🐺•*¨*•.𝗢𝗰𝗵𝗼

504 50 32
                                    

Estaba acurrucado junto a JongHo en el sillón, mientras acariciaba su cintura, viendo como el se estaba quedando dormido profundamente, acerqué mi nariz a su cuello inhalando su delicioso aroma a chocolate y frutos rojos

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Estaba acurrucado junto a JongHo en el sillón, mientras acariciaba su cintura, viendo como el se estaba quedando dormido profundamente, acerqué mi nariz a su cuello inhalando su delicioso aroma a chocolate y frutos rojos.

Solté un bufido cuándo vi la hora en mi reloj, era algo tarde y debíamos irnos. Me separé de mi omega un momento, causando que me mirara confundido, con un puchero en sus labios.

—Pequeño ya debemos irnos, es tarde.

—¿No podemos quedarnos aquí para siempre? —me abrazó por la cintura, y escondía su rostro en mi cuello aspirando mi aroma.

—Me encantaría, pero sabes que no se puede, prometo traerte aquí muy pronto.

Nos levantamos y luego de asegurarnos que todo quedara en orden, salimos al auto. Antes de que el menor se quedara dormido, quise preguntarle algo.

—¿Quieres quedarte conmigo esta noche?

—Sabes que no puedo aún, pero apenas termine de juntar todas mis cosas, me iré con usted, ¿Está bien?

Asentí. —Sabes que puedes ser informal conmigo, no tengo problema alguno.

Oh, está bien MinGi-ah. —no pude evitar sonreír al verlo sonrojado.

—Vamos.

El camino fue algo cansador, y tardamos un poco más, ya que era de noche, preferí manejar con cuidado.

Mi celular comenzó a sonar, no le presté atención por un momento, pero la insistencia de la persona que me llamaba era mucha, por lo que me harté y lo vi, me confundí al ver el nombre de YunHo.

—¿YunHo? Es algo tarde.

—E-es GaHyeon, ella...

—¿Qué pasa con ella? —comenzaba a alterarme, más aún cuándo no me respondía absolutamente nada. —¡Responde!

—E-ella... escapó.

—¿Qué estás diciendo? ¿Cómo qué escapó?

—Con Yeo le dimos una noticia y a ella pareció no gustarle, discutimos y se fue a su habitación. Cúando fui a verla más tarde, e-ella ya no estaba. —escuché sus sollozos. —Si quieres puedes gritarme luego, pero primero encontremos a nuestra hija.

—Llegaré en cinco minutos. —colgué. Agradecía que ya estuviéramos cerca. Sentí la mirada de JongHo, él había escuchado todo.

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
𝗦𝗜𝗠𝗣𝗟𝗘 𝗢𝗠𝗘𝗚𝗔 ↝ jongminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora