Capitulo 6

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Las hamburguesas caseras de Gabin

Había podido dormir muy poco realmente pero luego de que mis amigos aceptaran ir al lago cerca de nuestras cosas realmente mí mente se alivió. Esa mañana estábamos estacionados frente a la casa de Sam increíblemente había aceptado mí invitación. Salió de su casa con una sonrisa llevaba puestos unos shorts y una remera larga y suelta y su cabello en una trenza larga y linda.
-¡Hola chicos!- dijo sonriendo mientras subía adelante para estar a mí lado mientras yo conducia
-Por fin te conocemos- dijo Alan sonriente- Oliver habla todo el tiempo de ti
-Oh bueno yo sé mucho de ustedes también, mis vecinas me han preguntado por los banana en pijama
Y todos nos reímos a carcajadas. Conduje por el final de la avenida pronto comenzó a sonar Safe and Sound- The capital cities y comenzamos a cantar alto mientras el aire tibio nos despeinaba el cabello y el sol fuerte iluminaba nuestros rostros. Pronto Sam se unió a nuestro coro y empezó a reír mientras cantaba y agitaba los brazos, estacione a unos metros de la orilla el lago estaba impecable el agua cristalina, bajamos las cosas y nos acomodamos abajo de la sombra de un sauce y Alan se trepó para poder colgar la soga que siempre llevábamos para poder balancearnos sobre el agua.
-Veras Sam- dijo Alan mientras terminaba de hacer los nudos- Siempre soy yo el que se avienta primero mis amigos, aquí presentes, no confían en que haga bien los nudos. Pero yo soy el mejor
-Quiero ver que seas el primero- Sam río
Alan se quitó su remera y luego se colgó de la soga para balancearse unos segundos hasta dejarse caer sobre el agua. Sam se quitó su remera y abajo ya tenía puesto su traje de baño enteriza azul marino trepó el árbol con bastante facilidad y se balanceo unos momentos hasta dejarse caer, Gabin y yo la imitamos. Nos salpicamos agua y reímos mucho tiempo en un momento empezamos a flotar cada uno sobre sus cuerpos, pronto dejé de escuchar el sonido de los pájaros y observé como el viento desprendía unas florecillas color morado y las depositaba tiernamente sobre el agua, y allí estábamos los cuatro flotando sobre el agua cada uno pensando en lo suyo. Con el agua tapandonos los oídos pero no los pensamientos porque cada ser humano en la tierra pagaría hasta lo que no tiene para poder callar los pensamientos que nos atan a cosas malas o aquellos que simplemente no nos dejan crecer, sería realmente hermoso ¿No? Digo... Poder dejar de pensar en como estaba Alan, si Gabin recordó no ponerle tomate a mí hamburguesa o en qué pensó Sam para aceptar mí propuesta, Sam mí nueva amiga con su sonrisa sus labios rosados y su cabello castaño que le sobrepasaba los hombros y ese aroma frutal que siempre la acompaña.
-Mi madre me ayudó a prepararlas- dijo Gabin repartiendo hamburguesas una vez que nos sentamos todos a almorzar -Sin tomate para el señor Banks
-Muy amable- dije recibiéndola
-Oigan- dijo Alan mientras abrazaba una bolsa de papas- Sería hermoso quedarnos aquí por siempre ¡Este lugar es grandioso! - Y acabó por meterse seis papas de un solo bocado
-Es muy lindo gracias por haberme invitado- Sam tomo con sutileza las papas de las garras de Alan -Se puede respirar aire puro
-Cuando quieras Sam siempre habrá lugar para la amiga de nuestro Oliver- afirmó Gabin con una sonrisa
-Mi niño está creciendo- Alan me abrazo mientras fingía que una lágrima recorría una mejilla -Ahora trae a su chica con nosotros
-¡Oigan!- dije mirándolos -Sam es mí amiga
-Asi es- Sam se bebió un sorbo de su coca-Pequeños ustedes que al parecer jamás han tenido una amiga mujer
Y todos reímos a carcajadas porque en parte era algo cierto, jamás habíamos tenido una amiga tan íntima como para invitarla con nosotros pero esto era un buen principio.
***
Peter, nuestro líder,era un ex alcohólico, gordito con su cabello castaño y siempre con sus camisas a cuadros pero con muchas ganas de ayudar a los demás había fundado el centro de voluntariado luego de que uno de sus mejores amigos, alcohólico también, falleciera por un insuficiencia renal. Eso lo hizo tocar fondo, o al menos eso dice él, porque para tocar fondo se necesita estar muy hundido en tu propia miseria ahogándose, sintiendo que el agua o el mismo aire ingresa por la nariz pero lejos de darte oxígeno solo te ahoga y solo ves oscuridad y te puedas observar por un instante, tu cuerpo tus brazos, tus manos, tus piernas que se mueven lentamente mientras una fuerza intensa te presiona los hombros y te empuja hacia abajo y aquella luz que es el afuera desaparece, pero pronto te acostumbras a qué el oxígeno falte y estás cerca, cerca del fondo y apoyas tus pies entonces estás en tu momento crítico. Ya no hay más oxígeno pero tu cuerpo ya no duele más te has vuelto parte de esa oscuridad, pero es momento de decidir apoyas tus pies en el fondo y ¡Que frío está! Pero, ¿Que harás? ¿Dejarás caer tu peso muerto y serás parte de esa oscuridad? O quizás ¿Dejarás que el frío del fondo te congele unos instantes para tomar impulso? De pronto  ves que tus brazos se mueven hacia arriba, no definitivamente no perteneces allí, tu cabello está más claro que de costumbre y tus mejillas pálidas pero luchas y aquella luz empieza a atravesar el agua o el aire, solo un poco más hasta que por fin, oxígeno, oxígeno de verdad ingresa a tus pulmones por medio de una bocanada desesperada y sabes que si, has tocado fondo realmente y sabes que todo será diferente porque a ese lugar no planeas volver nunca más.
- Bien equipo- dijo Peter sonriendo -Tenemos una integrante nueva déjenme presentárselas ella es...
La chica que había tocado fondo tal vez.

El Dilema de OliverDonde viven las historias. Descúbrelo ahora