Encubierta |Led Zeppelin| | ₊₁₈|

2. R. Hilburn

Olivia tenía poco más de un mes para planear como demonios iría a la gira de Led Zeppelin. Primero tenía que encontrar quien iba a cuidar de Sammy, también tenía que ver cuánto costaría esa aventura o como se acercaría a ellos. Mientras su mente debatía eso, leía la poca información disponible que había del cuarteto.

Realmente eran herméticos, quizás por eso eran populares, no podías saberlo todo de ellos y eso los hacía ver misteriosos de alguna manera. Nunca había visto algo parecido con otra banda, ellos eran muy... diferentes.

El mayor de todos era Page con veintisiete años, era el único que no estaba casado, aunque tenía una relación con una modelo francesa de nombre Charlotte quien había dado a luz a una bebé de nombre Scarlet en marzo.

Le seguía Jones de veinticinco años, se había casado en 1967 con una mujer de nombre Maureen con quién tenía tres niñas Jacinda, Tamara y Kiera. Olivia creía que tenía más en común con él que con los demás.

El cantante, Plant tenía veintitrés años, contrajo matrimonio en 1968, su esposa también se llamaba Maureen, lo cual le pareció gracioso a Olivia. Tenían una niña llamada Carmen.

Por último, estaba el menor de los cuatro, Bonham el baterista de solo veintidós años. Se había casado en 1966 a los dieciocho años con una chica llamada Pat, ese mismo año su hijo Jason nació.

No entendía como podían ser padres y estrellas de rock al mismo tiempo ¿Era siquiera compatible?

Después se respondió a sí misma, podían hacerlo porque eran hombres. Iban venían y cuando llegaban a casa todo seguía igual a como lo dejaron. Si una mujer viajara por todo el mundo y dejara a sus hijos en casa, las cosas serían completamente diferentes. Y entendía que también era su trabajo, pero si fueran mujeres dirían que ponían el trabajo sobre sus hijos.

Eso le pasaba a ella, su madre siempre le recordaba que ella era una terrible madre para Samuel debido a que lo dejaba "a cargo de desconocidos" por ir al trabajo, diciendo que eso era terriblemente egoísta y que tenía que dejar sus metas de vida de lado porque "su hijo y su esposo eran primero". Afortunadamente nunca la escuchaba, aunque eso no tenía que ver con el tema, ya tendría tiempo para juzgar a su madre después. Tenía que enfocarse en lo que estaba haciendo.

Tenía que concentrarse en su objetivo ¿Cómo iba a lograr que le dieran la oportunidad de ir con la banda? Por lo menos esperaba una entrevista, definitivamente no era lo que quería, pero quizás podría bastar. Olivia sabía que era linda y tenía eso de su lado, era feo admitirlo, pero cuando una mujer era atractiva tenía más oportunidades que las que no lo eran –O por lo menos no lo eran ante la imagen híper femenina e híper sexualizada. –, y aunque hacía mucho había dejado de preocuparse por verse bien para los hombres, sabía que no sería difícil volver a la imagen que tenía durante sus días universitarios.

Había otros problemas; ni siquiera recordaba la última vez que salió a una fiesta ¿En el 68' o en el 69'? ¿Qué demonios se hacía en las fiestas de la actualidad? Esperaba que no mucho hubiera cambiado porque si no, estaría perdida.

Tampoco recordaba cómo se coqueteaba, además ese siempre fue su punto débil. Los hombres la consideraban demasiado sabionda, eso fue lo que le gustó a Joe, que era inteligente y no intentaba ocultarlo. Las otras chicas también lo eran, por supuesto, pero muchas veces tenían miedo de demostrarlo, quizás porque cuando ellos estudiaban algunas chicas solo entraban a la universidad para encontrar un buen esposo. Olivia nunca quiso un esposo, su madre la había enviado a la universidad por eso, su padre si esperaba que terminara su carrera y que después hiciera lo que ella quisiera, terminó con ambas cosas de alguna manera y estaba feliz con lo que tenía. Bueno, tenía que estarlo.