¿Con Quién Me Casé?

Capítulo 2

Luego de terminar de cursar la última materia del día me voy a la cafetería, al entrar a la cocina me coloco el delantal negro, comienzo a preparar las bandejas con los pedidos y mis compañeras a llevarlos a las respectivas mesas.
Estoy dejando un capuchino en la bandeja cuando Fabiana me dice.
-¿Sofia podrías llevarlo tu a la mesa tres? Es que yo tengo que llevar un pedido al aula quince.
-Mmmmmmh que casualidad que siempre te pida a tí y tu muy bien mandada, ¿no?
-Tu has visto lo que es el profe de Geo?
-Si es muy lindo.
-¡¿Lindo?! ¿Pero tú lo has visto? Ese hombre mínimo es guapísimo y lo que le sigue. -Nos reímos. -Enseguida regreso.
-Si, pero no te demores que estamos con muchos clientes. -Digo guiñando un ojo.
-No, tranquila. -Dice sonriendo.
Ella se va con su bandeja y yo tomo la otra al llegar a la mesa, en cuestión, me encuentro con Axel.
-Hola Sofía...
-Pero eres peor que una pesadilla. Mira por la buenas soy muy buena pero por la mala soy la peor hija de puta del mundo así que evitarme, que no quiero problemas...
-En realidad te estuve buscando.
-¿Para qué?
-Para pedirte perdón, mi comportamiento no fue el adecuado y soy consciente que me pasé con los comentarios que hice.
-¿Solo te pasaste?
-Esta bien, estuve muy mal, pésimo, he sido el peor...
-Y lo que le sigue.
-Aceptas mis disculpas.
-Está bien, acepto tus disculpas.
-Bueno... Me presento soy Alex... -Sonó mi alarma.
-¿Oye tu no eres Axel? -Recuerdo que lo llamaron por ese nombre.
-No, soy Alex, saben confundirse al llamarme. Como se parecen los nombres.
-Si puede ser.

Desde el día que me pidió disculpas no ha dejado de aparecer en todos los lugares donde trabajo o a la hora de la salida.
-¿Otra vez tu?
-Si, te...
-¿Qué es lo que quieres?
-Conocerte, ser tu amigo y...
-¿Para qué?
-¿Por qué no?
-No sé, no confío en tí.
-Que directa eres.
-Pues si no te gusta ya sabes el camino.
-Sofia permíteme conocerte y permitete conocerme. Solo como amigos.
-Esta bien. -Digo no muy convencida, mi alarma sigue sonando diciendo que me aleje.
Me espera en la puerta cuando no tengo que ir a trabajar al restaurante nos vamos a tomar unos tragos o simplemente a conversar en la plaza si no tengo clases. Me divierto mucho, es gracioso, inteligente, culto y muy guapo.

Han pasado varios meses y nuestra amistad se hizo más sólida. Es una buena persona a pesar del mal comienzo forjamos una linda amistad.
Estamos en la cafetería del Shopping Center dónde siempre nos juntamos antes que entre a trabajar.
-Mi familia es como la tuya, todos somos abogado, yo trabajo en el estudio jurídico de mi abuela.
-Yo nunca me ví arreglando los problemas de los demás cuando no puedo resolver los míos. -Reimos.
Suena mi celular, al sacarlo de la mochila veo que es mi primo.
-Hola Macareno.
-Hola InMaca ¿Prima ya has recibido las cajas que envíe?
-Si, se me olvidó avisarte.
-No hay problema, ¿qué haces?
-Estoy con Alex en una cafetería...
-¡En un hotel deberías estar
-¡Macareno!
-Escuchame debes dar gracias al universo y a su creador que es hetero, porque...
-Somos amigos y nada más.
-Dale saludos. -Dice Alex riendo, cuando Fede habla lo escuchan un kilómetro a la redonda por su tono tan fuerte de voz, Alex es tan despreocupado, alegre como yo por eso quien nos ven juntos piensan cualquier cosas, se lo presenté a mis hermanos porque un día fue a buscarme para ir al cine, desde entonces mi vida amorosa es de público conocimiento familiar gracias a mi querida hermana.
-Te envía...
-Ya lo oí es que además de guapísimo es adorable, ¡es perfecto! ¿Dime... qué esperas?
-¡Somos amigos!
-Un permitido, existe los amigos con derecho a...
-Sabes que odio el derecho hasta en ese tema.
-Tu te lo pierdes.
-Te dejo.
-Dale de mi parte todos los besos que tú te niegas a darle.
Corté la llamada, veo a Alex está riendo a carcajadas,
-Estoy tan cansada de tener que aclarar que somos amigos.
-No todos creen en la amistad entre el hombre y la mujer, y menos cuando tienen el feeling, como el que tenemos nosotros.

Ha finalizado un semestre difícil porque fueron muchos exámenes, muchas horas de trabajo y pocas de descanso, pero el esfuerzo ha valido la pena, solo me queda preparar la tesis y rendirla.
En lugar de tomarme unas merecidas vacaciones he decidido seguir trabajando mucho para poder ahorrar así cuando me reciba y obtenga mi título de licenciada en bellas artes me vaya de viaje a recorrer toda Europa.
-Sofia necesito que limpies la cocina. -Caigo a la realidad de un solo golpe, pero pronto cumpliré mi sueño, lo sé.
Voy a atender, como no tengo clases trabajo todo el día, en las mañanas voy a la cafetería, al mediodía voy al restaurante y luego regreso al cafetería hasta la ocho de la tarde.
Es así que puedo ganar algo de dinero para poder ahorrar.
Estoy terminando de secar los vasos, cuando entra Ceci diciendo.
-Sofi, tu novio te está esperando afuera.
-Por enecima vez, no es mi novio.
-Hace meses que viene a buscarte...
-Si, pero somos amigos, eso es todo.
-Pues tonta, tonta y que requetetonta eres.
-Pues mira vivita, yo no caigo en sus encantos porque es el típico mujeriego y eso...
-¿Es qué lo buscas para casarte o qué? Pues tontas están los mujeriegos y también existimos las hombreriegas.
-Mejor me voy. -Digo riendo mientras tomo la mochila.
-¡Piensalo!
-Adios.