitivo y empezarían algo serio, pero, en su lugar, sólo se volvieron a alejar.

La niña se acercó a Momo, quien estaba en su escritorio trabajando.

— Momo-chan.

Momo despegó su vista de su computadora unos segundos y le sonrió a la niña.

— ¿Que pasa Yuu?

Ya que eran muy cercanas Yuuri le había permitido a la mayor llamarla con ese apodo.

La pequeña se sentó en el un puff que la mayor había puesto junto a su escritorio.

La pequeña se cruzó de brazos y bufó una vez sentada en su pequeño sillón.

— ¿Porqué será que aunque se gusten no lo quieren admitir?

Momo rió y miró con atención a la niña.