ATARAXIA (Adaptación Yoonmin)

Capítulo 165.

Poco después de escuchar las palabras de Taehyung, el conde frunció el ceño. Tenía una mirada de consideración y reflexión.

"¿Se necesita la conferencia para llevarlo a cabo?", dijo, con firmeza.

Taehyung levantó su barbilla y lo miró con los ojos brillantes, sus labios carnosos, manchados con fluidos, se veían inmensamente malvados y astutos mientras sonreía.

"¿He dejado de satisfacerte? ¿Aunque sea una vez?"

Una breve sonrisa brilló en sus labios, dejando escapar una suave burla. Sus palabras eran ciertas, Taehyung le satisfacía, y más aún, le había servido bien todo este tiempo.

"...Pronto crearé una oportunidad para ti."

Finalmente, le dio una respuesta concreta, una que lo dejó contento, Taehyung sonrió alegremente, frotando su cara en su pierna.

"Sólo espera, definitivamente robaré el corazón del rey por ti."

Después de haber regresado de los terrenos de caza, con el odio llenándole el corazón, Taehyung le propuso inmediatamente un plan al conde, que siempre tenía miedo del rey.

El rey de Arundell podía encargarse del conde cuando lo deseara, a pesar de eso, el conde codiciaba con ansiedad el trono del rey. Con la esperanza de poder robarlo, una pequeña oportunidad apareció y Taehyung se aprovechó de ella.

"Te ayudaré convirtiéndome en el amante del rey", dijo Taehyung, lamiéndose los labios

Al escuchar sus palabras, el conde puso una mirada de preocupación genuina. Estaba consciente de las capacidades de Taehyung y sabía lo que él sería capaz de hacer una vez que se acercara al rey. No solo eso, sino que también obtendría un inmenso poder y ventaja.

¿Estaba Taehyung seguro de sí mismo?

Por supuesto que lo estaba.

Cuando se presentara la oportunidad de conocer al rey, planeaba atraerlo con sus encantos, haciéndolo caer en una trampa, el rey caería como cualquier otro hombre que deseara su apariencia y su cuerpo.

Como Taehyung sólo era su amante, el conde podría dejarlo hacer lo que quisiera.

"Haz tu mejor esfuerzo", dijo el Conde Choi.

Taehyung asintió, sonriendo.

***

Después de esa noche, Jimin no se había molestado en reunirse con Yoongi, ni siquiera una vez. Por otra parte, aunque estaba al otro lado de la puerta, sentado trabajando, Yoongi nunca había puesto un pie en su habitación.

Jimin desempeñó bien su papel, haciendo todo lo posible para asegurarse de que todo estuviera bien en la superficie.

'Esto es algo bueno', pensó.

Era mejor vivir juntos apáticamente que resultar heridos.

Se había repetido estas palabras mil veces, pero en el fondo, sabía que su corazón decía lo contrario, que se sentía solo y amargado.

También, su relación con el Duque Seokjin se volvió incómoda y tensa. Jimin había querido disculparse, sabía que estaba equivocado, pero su orgullo y ego no le permitían hacer ningún esfuerzo para reconstruir su tensa relación.

Así que...

Decidió que su relación con el Duque Seokjin había terminado.

"No le he dicho una palabra a Su Majestad."

El Duque Seokjin dijo un día.

"Sólo le dije que regresaste temprano del banquete de bodas de la Duquesa porque te sentías triste y mal, nunca le mencioné a quién viste, tampoco que vomitaste. Sólo le informo de esto por si acaso."

Los labios de Jimin se separaron, su cara demostraba que estaba sorprendido, pensaba que el Duque Seokjin ya le había contado todo a Yoongi.

"...¿No te preguntó sobre ello?" Jimin preguntó.

"Lo hizo", el Duque Seokjin sonrió amargamente, "Me molestaba constantemente por ese asunto sin parar. Mi Consorte, probablemente no podrá imaginar la cantidad de presión que pone para hacerme hablar."

El Duque Seokjin dio un gran suspiro.

Por su expresión, Jimin pudo entender la cantidad de presión y agotamiento que él sufría.

"Duque Seokjin, sobre lo ocurrido la última vez... Lo siento", murmuró Jimin amargamente. "Arremetí contra usted cuando no debería haberlo hecho, no ha sido su culpa, sino de mi propio complejo de inferioridad."

"Por favor, no tenga ese tipo de pensamientos, mi Consorte, después de todo, es cierto que desobedecí sus órdenes. No nos preocupemos más por eso."

El Duque Seokjin acarició el dorso de la mano de Jimin y sonrió.

Jimin le devolvió una sonrisa gentil.

Aunque no dijeron nada, el silencio era todo lo que necesitaban para entenderse.