El Dilema de Oliver

Capitulo 9

Agua en calma

Estaba sentando afuera en las escaleras de Wallenfort esperando que sea el horario de visitas tenía un vaso de café de Starbucks en la mano y lo bebí en un intento desesperado de que calmara mí ansiedad de ver a Sam. Había armado un discurso largo en mí cabeza de como le pediría que me perdone de que jamás quise que sintiera que yo la juzgaba, al contrario quería ayudarla.
-Oliver- dijo Ana la enfermera de Sam- Ya comenzó el horario de visitas pero ella no quiere recibir a nadie. Está muy avergonzada por regresar aquí ¿Que fue lo que le pasó?
-Discutimos pensó que desconfiaba de ella y no es así yo la quiero ayudar.
Ana tomo mí mano dulcemente y me condujo hacia dentro, está vez ingresé por un pasillo diferente hasta una habitación color turquesa, Sam se encontraba recostada a su lado un hermoso florero con rosas blancas reposaba y perfumaba la habitación. Al verme se reclinó la cama para estar más cómoda.
-Se acaba de ir el doctor- dijo mirándome fijamente -Quiero hablar contigo
Me senté a su lado y le tome la mano había mucha tristeza en su mirada y algo de preocupación sabía que algo malo pasaría.
-Oliver el doctor me dice que tengo una depresión muy severa debido al trauma que experimente pero me ha ofrecido una alternativa a esto.
-¿Podrás estar bien?- le pregunté
-Si Oliver lo que me ofreció es someterme a lo que llaman Terapia Electroconvulsiva que sirve para casos como el mío.
-¿Qué es eso? No entiendo
-Es lo que comunmente se conoce como el electro choque
-¡Dios!- dije soltando su mano -¿Estás segura?
-No hagas esa cara es bajo anestesia es un método que tiene mala reputación pero es muy eficaz. Por lo que me explico actúa sobre el sistema nervioso y hace interacción con el cerebro solo que tiene una desventaja.
-¿Cuál?
-Puede hacerme perder memoria a corto plazo
-¿Olvidarás a tu familia? ¿Puedes ser más específica?
-Podria olvidarte a ti, olvidar que te conocí
-No- dije y mí voz se quebró -No puedo pedirte que no lo hagas por que jamás me opondría a qué mejoraras pero no puedes pedirme que no me duela la idea de que despiertes y no sepas quién soy.
-Lo se es horrible no quiero olvidarte pero si lo hago quizás vuelva a conocerte y que me agrades yo...
-No está sujeto a discusión Samantha si esa terapia te hará bien no sería tan imbecil de prohibirle que te sometas a ella no te haría algo así ¡Dios!
-Te advertí que esto sería muy complicado. Tenerme en tu vida sería así...
-¿Eso es lo que piensas?
-¡Es la verdad! ¿Que discutirías con Boe? ¡Respóndeme! Estarías peleando con ella sobre a qué universidad ir o cuando se casarían o cuántos hijos tendrían y ¿Que estás discutiendo conmigo? ¿Te das cuenta? Estamos discutiendo sobre una terapia de choque a la que voy a someterme
-Pero te lastimaron
-¡Claro que si! Pero nada de lo que se dice es verdad ni siquiera lo que yo dije ¡Es un asco! ¡Vete!
-¿De que hablas? ¿Que pasó Sam? ¿Qué pasó ese día?
-No podemos ser amigos,vete y no vuelvas no hay forma de que yo tenga paz.
-Voy a volver por ti ¿Oíste?- dije acercandome y tomándola de las mejillas la tenía tan cerca que sentía su respiración, sus mejillas estaban tibias, el frío de la noche anterior había desaparecido de su piel, tenía ese aroma a crema de frutos rojos que se colocaba todo el tiempo en el afán de que su piel huela siempre delicioso -Voy a salvarte de esto ¡Te sacaré de aquí!
Y me fui dejandola allí, me sequé las lágrimas que recorrían mis mejillas y salí de Wallenfort a toda prisa, no dejaría que Sam se hundiera porque yo quería salvarla.
Llegué a casa y encendí mí computadora al entrar a Facebook puse en el buscador Samantha Bell y se desplegaron un montón de resultados el primero con su perfil y muchos otros perfiles falsos además de grupos llamados "Odiamos a Samantha Bell", "Sam Bell mentirosa". Ingresé al perfil de Sam su foto de perfil era ella junto con un perrito y estaba sonriendo entre a su foto y comencé a deslizar varias fotos hasta que encontré aquello que estaba buscando "Increíble fiesta amigo" decía el pie de foto de Sam abrazando a James Delisario el hijo del alcalde de mi ciudad. Debía investigar que había pasado y seguramente por lo que había logrado en mí tarea de stalker, James, era un viejo amigo de Sam, su compañero de fiestas y  de una manera u otra el me  llevaría a la verdad.
***
-

Señor Delisario buenos días aquí tiene el resumen de la reunión de ayer- dijo la secretaria entregándole los papeles al alcalde - Y señor ha venido un muchacho por el puesto de ayudante
-Oh si ¿Cómo te llamas muchacho?
-Soy Oliver Banks señor- dije sonriente