15 horas después...
Jisoo despertó poco a poco, ya que la luz había sido encendida, parpadeo un par de veces para acostumbrarse a la blanca y resplandeciente luz que había inundado en ese cuarto, y cuando enfocó a su alrededor se dió cuenta de que seguía en la misma habitación pequeña y sucia donde la habían dejado la noche anterior.
Aún estando amarrada de sus tobillos, manos y con cinta en su boca, todas sus extremidades le dolían por estar tanto tiempo atadas y entumidas, su carita estaba algo hinchada por tanto llorar la noche de ayer y aun tenia lagrimas secas en sus mejillas.
Lo que deseaba e imploraba en demasía ayer no se le concedió. Esto no era una pesadilla, esto era la vida real, de tan solo pensar en su futuro incierto y doloroso, porque estaba segura de que así sería, sus ojos se cristalizaron de nuevo.
Jisoo con las fuerzas que le quedaban pudo cambiar su posición para quedar sentada con sus piernas estiradas sobre aquel colchón y trató nuevamente de liberarse de sus ataduras.
Fue hasta que escuchó unos pasos y voces en otro idioma, italiano, trató de adivinar por como sonaba, por detrás de la puerta lo que hizo que dirigiera su atención a ella, y cuando la puerta empezó a abrirse, la pobre chica comenzó a temblar en su lugar con sus ojos bien abiertos observando todo lo que pasaba.
A través de sus orbes pudo divisar que entró un hombre alto, algo fornido, en un traje muy elegante junto con una pequeña bolsa y una silla que parecía ser liviana, posicionó ambas cosas cerca del colchón donde se encontraba Jisoo y fue a cerrar la puerta.
Se volteó de nuevo viendo hacia la chica acostada y sonrió de lado acercándose hasta ella, quedando de cuclillas para tratar de quedar a la altura del colchón en el piso.
– Señorita Kim, buenos días. – saludó tranquilamente antes de hacer una reverencia, como si todo esto fuera una situación de lo más normal.
Jisoo abrió los ojos en demasía, ¿Cómo es que sabía su apellido?, claro Kim es el apellido más común en Corea, pero aún así que lo sepa le parecía muy extraño, y sobre todo daba miedo.
El hombre trató de acercar su mano al rostro de Jisoo, pero ésta por instinto se removió en su lugar tratando de hacerse hacia atrás y llevar sus piernas a su pecho como señal de protección, mientras negaba con la cabeza y sus lágrimas amenazaban nuevamente con salir.
– Tranquila preciosa, no te haré daño. – dijo lo más calmado posible.
Jisoo lo miraba con el ceño fruncido, no confiaba ni en su sombra, su respiración agitada causaba que su pecho subiera y bajara rápidamente, estar sola, inmovilizada, amordazada y con un desconocido en cuatro paredes no representaba una situación favorable para ella.
– Te quitaré la mordaza si prometes no gritar, ¿De acuerdo? – preguntó ganándose varios asentimientos rápidos de Jisoo en señal de respuesta.
El hombre se volvió a acercar al rostro de la chica y despacio fue removiendo la cinta gris de su boca, tratando de no causarle mucho daño. Una vez liberada de sus labios, Jisoo dejó salir una respiración pesada a través de ellos, su mirada fija en la del hombre, quien se encontraba viendo sus labios en forma de corazón.
– Tiene unos labios muy hermosos. – elogió sin vergüenza alguna, para luego buscar algo en su saco.
Jisoo aún seguía temblando un poco en su lugar, pasó su lengua por sus labios algo secos y su respiración continuaba de forma agitada, hasta que las primeras palabras que se le ocurrieron salieron.
– P-por favor d-déjeme ir. – suplicó ante el hombre.
Éste sólo dejó lo que estaba buscando en la mochila para dirigir su mirada a la chica mientras levantaba una ceja.
![](https://img.wattpad.com/cover/294336183-288-k151972.jpg)
ESTÁS LEYENDO
I Own You | Vsoo / Taesoo |
FanficBien se dice que las mejores personas son las que sufren más y Kim Jisoo es un claro ejemplo de eso, una chica con sueños, esperanza y un futuro por delante. Arrebatada de su libertad a los 20 años por un grupo de secuestradores para luego venderla...